-Los policías me atraparon y me sacaron de la habitación – continuo - nuevamente me iban a esposar, no podía soportarlo, así que maniobre con los dos policías que me llevaban y los tumbe haciéndolos caer – me imaginaba cada suceso según Daniel lo relata – los policías que estaban en la puerta se acercaron a grandes pasos para atraparme pero me percaté que la ventana estaba abierta por lo que escape por ahí, en esa habitación se quedaba mi vida completa, mi Elena ya muerta.
-Lo siento mucho.
-Esa noche escape de la ciudad, no sabía exactamente a donde dirigirme, pero en ese momento me acorde de mi amigo de la universidad y lo llame, él me brindó refugio en su casa y a la mañana siguiente yo estaba con él, le conté todo lo sucedido y el confió en mi palabra, ese mismo día las noticias no se hicieron esperar, todos hablaban de mí, de la muerte y de mi fuga, cada estación de policía tenía mi foto y la recompensa por mi captura circulaba en ella también.
-¿Hace cuánto fue todo eso?
-Dos años.
-Continua, por favor.
-Me escondí por varios meses en la casa de Juan Pablo, estaba inmerso en la depresión también pero él me ayudó a salir adelante, solo pensaba en vengarme, vengarme de Eduardo y así lo hice.
-¿Cuál fue tu venganza?
-Estaba cegado por el dolor y si la policía me iba a atrapar por asesinar a alguien pues entonces le daría su asesinato, por muchos meses seguí el rastro de Eduardo, sabía todo lo que hacía, una noche lo seguí a su departamento, sabía que estaría solo como todos los jueves por la noche, entre y cuando él se disponía a ver la televisión me pare frente a él y extendí mi arma... Dos tiros en el corazón fueron suficientes. – bajo la cabeza.
-¡Daniel!
-Lo siento, no sabía lo que hacía, yo amaba a Elena, el lo sabía, el daño que tenía en mi corazón nadie me lo iba a reparar.
-Habían otras alternativas.
-¿Cuáles? – me miro – la policía pensaba que yo era él asesino.
-Entonces, fue cuando huiste de nuevo. – indague.
-Juan Pablo me dijo que era una tontería lo que había hecho y que ahora si debía huir, la policia aún estaba en mi búsqueda y debía desaparecer por un buen tiempo, él tenía un amigo en la iglesia católica y él le contó la muerte de un sacerdote en un pueblo casi olvidado por el mundo – me miro – era la oportunidad perfecta para borrarme de este planeta por un tiempo.
-Y ¿llegaste a mi?
-No – suspiro – yo no quería, yo quería enfrentar todo pero Juan Pablo me dijo que no, que debíamos buscar una salida porque yo no había asesinado a Elena, después de un mes de discusiones finalmente accedí, él pidió información a su amigo y este le dijo todo, claro sin saber lo que Juan Pablo planeaba.
-¿Pensabas irte después de los seis meses, finalmente?
-Si – bajo la mirada y continuó con la historia a los segundos - la partida del padre que iría a tu pueblo se daría de noche, pues un viaje en carretera es largo, salimos esa misma noche y lo esperamos a la noche siguiente en el pueblo cercano a Mompi, ahí atrapamos el carro que conducía y Juan Pablo se lo llevó.
-¿Está secuestrado como dijo Roger?
-No – me miro inmediatamente – le dijimos que nada malo sucedería, que solo iba a ver un cambio en las órdenes, en otro pueblo se necesitaba un sacerdote también, ahí lo llevo Juan Pablo.
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ME ENAMORÉ DE TI
Teen FictionEl amor y la vida siempre nos ponen en situaciones complicadas que casi nunca entendemos, pero dicen por ahí que el corazón jamás se equivoca, ¿será cierto? En un pequeño pueblo se desatara una historia de amor no convencional entre una pareja que...