Twelve -EXO

Capítulo 18- History Pt.2

Doce pares de ojos observaban a la chica frente a ellos, mientras que ella les devolvía la mirada, incrédula. Estaba sorprendida, y se analizaba a si misma del mismo modo en que los chicos la observaban.

Finalmente estaba ahí, había logrado romper la corteza, era libre.

Todos pensaban lo mismo, sin embargo, ninguno se atrevía a decirlo en voz alta, por lo que se limitaban a observarla en silencio.
A juzgar, por su criterio, si esa chica tan diferente, tan fuera de lugar; era una amenaza. Los criterios de todos los llevaron a la misma conclusión: no era uno de los rojos.
No podía serlo.

Y por supuesto que estaban en lo correcto, ella era, después de todo, el objetivo principal de aquellos seres de oscuridad.

-Como te llamas? -la voz de uno de ellos finalmente rompió el silencio.

Ella sonrió para si misma. No sólo por el hecho de que ninguno la conociera cuando ella sabía todo de ellos, sino por que estaba segura de que aquel sería quien hablaría primero. Aquel de sonrisa perfecta y actitud protectora. Aquel que había sido el primero en visitar el árbol cuando moría.

-No tengo nombre... Pero me conocen como el árbol de la vida.

Las leyendas quedaron atónitas ante tal revelación, era imposible aquello que la chica decía, sin embargo, no les quedó más que aceptarlo cuando miraron al árbol y parecía como si de su tronco hubieran hecho un hueco, como si algo hubiera salido de él.

Y si eso no era prueba suficiente, en ese momento el árbol -tanto la planta como la chica- comenzaron a brillar levemente.
Tanto en la corteza, como en su piel, pequeñas espirales doradas resaltaban, para luego desaparecer en cuestión de segundos.

Los doce chicos, de inmediato lo aceptaron.

-Todos deberían tener un nombre- la examinó aquel chico que había hablado antes.

Ella se encogió de hombros.

-Te llamaré Kaeri, ¿te parece? - su voz era amable, su sonrisa genuina -yo soy Suho.

Se sintió conmovida y asintió.

Lo sé. Quiso decir. Sabía quién era cada uno de ellos:

El noble Suho, el escandaloso Baekhyun, el sonriente Chanyeol, el juguetón Chen, el sensible Tao... Los había observado ya por demasiado tiempo como para no conocerlos.

Kaeri.

El nombre resonó en sus oídos. Sonaba bien cuando ellos la pronunciaban.

Uno de sus miedos cuando estaba aislada era el momento en que se encontrara con cada uno de ellos. ¿La irían a aceptar?

Para su sorpresa, desde que apareció todos la recibieron de manera cálida. Después de todo, cada uno de ellos llevaba dentro de sí una parte del árbol de la vida, un poder que los vinculaba a ella.

Con gran entusiasmo, todas las leyendas se reunieron alrededor de la chica, bombardeándola con miles de preguntas, muchas de las cuales ni siquiera ella sabía cómo responder.

Todos, excepto el menor. Algo mas había cautivado su atención... como si el viento lo moviera, como si susurros en el aire lo hipnotizaran, caminó hacía donde se encontraba la corteza del árbol de la vida.
Aquellas marcas que se habían reflejado tanto en el cuerpo de la chica como en la madera aun seguían grabadas en la corteza, y no era cosa del azar, puesto que lo que había eran palabras:

Había encontrado una profecía....

La leyó en silencio, la primera no la entendió por completo, por lo que repitió la lectura por un par de veces más. Aquél primer párrafo había cautivado su atención de sobre manera. El chico de cabellos blancos lo leyó una y otra vez: