Chapter 35

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High You Are - What So Not (Branchez remix).

En casa de Elizabeth, por la tarde...

- Ryan, no aguanto más ¡Dímelo ya! ¡¿A dónde vamos?! -pregunté ansiosa.

- No puedo.

- Estúpido... -dije bromeando, mientras preparaba la mezcla de los brownies.

Noté como Ryan me observaba sentado sobre la encimera de la cocina. Me miraba fíjamente, como aquella noche de verano, sí, la cena en la que nos conocimos. La noche en que decidí ser escritora definitivamente.

Y hablando de escritores, tenía que avanzar en el mini-relato que nos habían mandado hacer los jueces del concurso. Aún no tenía muy bien pensado de qué trataría, pero tenía ideas.

- ¡De aventuras! -grité.

Ryan saltó del susto.

- ¿Qué dices? -preguntó riendo.

- ¿Qué pasa, es tan gracioso que haya pensado de qué va a tratar el minirelato del concurso? ¿Eso es tan gracioso para ti?

Ryan no paraba de reír. No era normal.

- Vale -suspiré-. ¿Qué pasa?

- Tienes chocolate en la nariz y harina sobre el pelo -dijo señalándome donde estaba.

- Muy gracioso -dije intentando contener la risa, pero... Misión fallida. Comencé a reír-. Por cierto, los brownies no se van a hacer solos, necesito ayuda.

- ¡Sí chef! -gritó mientras cogía un delantal.

- Oye, mañana es el festival de invierno ¿Vamos, no?

- Sí claro... -dijo bajando la cabeza.

- Mmm, ha sonado muy raro... ¿Qué ocurre?

- Se supone que por la tarde tengo que hacer de profesor de matemáticas para Claire...

- Ah, qué bien.

<< Genial, todo es genial... >> -pensé.

- Pero creo que estaré en su casa una hora, el resto de la tarde podré estar con vosotros -dijo sonriendo.

- ¡Sí, claro! Además estaremos un rato por la noche también así que podrás venir cuando acabes.

- Estupendo -dijo sonriendo.

Por un momento me acordé de Eddie, hacia varios días que no hablábamos, tenía que llamarle.

Y continuamos haciendo los brownies.

Paper Thing - Astrid S.

Mientras, a unos diez metros de la calle, sentados en un banco...

Había ocurrido. Y ambos no sabían cómo reaccionar, porque era un momento que llevaban esperando desde hace bastante tiempo.

- Wow -pronunció Ashley.

- Wow -repitió Ronald.

- Hay una cosa que tienes que saber... -dijo Ashley nerviosa.

- Dime.

- Pues... -intentó explicar Ashley muy nerviosa.

- ¿Pues...? Ya sé. No te ha gustado.

- ¿Qué? ¡No! Quiero decir... ¡Sí, sí me ha gustado! - dijo Ashley temblorosa.

- ¿Entonces?

- Ronald es embarazoso, pero... Ha sido mi primer beso.

Ronald quedó mudo.

- ¿Y qué? Por fin he besado a la chica con la que llevo obsesionado desde los siete años -contestó por fin.

Un simple ya, lo dice todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora