Nunca digas nunca. Historia de una Belieber.

Capítulo 2.

Me giré. Eran Meri y Laura.

-¡Chicas! ¿Ya estáis aquí?

- ¡Sí! - exclamó Meri - ¡Venga, vayámonos!

Llegamos al hotel Urban, que estaba abarrotado de Beliebers esperando a que Justin se asomara a la ventana. Habían cortado toda la calle, desde el Palacio de Congresos hasta Sol, de la cantidad de gente que había.

Fui a la puerta y le dije al guarda de seguridad que era la ganadora del Meet and Greet. Le enseñé el SMS.

- Chicas, tengo que pasar dentro. - les dije después de que el guarda me diera paso.

- Vale, Laura. - me dijeron un poco tristes - Te esperamos aquí. ¡Pásalo bien!

- ¿Cómo que «pásalo bien»?¡Vosotras venís conmigo! - dije sacando otros dos pases VIP.

Ellas empezaron a gritar. ¿Que cómo los había conseguido? Tan fácil como hacer una llamada al programa y pedirlo.

Que sí, que hay cosas que dices «Esto es imposible », pero es que a lo mejor no lo son tanto. Puede que solo haga falta intentarlo.

Primero era el Meet and Greet y después el encuentro VIP, así que me llevaron sola a una sala con un par de sillones, una mesa y algunos aperitivos, y me senté a esperar.

El M&G consistía en estar a solas quince minutos con Justin, hablar, tomar algo y hacernos varias fotos. El encuentro VIP era parecido, pero en él participaban todo el team y además todos los ganadores o personas que tuvieran ese pase, que en este caso solo éramos nosotras tres.

De repente noté como alguien me tapaba los ojos y era... ¡era Justin!

-¡Justin! ¡Oh dios mío! - dije tapándome la boca. - Esto no es real.

- ¡Hola! - me dijo abrazándome.

- Dios... no me lo creo.

- ¡ Yo tampoco! - rió- Eres guapísima.

-¿Qué? - pregunté yo riéndome. Estaba como un tomate. - No mientas.

Congeniamos al instante. Me reí muchísimo con él durante aquellos minutos. Estuvo haciéndome preguntas sobre cómo me había hecho Belieber y qué canción era mi favorita. Yo no podía parar de repetir « I'm so proud of you. » Y es que era verdad, estaba realmente orgullosa de él.

Unos minutos después llegó la sesión de fotos, y más tarde, el encuentro.

Las tres estábamos nerviosísimas por conocer a todo el team, pero haber hablado con Justin ya me había dejado más relajada, así que simplemente lo disfruté al máximo.

Estaban todos: Pattie, Scooter, Ryan, Mama Jan, Kenny...

Al acabar el encuentro, Justin nos acompañó hasta la puerta junto a Kenny, su guardaespaldas, y ambos se despidieron de nosotras con un abrazo.

Salimos y empezamos a gritar y saltar. Algunas Beliebers se acercaron a darnos la enhorabuena al vernos allí.

Ya eran las siete y todavía teníamos que ir al Hormiguero, así que cogimos un taxi para que nos llevara hasta el plató.

Todavía no me creía lo que acababa de vivir.

- ¡Mierda! - pensé - Se me ha olvidado darle la carta.

Llegamos y casi no podíamos movernos de la cantidad de gente que había. Justin llegó a la par que nosotras.

Había dos pantallas en las que estaban poniendo el programa en directo para las que estábamos fuera.

Cantó Mistletoe, habló con las fans, les regaló algo de su merchandasing... Estuvo atentísimo con todas.

Cuando acabó de dar los regalos, Pablo Motos anunció que Justin se iba a asomar a la ventana para saludarnos.

Los veinticuatro segundos más largos de mi vida. Me encantaba ( y aún lo hace) ver como se involucraba tanto con sus fans.

Sí, acababa de pasar casi una hora con él, pero todos los segundos eran únicos e irrepetibles.

Al acabar el programa, fuimos corriendo a la parte trasera para ver salir el coche.

Todas empezaron a golpearlo, pero en cambio yo corrí. Corrí como nunca detrás de su coche. Por suerte el semáforo se puso en rojo y llegué a tiempo para llamar por la ventana y pedirles, por favor, que me cogieran la carta que quería que Justin leyera.

Él se asomó. Había salido del garaje agachado en el asiento trasero. Escuché como le dijo al conductor que abriera la ventana para que así pudiera dársela, y la cogió rozándome la mano, sin decir nada. Simplemente sonriendo.