La rutina comenzaba de nuevo, despertarse temprano, asearse, vestirse y desayunar, la verdad lo detestaba, odiaba que se tuviera que repetir cada día. Era mejor despertar y tener una aventura que realizar.
Comí las tostadas que mi tía había preparado antes de ir a trabajar, aún con su enfermedad ella estaba decidida a no dejarse estar por eso, mi tío por lo contrario quería verla descansar, yo no opinaba, de todas formas ella seguiría con lo suyo, su actitud es admirable, hace todo esto sólo para que no nos preocupemos.
-¡Buen día, Nina!_giré mi cabeza y saludè a mi tío que bajaba las escaleras mientras abotonaba su camisa_¿qué tal el trabajo?
-Todo bien_le serví un vaso de jugo_pensè que fuiste con tía_negó.
-Tenía unos trabajos pendientes_colocó su maletín sobre la mesa y metió algunas carpetas dentro_Liz está muy mal, esta semana tenemos una cita para programar cirugía_se sentó mirándome.
-Entonces puede salvarse_lo mirè fijamente deseando que las palabras fueran positivas.
-Si_mi esperanza floto por los aires_pero el tumor crece y puede expandirse a otros órganos_mi esperanza decayó. Se levantó_no quiero mentirte, Nina_colocó su mano en mi hombro_has pasado por mucho.
Era como estar viviendo en el mismo infierno, todos se iban, no tenía a nadie más.
-No te preocupes, tío_le sonreí levemente, fingidamente.
Comprè un milkshake como todas las mañanas y rodeé la cuadra hasta llegar, ojalá los minutos se volvieran infinitos, no quería verlo después de lo sucedido, no fue nada de otro mundo, pero fue incómodo y se sintió un poco íntimo, miré el edificio y con un suspiro abrí la puerta.
-Hola, Carla_me acerqué a ella y le dí un leve abrazo.
-Hey, ¿qué tal todo?_colocó una de sus manos en su cintura.
-Bien_hice una mueca_¿tú?
-Tambièn_me guiñó un ojo y reí, esta chica era imposible_hablamos en el almuerzo, gatita.
-No me llames así_la señalé mientras me dirigía al piso veinte.
#Ian
Subí al ascensor y marquè mi piso, las puertas se abrieron y por primera vez caminé por el pasillo con la mirada hacia los personales, no quería posar mi mirada en ella, aunque fuese desesperante no hacerlo. Pero llegó el momento y lo hice, me detuve frente a Nina y miré sus manos extendiéndome un batido de chocolate, como cada mañana, iba a hablar pero Dobrev se me adelantó.
-¡Buen día, señor!_elevò levemente las comisuras de sus labios_su batido_asentí.
-Gracias_lo tomé de sus manos_podemos seguir la nota en breve, quiero entregarla hoy_ordené.
-Ya la terminé_caminó hasta el mostrador para luego entregarme una carpeta _puede revisarla, si no lo convence sólo dígame.
-Excelente_empujé con el pie la puerta de mi oficina_le debo una, más bien dos_añadí y la vi sonrojarse levemente mientras una minúscula sonrisa asomaba sus labios.
Revisé todos los papeles y estaban en perfecto estado, archivé el documento y lo guardè en el primer cajón de mi escritorio, luego me encargaría de llevarlo al ministerio. Bebí un sorbo del batido, sonreí sin razón alguna al pensar en Nina, negué con la cabeza y seguí haciendo notas, no me podía gustar Dobrev, pero por más que lo negara seguía en mis pensamientos.
#Nina
La mañana fue bastante normal, no fue tan incómodo despuès de todo, agradecía eso con toda el alma. Si pudiera hacer algo para que Ian me dejara de gustar, lo haría, pero por más que trataba no podía, ese sentimiento seguía ahí y cada vez que los minutos pasaban sólo aumentaban, no era esa sensación que sentimos cuando alguien nos atrae, esto era más fuerte.
-¡Ya no hay hamburguesas!_exclamó la rubia mientras se sentaba_no sé cómo puedes comer eso_señaló con asco las zanahorias ralladas y el pollo.
-No lo sé_me encogí de hombros_si no como verduras no aguanto el horario.
