Nunca pude imaginar -[Pausada:Falta de imaginación]

Capítulo 10 - ¡Sorpresa!

Eileen dormía tan plácidamente cuando Melanie la despertó.

- ¡Leen! Despierta. Está tu madre abajo.

- Dile que ahora bajo... - dijo volviendo a cerrar los ojos.

- Va Leen para abajo, no quiero ser mala, pero como no te levantes llamó a Álex para que te saque de la cama. - rio maliciosamente.

- Eso no lo digas ni en broma. - dijo levantándose de la cama.

- ¡Funciona! - susurro Melanie.

Eileen bajo corriendo hacía el salón donde se encontraba su madre.

- Hola cariño. - le dijo Jane a su hija.

- ¡Mamá! ¿Qué haces por aquí?

- Venía a ver a mis hijos, que hace ya mucho tiempo que no los veo. Bueno a ti, porque tu hermano me han dicho que no está.

- ¿Y papá?

- De reuniones... Pero cuéntame ¿cómo os va el verano?

- Bien mamá, bien.

- Uh... No sé pero hay algo que me dice que no te crea... - el móvil de Jane empezó a sonar. - Bueno mi amor, me tengo que ir. Nos vemos pronto.

- ¿A dónde vas?

- Al Spa, que me he echado unas amigas. Bueno dale un beso a tu hermano de mi parte.

Cuando Jane salió del apartamento, Melanie fue a sentarse a su lado. Cuando bajó Álex de su habitación.

- Qué bien se duerme solo. - dijo por las escaleras. - Buenos días chicas. - dijo yéndose a la cocina.

- ¿Qué le pasa a este chico? Se le ve feliz. - le susurró Melanie

- ¿Ya habéis desayunado? - chilló este desde la cocina.

- No. - contestó Melanie.

- ¿Os preparo el desayuno?

- Como quieras... - rio Melanie

- Vosotras poner la mesa afuera

Las chicas extrañadas por el comportamiento de su compañero, se levantaron del sofá y fueron a poner la mesa.

Mientras Melanie estaba poniendo los pequeños manteles, Eileen entró en busca de los vasos y el zumo.

- ¿Qué te apetece? - le pregunto Álex.

- ¿Qué me apetece? - Besarte pensó, haciendo una pequeña pausa. - Con un Cola cao y cereales ya me apañare.

- ¿Qué habías pensado? - dijo mirándola a los ojos.

- Estaba pensando que quería para desayunar.

- ¿Y qué es lo primero que te vino a la cabeza?

- Pues... - Eileen se puso nerviosa, acaso ¿Álex podía leer la mente?

- ¿Cómo va el desayuno? - preguntó Melanie. - Me estoy muriendo de hambre.

Aprovechando que Melanie había distraído la situación aprovecho para salir al porche.

Pronto Melanie salió con un plato lleno de cruasanes y con la caja de cereales.

- Mel... Por favor, no me dejes sola con Álex.

- ¿Por? - preguntó ella extrañada.

- Aquí tenéis vuestros Cola caos, voy a por el mío. - dijo Álex.