025. Happy anniversary, love.

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Un año después

Louis' Pov.

-¿Qué haces aquí? -me pregunta Dea al verme sentado en la barra del bar.

Suspiro fuertemente mientras la ignoro. Sé que me preguntará por Harry, pero no tengo ganas de hablar de eso ahora, el saber que no está conmigo ahora es suficiente. Quiero que esté conmigo en casa, tan solo viéndolo, ver su hermoso hoyuelo que hace que me derrita por dentro, hacer que sus ojos brillen con un "te quiero" mío, acariciar sus rizos suaves y...

-Tierra llamando a Louis, ¿hay alguien ahí? -la morocha murmuró y yo suspiré.

-No estoy de humor, preciosa. -tomé un sorbo de mi vaso de ron sin mirarla.

-Bueno, siempre traes esa cara de culo, así que no sé cuándo estás de humor. -se apoyó en el mostrador con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

Hoy era el "aniversario" de Harry con la mesa de billar, o sea, Taylor. Así que, era mejor emborracharme aquí a quedarme en mi departamento viendo películas ridículas y clichés. Pero la existencia de Dea arruinaba todo eso,quería estar solo con mi soledad y el whisky; no con la tediosa morena preguntándome por él: la razón de que estoy aquí.

-Deja de arruinarme el ambiente, Deaphin.

--Vaya, si me has llamado por mi nombre completo es porque es algo totalmente serio -soltó la barra y se sentó a mi lado- ¿Pasó algo con Harry? ¿Se pelearon?

Tomó un rizado mechón de cabello y se lo puso detrás de su oreja, frunció el ceño con intriga. Suspiré, no quería decírselo, temía que mientras lo haga empezaría a romper cosas por la ira, asentí y tomé de golpe el contenido sobrante de mi vaso.

-Bien, te lo contaré, ya que es tan importante para la señorita. -puse los ojos blancos y Dea gruñó.

Era de noche, el rizado y yo estábamos en mi cama alumbrados por la luz de la luna, ambos con mantas en nuestras cinturas luego de haber hecho el amor y estábamos totalmente exhaustos.

Harry dibujaba con su dedo patrones aleatorios en mi pecho y yo acariciaba sus rizos rebeldes.

-¿Lou, puedo preguntarte algo además de esta pregunta? -susurró posando sus orbes esmeraldas en mí.

Solté una risita por la ternura que me causó.

-Claro, bebé.

-Uh, ¿eres feliz ahora? -balbuceó.

Esas cuatro palabras removieron mi sistema, no lo esperaba. Me senté lentamente en la cabecera de la cama con una sonrisa nerviosa y el ceño fruncido. Él se sentó con una mueca expectante, tenía miedo de lo que vaya a salir de mis labios, porque, yo era un imbécil y lo que digo también lo es. Temía destrozarle el corazón, temía que se fuera, así que opté por algo mejor.

Responder con una pregunta.

-¿Por qué preguntas?

Harry suspiró.

-Es que... um, uh, esa pregunta ha estado rodando en mi cabeza toda esta semana. Yo... mejor olvídalo, ¿si?- sonrió falsamente y yo tomé su mejilla.

No estaba listo, pero esas dos palabras estaban a punto de salir de mis labios. Pero un "TA" no se lo dice a cualquiera, aunque yo sabía perfectamente que Harry no era cualquiera, pero tenía miedo, mucho miedo.

-No soy feliz ahora y creo que no lo he sido desde hace mucho tiempo. -lo siguiente que sé es que Harry estaba poniéndose su ropa- Espera, ¿te vas temprano? -dije poniéndome un short negro.

OLX  »Larry AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora