Twelve -EXO

Capítulo 25. Guardián de EXO

Frente a ellos, se extendía un agujero de agua oscura, en donde había tan poca luz que no era ni siquiera posible saber que tan profundo era.

No había tampoco otra entrada, ni otra salida... y todo lo que tenían eran los sueños que, la chica aclamaba, le indicaban a donde estaba su líder.
Y aquella marca en las paredes negra, un hexágono que brillaba en medio de la pared de oscuridad.

Unos de ellos, creían fielmente en ella, así como en su papel como el árbol de la vida... mientras que otros, cansados y afectados por los múltiples susurros que se escuchaban dentro de aquel laberinto de oscuridad, hacían que comenzaran a cuestionar la fé en si mismos, y en todo aquello por lo que alguna vez habían luchado.

-Voy a entrar- afirmó Kaeri después de que todos se mantuvieron callados analizando el lugar.

Ella podía sentir como su corazón prácticamente le gritaba que saltara, que su amado líder estaba ahí abajo.
El rey, a quien desde que despertó había buscado.

-No sé si sea lo mejor que todos vayamos- dijo Kris, poniendo la mano sobre Kaeri.

Kris se veía fuerte, tenía que serlo, porque él era el otro líder, pero un escalofrío recorrió el cuerpo al sentir aquél toque, claramente afectado por la oscuridad.
La chica temió y dio un paso a atrás.

-Pretendes separarnos? - dijo Luhan, algo contrariado.

-Si es cierto que esta es la única entrada...- se explicó Kris - podemos defender de aquí si alguien pretende entrar o salir.

-Entonces, cual es el plan? - dijo Sehun, frunciendo el ceño.

-Mi propuesta es la siguiente - siguió hablando es el más alto, mientras los demás lo rodeaban en silencio para prestarle atención- estaremos bajo el agua, lo que significa que algunos de los poderes no servirán allá abajo. Digo que algunos nos quedemos aquí, vigilando la entrada, mientras que otros vayan por Suho, Kai se tele transportará para mantener a ambos grupos unidos.

Después de analizarlo, todos aceptaron.

-Yo iré al agua, puedo alumbrar el camino- propuso Baekhyun.

-Chanyeol y yo somos inútiles ahí- dijo Kris, mientras que el aludido asintió.

-Yo puedo ir- dijo Chen, y todos lo como miraron si estuviera loco.

-Quieres freírnos ahí abajo? - se burló Kyungsoo.

-Pero...

-Te quedas- dijo Kris sujetándolo.

-Yo puedo darles aire, voy- aseguró Sehun.

Kai, Sehun, Kyungsoo, Lay, Baekhyun y Xiumin acompañarían a la chica a traer a Suho, mientras que los demás se quedarían arriba, defendiendo la entrada.

Pero aquello eran aguas oscuras, dominadas por los rojos, por lo que tan pronto se lanzaron al aguan, sintieron como si se estuvieran ahogando, y no debido a la falta de aire, porque Sehun hacia un buen trabajo procurando que este no faltara, pero por que los gritos comenzaron a amplificase... y con ellos el llanto, la tristeza y el sufrimiento.

Todos aquellos recuerdos, incluso de los que se habían mantenido fuertes hasta ahora, comenzaban a afectar en la cabeza de cada uno.
Sentían como las sombras los rodeaban, como manos invisibles tocaban su cuerpo, como lentamente comenzaban a ser arrastrados a lo más profundo de las aguas negras.

Pero la luz de Baekhyun aun brillaba, y su luz les hacía ver que aún había esperanza.

Kaeri dejó de nadar un momento, preocupada por Kai, sabía lo testarudo que era el chico moreno, y lo mucho que luchaba para mantenerse a su lado aun cuando no daba más.
Sabía que, en este momento, los susurros le afectaban... porque era el árbol de la vida y estaba conectada a cada uno de ellos.

El dolor de los 12, era el suyo.
Nadó hasta él, y puso su mano sobre la suya.
Todos los demás se detuvieron, contrariados al ver que la chica se detenía.
Pero todos eran uno, y por lo tanto ninguno juzgo.

Todos le dijeron que estaba bien, que podía irse.
Todos entendieron cuando Kai se separó de su lado y volvió a tierra firme.

La luz de Baekhyun brilló con más fuerza, y con ella, llegó a su mente la razón de por que aguantaba todo esto.

Recordó cuando aún estaba atrapada dentro del árbol, como sentía un vacío y frustración al estar siempre tan sola.

Y recordó, cuando su líder llegó por primera vez.

Desde aquel momento en que vio su sonrisa, juró que saldría de ahí, porque tenía que agradecerle al chico por estar a su lado.

Por cuidarla, por ser su fortaleza.
Cuando lo veía, cuidando a los demás mientras llegaba, cumpliendo diligentemente sus quehaceres, se dio cuenta que había encontrado a su rey.

Aquella sonrisa, guio el camino hacia él.

Encontraron su cuerpo dentro de una burbuja, en la parte más oscura de las aguas negras.

Su cabeza estaba mirando hacia abajo, y parecía no tener consciencia.

Por un momento, todos pensaron que estaba muerto.

La luz de Baekhyun comenzó a parpadear.

Y entonces, sucedió.

Ni siquiera les dio tiempo de moverse, ya que la mirada de su rey cruzó su vista por un segundo, antes de un torbellino de agua los atrapara a todos.

Porque Suho nunca había sido capturado, él se había dejado atrapar.

Se había mantenido dormido, esperando.

Esperando a que Kaeri despertara.
Esperando a que las leyendas se reunieran.
Esperando a que lo salvaran.
Porque se encontraban justo en el medio del laberinto...
En el lugar en donde las raíces del árbol de la vida habían nacido.

En donde todo inició, y en donde debía de finalizar.

Suho se liberó por si sólo, y con su poder ahuyentó a todo el rastro de oscuridad, y los devolvió a tierra firme antes de que los demás pudieran pestañear.

Ahora, las doce leyendas estaban reunidas.
Las dos mitades del árbol de la vida, estaban unidas.

Es en este momento en donde la batalla real iniciaría.

No hubo tiempo para una bienvenida...
Las fuerzas rojas descendieron sobre ellos para atacar al árbol de la vida.
Las doce leyendas, que finalmente se habían reencontrado, la rodearon a ella de forma protectora.
Era la batalla final y todos lo sabían, la batalla que uniría sus mundos, o los destruiría para siempre.