ME ENAMORÉ DE TI

Capítulo 29

*** DOS SEMANAS DESPUÉS ***

-Estás muy bella, mami – la mire por el espejo mientras le acomodaba una vincha de su cabello – Freddy se va a casar con la mejor mujer de todas.

-Amor – tomo mi mano – tú eres mi mayor tesoro, gracias por estar aquí conmigo.

-Jamás me perdería este día – me apoye en su hombro y bese su mejilla – pero ni se te ocurra llorar – le sonreí – hoy no se permiten lágrimas, solo risas y más risas.

-También se llora de felicidad.

-Si pero hoy no es el caso – volví a su cabello – con esto terminamos, me imagino que Freddy debe estar impaciente.

-En efecto está impaciente – Doña Carmen entro al cuarto y se quedó paralizada al ver a mi madre vestida de beis – Julieta – se nos acercó – eres una novia muy bella.

-Una novia pasada de edad – río y se levanto de la silla – me siento un poco ridícula.

-Nada de eso – Doña Carmen se acercó – no hay edad para el amor y mira que aquí estamos dos que damos fe de esto – me miro – esta niña se enamoro a los 17 y yo a mis años – llevo las manos a su boca con una risa – que no voy a decir cuántos son.

-Espero que pronto nos presente a su novio. – hable

-Pronto lo haré – se acercó y arreglo el escote de mi vestido – vamos bajando porque si no los novios se van a impacientar.

-Dirás el novio. – sonreí.

-Hablo en plural porque Daniel ya está desesperando a Vanessa porque no bajas – se miro en el espejo – y ni que digo de Freddy que a regañadientes tuve que mandarlo a la iglesia.

-Entonces vamos – tome la cartera de la cama y agarre el brazo de mama, las tres mujeres salimos de la habitación, mi mama se adelantó un poco para que doña Carmen y yo pudiéramos tomar la pequeña cola que sobresalía de su vestido, ella se veía hermosa como novia, jamás había tenido la oportunidad de verla así, ya que con mi padre nunca se casó pero me sentía feliz, ella estaba feliz.

Bajamos las escaleras y nuestros amigos aplaudieron al vernos bajar, en la sala estaban Vanessa, Luis, Daniel, Juan Pablo, Diana, Omar y Sofía, una vez llegamos a la sala estos llenaron de abrazos a mi madre, habíamos llegado hace dos dias atrás y todos ya se sentían en confianza.

-Te deseo la mayor felicidad de esta vida, Julieta. – Sofia le dio un abrazo a mi mama.

-Lo mismo le digo – Diana se unió al abrazo – usted es una mujer extraordinaria y merece lo mejor.

-Gracias a las dos – mi mama las tomo de la mano – se ve que ustedes son unas mujeres increíbles y estaré feliz de compartir mas momentos así – miro a mis dos amigos – tienen que cuidar a estos tesoros – sonrió – mujeres así son muy escasas.

-Eso no lo tengo muy claro – Juan Pablo tomo la mano de su novia – quizás en un tiempo no muy lejano estaremos en otra boda – beso su mano y después miro a mi mama – gracias por hacernos parte de tu felicidad, Ángeles es una gran amiga y estos eventos nos unen mucho mas.

-Dejemos las palabras lindas para después – Doña Carmen volvió a tomar la cola del vestido – tenemos que ir a la iglesia antes de que a Freddy le de un infarto, además después vuelven a aparecer las lagrimas y no queremos eso, como dijo Ángeles, hoy es día de sonrisas.

-Estas muy bella, princesa. – Daniel me susurro en el oído una vez estuvimos fuera de la casa.

-Gracias, mi amor, este vestido lo compre pensando en ti. – sonreí bajando la miranda con picardía.