Un simple ya, lo dice todo

Chapter 31

Where's My Love - Syml.

Ashley no paraba de dar vueltas por mi habitación, como siempre.

- ¡Ya no puedo más! Elizabeth, esto me supera... Él me supera -dijo alterada, bajando la cabeza.

- Ashley, tranquila, dime qué ocurre -dije intentando calmarla, aunque ya lo imaginaba.

- Es Ronald, el estúpido de Ronald ¿Es que no se da cuenta de nada? Maldita sea.

Quedé en silencio. No sabía qué contestar.

- ¿Por eso no dijiste ni una sola palabra después de hablar con él en el insti? -pregunté curiosa.

- Créeme, ojalá no hubiera hablado con él... 

- Ashley... De verdad, lo siento mucho -dije muy preocupada.

- Está con una chica... Está saliendo con una chica... -dijo por fin.

Automáticamente me levanté y la abracé.

Snif , escuché.

- No, no, no. Ashley no puedo verte así. No llores, por favor -dije intentando evitar un tsunami de lágrimas.

- Tranquila, no voy a llorar ¿Recuerdas? Prometí no sentirme así nunca por alguien -dijo intentando guardar sus lágrimas.

Mi piel se erizó. 

La abracé aún mas fuerte. 

  << Vaya, quién lo diría, la chica más divertida, loca y sonriente del mundo, rota a pedacitos por dentro... >> 

- Bueno ¿Qué hacemos esta noche? -dijo Ashley, cambiando de tema rápidamente.

- Pues... La verdad no lo sé. Tenía pensado hablar con Eddie -dije mientras encendía mi ordenador.

- Mmm, buen plan -dijo con un tono un tanto irónico.

- ¿Por qué no? -dije sonriendo.

- Sí que lo es para ti, supongo que hablar con el chico del que estás enamorada en secreto y vive a cientos de kilómetros, es un buen planazo -dijo Ashley riendo.

Mi corazón bailó.

- No -dije inmediatamente.

- Elizabeth...

- ¿Eras tú, la que dijiste que olvidara aquel sueño en el que nos besábamos y viviera mi vida, o fue un fantasma? -grité alterada.

- Sí, fui yo. Pero no sabía lo que se sentía al estar así... -contestó intentando disculparse.

Un silencio inundó mi habitación.

- Lo siento -dijimos a la vez. El silencio se rompió.

Sonreímos.

- Ashley, tienes razón... La tarde que discutí con Ryan, fui al bosque. Estaba oscuro, y me planteé muchas cosas. Entre ellas qué me está pasando.

- No vuelvas a ir al bosque sola cuando sea tarde -dijo preocupada-. ¿Y bien?

<< Instinto madre protectora activado >>

- Supongo que tal vez no quiero admitirlo, supongo que no quiero estropear nada. Supongo muchas cosas... -dije nerviosa.

La pantalla de mi ordenador se iluminó. Era Eddie, llamaba por skype.

- Hablando del rey de Roma...

- ¿Cómo estoy? -le pregunté.

- Loca.