-Como sea_revolvió sus papas_ayer estuve sola en el almuerzo, aunque todo estuvo relajado sin Somerhalder.
-Sobre eso_apretè ligeramente mis labios.
-¿Sobre eso qué?_mordisqueó su comida.
-Tengo que contarte sobre la noche anterior_me miró fijamente dejando de comer.
-Dime que sigues siendo virgen_dejè mi tenedor a un lado y fruncí el ceño.
-¡Estás demente, en serio!, ¿dónde sabes tú si soy o no virgen?_elevè las cejas.
-Lo sabe hasta mi vecino, ahora cuèntame_movió sus manos dramáticamente.
Carla era sin dudas la persona mas extrovertida y amable del mundo, pero también juzgaba a las personas, sé que no lo hacía por maldad, sólo se basaba en lo que veía, y estaba en su derecho. Le conté lo sucedido y me dedicó una mirada de disgusto, luego habló.
-Yo lo dejaba_entrecerró sus ojos a mi dirección, inspeccionándome.
-Si lo hubieras visto_recordè aquella noche y negué mentalmente.
-De seguro tiene empleados, no le hubiese sucedido nada.
-No había nadie_me ignoró y preguntó lo que yo ya había deducido.
-¿Lo del abrazo es broma?_negué_no quiero decirlo pero eso fue lindo, de todas formas no lo soporto, ¿no hablaron de nada hoy?
-No, por suerte, ni siquiera puedo mirarlo_me encogí de hombros.
-¡No te enamores de él, Nina!, hay personas mejores_asentí.
Lo malo era que podía ser todo lo desagradable que quisiera pero después de todo me hacía sentir todas esas emociones.
Eran las 6pm, Carla me llevaría a casa y estaba feliz con eso, no era de mi agrado esperar el bus y eran pocas las veces en la que venía en auto, pensaba en comprarme uno más adelante, ya había acabado mi trabajo así que sólo esperaba a que marcaran las 6:30, la puerta de la oficina de Somerhalder se abrió y volteè para verlo salir.
-Puede retirarse, todo el personal lo hará_me miró y comenzó a caminar.
-Está bien, señor_cogí mi bolso y salí del mostrador para esperar que Somerhalder cerrará las puertas del ascensor, nunca ví a nadie compartir el mismo espacio que él, mejor prevenir.
-Suba_apretó el pequeño botón para mantener las puertas abiertas.
Dudè un momento pero terminè aceptando, las puertas se cerraron y sus dedos marcaron 'sub-suelo', el estacionamiento.
-¿A qué piso va?_me miró.
-Al mismo, señor_crucé mis brazos, la tarde/noche estaba fresca.
-Bien_dijo monótono.
#Ian
Resultaba que tenía una cena con mis padres en media hora, llegaba tarde entonces decidí salir temprano de la compañía, Dobrev se encontraba esperando su horario así que me detuve a decirle que estaba libre.
Subí al ascensor mirando como tomaba su bolso en la mano derecha, caminó hasta encontrarse frente mio y esperó, claro que no subiría por respeto, la invité a pasar y segundos después lo hizo.
El recorrido fue bastante normal, no hubo tensiones, nada. Al llegar a la planta baja me fijé como sus ojos buscaban algo, o a alguien.
-¿Olvidó dónde estacionó?_saqué mis llaves.
-De hecho busco a Carla, lo siento, una amiga_se disculpó_ya la ví_susurró para ella misma.
Me aliviè al saber que iba acompañada por una amiga, más bien la recepcionista. Se despidió y comenzó a caminar, la llamé haciéndola voltear, ni siquiera sabía la razón, fue totalmente involuntario.
-¿Si, señor?_dijo colocándose un abrigo.
-Cuídese_me acerqué y luego de dudar unos segundos besé su mejilla, luego me marché.
#Nina
Quedè como piedra en mi lugar, ¿acaso él me había dado un beso?, virè la cabeza y ví a Carla con los ojos más abiertos que nunca, comencè a caminar hacia el auto de mi amiga, me encontraba sorprendida, pero más que eso, estaba feliz.
Pd: les agradecería si pudieran pasar por mi nueva novela Enigmatic green ♡ Les va a encantar, lo prometo.
