1° nervios.

10.3K 235 13
                                    

"Sentada en la fina alfombra de flores observando cómo las nubes se marchaban dando paso a un sol deslumbrante, Jacob y mi mama hablaban bajito lejos de donde yo me encontraba. Cerré los ojos cansada de tantos cotilleos que no me contaban, parecían amenazas hechas en voz baja, silenciosas. Me asusta pensar que algún día sean reales y no simples advertencias..."

-Eh, linda.

Sin darme cuenta ya me encontraba frente al bar donde mis padres me llevan todos los findes solo por tradición. Mire al chico que parecía interesado en mi y suspire intentando mirar al suelo pero el chico se iba acercando mas a mi hasta que se puso delante aplacándome para que no pudiera seguir mi camino.
-Linda porque te alejas de mi me tienes miedo?
-No.
Solté demasiado ofuscada como para intentar controlar mi ira.
-eh... eh... nena tranquila que estas en buenas manos.
Empezó a reírse haciendo sobresalir unos dientes demasiado afilados como para ser humanos. Asustada respire profunda mente y también sonreí enseñándole mis dientes.
-Em... lo siento pero creo que te has equivocado de chica. Buena suerte la próxima vez que no te encuentres con una vampira.
El se quedo sin habla y yo proseguí mi camino hasta que el pesado me volvió a alcanzar esta vez con los ojos rojos y los colmillos totalmente fuera.
-Tu olor es el de una humana así que eres humana y yo tengo hambre.
Con mi dedo índice di a entender que estaba equivocado.
-Yo tampoco lo entiendo tampoco me eh planteado buscar respuestas pero así es.
Como la conversación ya comenzaba a molestar decidí que ya era hora de empezar a correr y así lo hice hasta llegar a la Push. 
Por desgracia Jacob se encontraba en una roca en la orilla observando el mar.
Comencé a pensar rápido, el chico aun me seguía si no huía a junto alguien que me pudiese proteger acabaría echa cenizas así que me acerque a Jacob por detrás hasta que se dio cuenta de que yo me encontraba allí por culpa de una maldita piedra y el ruido de las pisadas algo que aun no sé hacer es ser sigilosa tenia que apuntarlo en mi agenda de "cosas aun no echas".
-Ness que haces aquí?
Pregunto Jacob sin moverse ni un solo centímetro.
-Yo... yo... 
Tartamudeé como una loca mientras miraba a todos lados temiendo que mi padre leyese la mente de Jacob y vinieran a por mí y me devolviesen al colegio. Jacob se aclaro la garganta y giro la cabeza para poder mirarme.
-Puedes sentarte conmigo y me lo cuentas después te llevare  a tu casa...  cuando sea la hora de comer.
Me guiño el ojo y yo me quede sin respiración.
Antes estaba como llorando y ahora parece sorprendido y contento por mi visita.
Me senté a su lado y comencé a relatar toda la historia. Cuando termine Jacob me miraba fijamente.
-La que distrae al chupa sangre de tus pensamientos no eres tú, es Bella. Y los chicos... pasa de ellos, tu eres mejor mil veces y si sigues teniendo problemas o te tocan un pelo -Apretó el puño contra su pecho- no vivirán para contarlo.

Dijo Jacob acercándose demasiado, más de lo normal a mí.

-De eso hablo, Jacob quiero ser una niña normal con problemas normales no con tantas muertes encima mía por salvarme a mi... 

Nos pasamos horas y horas hablando hasta que la hora de comer nos llego rápido y tuvimos que irnos a mi casa.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

-Nessie, despierta. 

Me susurro Paul al oído cogiéndome en brazos mientras mis ojos se abrían poco a poco para ver que Carlisle mi abuelo me estaba esperando ya al lado de la pesa donde miraba mi peso y altura, lo de siempre. Después de hacerlo me dejaron en el suelo y me fui directa a desayunar con toda la manada de lobitos que rodeaban a Jake por los dos lados de la mesa como siempre Leah a su lado como una lapa pegajosa que no se quita ni con una espátula. Paul me cogió de la mano y me aparto la silla para que pudiera sentarme y el se sentó a mi lado mientras los ojos de Jake me miraban fijamente y parece que eso enfureció a Leah que soltó un bufido lobuno que hizo que mis padres aparecieran por la puerta de la cocina directamente hacia mí con un vaso de zumo de sangre (algo que odio y ellos llaman "zumo normal de naranja" (buag) tortitas y un vaso de leche.

Mi padre y Paul se rieron a carcajadas mientras yo les sonreí centrándome en la cara rara que ponía mi madre y fue mi padre el que hablo por mí. 

Siguieron riendo mientras yo aparte mi mano de la de Paul y volvía mi mirada a mi desayuno algo incomodo por culpa de Jake. Mis padres rápidamente se centraron en conversaciones con la manada mientras me dedicaba a acabar el desayuno. 

Me levante de la mesa y fui a cambiarme. Un vestido rosa con vuelo me esperaba en mi habitación algo que por una vez me encantaba con una nota al lado. 

"Nos gustaría estar en el ultimo día de tu colegio pero Alice a decidido ir de compras y tú ya sabes cómo se pone por la ropa..."

Un beso Alice y Jasper 

Psd: Tienes el armario lleno de ropa no le cojas el maquillaje a tu madre estarás preciosa un beso de tu tía Alice." 

Me quite el pijama y me puse rápido el vestido y en el pelo una coleta del mismo color. Cuando termine de colocarme los zapatos la puerta se abrió de repente asuntándome.

-Renesmee tienes que irte ahora así todos estaremos tranquilos.

Dijo Paul cogiéndome por primera vez en mi vida por el brazo obligándome a mirarlo mientras me llevaba hacia la ventana.

-Yo no quiero irme, y mama y mi papá saben algo de esto? y Jacob?

-Si lo saben. Esto lo hago por todos nosotros porque tu siempre piensas en ti misma no en los demás!

Sus gritos no me parecían humanos, su rostro se estaba convirtiendo en puro odio y sus ojos ya no eran de color ámbar estaban rojos, parecía que había estado llorando durante horas.

-Lo siento.-Dije acercándome a la ventana - No os volveré a molestar nunca más- Salté cayéndome en el césped de pie y me fui corriendo hasta perderme en el bosque.

-Ya no quiero saber más de nadie solo quiero estar sola... - Susurre  tristemente.-

Renesmee (amanecer part.2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora