Chat Equivocado

Especial 5K

¡Llegamos a las 5K de vistas! ¡OMG! Creo que puedo morir en paz. Puede que ya lo haya dicho y estén cansadas de leerlo pero sin ustedes esto no habría sido lo que es hoy. No es que esta sea la mejor historia del mundo pero mientras a mí me guste escribirla y a ustedes leerla me siento muy feliz. Ahora, de especial voy a darles un regalillo, voy a publicarles aquí mismo el primer capítulo de la que sería algo así como la continuación de esta historia. Se llama "We're idiots", ¿por qué? Porque en inglés todo suena más cool :'v

También estaba pensando en que si tienen dudas al respecto de esta historia o de mí pues pregunten, estoy abierta a todo tipo de preguntas :3

Ahora sí, aquí les dejo el primer capítulo, que lo disfruten ;)

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Capítulo 1: Convivir con el enemigo.

Desde que tengo memoria ha estado ahí, en mi nacimiento, en cada uno de mis cumpleaños, en cada una de las celebraciones, siempre ha estado con nosotros y finge ser algo que no es. Cuando lo ves en público es todo sonrisas, encanto y bonitas palabras para endulzar oídos; no voy a negar que estuve enamorada de esa imagen que presentaba durante años, demasiados para mi propio bien, demasiados para mi salud mental. 

Empecé con acercamientos sutiles cuando apenas tenía unos cinco años, será, y él no hizo nada por evitarlo a pesar de que tiene cinco años más que yo. Siempre hemos estudiado en el mismo colegio ya que la tía Cara, el tío Jesse, Mamá y Papá querían que nos hiciéramos amigos como ellos, al principio todo iba bien, a veces jugaba con él y me ayudaba en las tareas, me encantaba simplemente verlo, podía estar durante horas mirándolo y nunca cansarme de sus ojos verdes hasta que... empezó a crecer.

En público muestra una imagen que no es nada parecida a como es en realidad, a medida de que pasaron los años empezó a volver agresivo, sarcástico y algunas veces tan frío y calculador que podías sentir el frío en el aire; obviamente sus padres no conocen esta faceta de él, solo es así con sus amigos y las chicas que se le acercan constantemente. A raíz de esto me alejé de él y le pedí a mi madre que me cambiara de escuela, ella pensó que, como insistía tanto, sería buena idea mandarme a Texas con mi tío, algo a lo que no me negué.

Estando aquí he empezado una nueva vida, él ha quedado en el pasado y durante seis años fui completamente feliz... hasta que él decidió comenzar a trabajar, ¿dónde? Pues ¿en dónde más sería? Aquí, en Texas, pero no conforme con estar en el mismo estado que el mío, decidió estar en la misma ciudad y, lo que es peor, en el mismo edificio pero lo que es aún más peor es que es en el mismo apartamento. 

Ahora Mitch está aquí, invadiendo mi espacio, mi tío se ha ido a Italia de nuevo así que me las tengo que ver sola con él, lo bueno es que no se intenta acercar, suficiente tuve con esos años de ser cruelmente tratada por quien creía el amor de mi vida, así que cada uno va a lo suyo, apenas si intercambiamos unas cuantas palabras de buenos días, un "hoy lavas la ropa", o "hoy lavas los platos"... en fin, cosas triviales y sin sentido que aceptamos, o aceptaba hasta que empezó a llevar a chicas a la casa.

-¡Al menos tira los putos condones! ¡Para eso existe una maldita papelera!- le grito entrando a su habitación sin permiso y tirándole uno de los condones usados que había en la alfombra de la sala de estar.

-¡Qué asco, joder!- grita esa última palabra en español, el que haya ido a España durante cinco años no lo hace un español de sangre pura pero él lo cree así, mejor dejarlo con sus fantasías.

-¡Pues quién mierda te manda a dejar tirados los condones en la puta alfombra!- tengo lenguaje de camionero pero me da igual, él me saca de quicio... a veces, otras veces solo lo ignoro.