comprada por un yakuza feilon y tu

capitulo 16

Feilong.

Estaba revisando unas cuantas cosas referentes al casino y una llamada de (tu nombre) me interrumpió, al tomar la llamada lo primero que escuche fueron sonidos de disparos en el fondo, mi cuerpo se estremeció, no perdonaría al que dañara algo que me pertenecía.

-¿que pasa?, ¿donde estas?, ¿y tus guardias?. Pregunte.

-uno esta muerto, y los demás siguen disparando, ¡tengo miedo!. Me respondió.

-espera, no me cuelgues. Llame a mi secretario.
-rastrea el teléfono de (tu nombre), algo esta mal.

-si señor. Me respondió y volví a el teléfono.

-ya estamos rastreando la llamada, aguanta. Le dije.

-yo no estoy haciendo nada, los que tienen que aguantar son los guardias, uno murió, por favor ven por mi. Me decía aterrada, la furia invadía cada una de mis venas, mataría al culpable, esto nunca me había pasado, tenia mujeres, me había encontrado con chicas que me atraían pero esta en especial tenia esa fuerza que la hacia tan llamativa, esa mirada con esa fortaleza inquebrantable, desde que la vi me propuse que la única persona que quebraría ese orgullo seria yo.

tratando de domar esa mirada, ese orgullo, esa fiera interna, me encontré con alguien a quien podía leer en sus ojos lo que le sucedía, sin embargo tan impredecible a la vez, y ahora estaba en peligro, asustada y aterrada por alguien que podría dañarla, mi mente viajaba entre mis enemigos y todos eran capaces de hacer algo como esto.

-mi secretario entro con la dirección y sin perder tiempo salimos, pero cuando estuvimos en el lugar solo encontramos los cadáveres de mis hombres y sangre en el interior del auto, el solo pensar que ella estaría herida y en manos de uno de mis enemigos hacían que cada célula de mi cuerpo se pusiera en estado de alerta, no me gustaba, odiaba cuando alguien tocaba lo que era mio.

no tuve que mencionar palabra, solo diriji mi mirada a mi secretario.

-la encontraremos. me afirmo y esperaba que así fuera.

al llegar otra vez a mi oficina esa chica estaba blanca como un papel y con una mirada de pánico, me explico sobre su advertencia y mi furia exploto, ¿por que me entero hasta ahora de eso?, ella debería saber en clase de mundo estoy metido, aquí no solo puedes esperar que tu enemigo haga el primer movimiento, ellos siempre están buscando la forma de quitarte del medio.

-cuando confirme que esta viva, voy a castigarla muy fuerte cuando la recupere. dije apretando un vaso de licor que tenia en las manos, esta situación solo me hacia sentir impotente,eso no solo me molestaba, sacaba lo peor de mi, al final del día solo teníamos informe de rumores, pero nada seguro, ¿donde estas?, esa pregunta aparecía en mi mente constantemente como si esperaba que ella me respondiera, en el poco tiempo que habíamos estado juntos tenia fuertes sentimientos por esa chica, tanto que no me importaría ir a meterme en la guarida del lobo solo por recuperarla, solo esperaba que en el momento que ella regresara esa fiera mirada estuviese intacta, no perdonaría a nadie que me robara ese brillo, ese orgullo, esa fortaleza, yo, solo yo podía romper eso, solo yo podía verla indefensa, solo yo podía sostenerla, ella es mía, solo mía.

así tenga que pasar por encima de quien sea, esa mujer era mía y la recuperaría.