Cuando palpé el colchón no sentí a Ian, inmediatamente me puse de pie y me dirigí a buscarlo por la casa, no se encontraba en ninguna de las habitaciones de arriba, bajé a la planta baja y fui directo a su oficina, ignoré la sala al no escuchar el ruido de la televisión.
Ahí estaba, sentado con las piernas cruzadas y firmando algunos papeles, su cuerpo se encontraba ligeramente inclinado hacia el escritorio. Me acerqué y posé mis manos por el oscuro cristal de la mesa, Ian subió la mirada, sus ojos estaban hinchados y rojos por no descansar lo suficiente. Lo miré con reproché pero él seguía sin gesto alguno en el rostro, ¿intimidarlo? imposible. Suspiré y rodeé el escritorio.
-Ya deja eso, Ian_quité el bolígrafo de entre sus manos_¿no puedes dormir?_pregunté con delicadeza, como si estuviera hablándole a un niño.
-No, no puedo. Hubo otra llamada, no me siento seguro como para relajarme_se impulsó con el borde de la mesa y la silla giratoria se deslizó algunos centímetros hacia atrás.
-¿Otra llamada?, ¿hoy?_pregunté con sorpresa. Me quedé pensando por un momento, comencé a sentír miedo. No le deseaba el mal a nadie, pero a Marcos..., ¡agh! me molesta tanto que haga de la vida de Ian un completo caos.
-Sí, como una hora después de acostarnos_se levantó_a mi celular.
-¿Le has dicho a Alex?_di un paso y coloqué mis manos a cada lado de su suave rostro. Mirè fijamente sus ojos.
-Lo sabe_ cogió mis brazos y me hizo abrazarlo_ llamè a William para conversar un rato_acaricié su tonificada espalda_contestó de milagro.
-¿Qué te dijo Marcos?
-Fue uno de sus empleados, una simple amenaza, Nina_me separé.
-¿Una simple amenaza? ninguna amenaza es simple, Ian_volteé y guardé las hojas en los cajones. Me hizo girar hacia él agarrándome de la cintura.
-Mientras a ti no te metan en esto, lo es.
-Si tú estás en esto, yo también_con la punta de mi dedo toqué su pecho_¿quieres un té?
-No, sólo agua. Luego vamos a la cama, tienes que ir a la Universidad, no puedes llegar con ojeras_afirmó decidido.
Ian bebió un vaso de agua en la cocina y luego volvimos al cuarto.
Quedamos en la misma posición que antes, pero esta vez él se encontraba de espaldas, podía sentir toda la tensión y estrés que su cuerpo despedía, odiaba tanto verlo así. Pasè mi brazo por su cintura y pegué mi frente en el comienzo de su hombro, disfrutando de su cercanía y de su respiración que iba a ritmo lento. Estaba totalmente segura que se había quedado dormido, cerrè los ojos y pensé por un momento en posibles soluciones, sin embargo todas ellas estaban siendo empleadas y ninguna daba frutos. Rendida exhalè con tranquilidad y me uní a Ian en un sueño que acabaría dentro de dos horas.
El despertador sonó con demasiada fuerza a las seis am, o simplemente yo estaba tan cansada que no toleraba el ruido, pegué mi cuerpo más de lo que ya estaba a Ian como si eso fuera a detener la alarma, me percaté de que ni siquiera se había movido al escuchar el estrepitoso sonido, no obstante, tan sólo bastaron algunos segundos para que volteara a mirarme, me fijé en su hermoso rostro por un momento pero luego volví a cerrar los ojos, me hallaba tan agotada que no tenía fuerzas para mantenerlos abiertos.
-Duerme_acarició mi pelo, supe que ya no se encontraba en la cama cuando el colchón se elevó al despojarse de peso extra_iré a entrenar_abrí los ojos y lo mirè, no estaba sorprendida ni nada de eso, sabía exactamente que él no dejaba ninguna de sus actividades ni aunque estuviera muriendo.
-Ian, con tan poca hora de descanso no es recomendable ejercitarse_hice una mueca porque sé que mi consejo era en vano, de todas formas lo haría. Reuní fuerzas y me senté al borde de la cama. Le dediqué una pequeña sonrisa al ojiazul_te voy a preparar el desayuno.
-No, tú duerme_sentí el peso de su mirada y me estremecí, detestaba cuando lograba intimidarme. Se dirigió hacia su armario y me puse de pie.
-Ya no tengo sueño_comencé a extender la sábana y a doblar la frazada.
-Lo haré yo después, no te preocupes por eso_me habló mientras sacaba ropa deportiva y se encaminaba al baño. Lo ignoré, no tenía caso discutir por tonterías, antes de ingresar al baño lo interrumpí.
-Voy a sacar el cepillo_caminé hasta el baño y tuve que ponerme de costado ya que él no me había dado espacio para pasar por la puerta.
Cuando iba salir me puse de puntitas y besé su mejilla sonoramente.
-¿Qué quieres desayunar, bombón?_largó una risa_¿no te gusta?_fingí ofensa.
-Me encanta, dulzura_siguió el juego con una sonrisa. Amaba verlo feliz, amaba su sonrisa, lo amaba a él, demasiado.
Me guiñó un ojo y entró a ducharse, yo fui a otro baño a lavarme los dientes y seguido de eso fui a la cocina, Ian no dijo nada respecto al desayuno así que hice café y tostadas, realmente no sabía si eso era de su agrado, pero no era problema, aquí había de todo.
Me senté a esperarlo mientras deslizaba mi dedo por la pantalla de mi celular, mi tío aún no respondía mi mensaje, era de esperarse, sólo suele mirarlo cuando alguien lo llama.
Ian apareció y se acercó a abrazarme, no tuve tiempo de reaccionar, por lo tanto me encontraba rodeando su abdomen.
-Siento un milkshake hablándome_me burlé.
-Que graciosa_me soltó_al final hiciste algo, como siempre_dijo mirando la mesa con una expresión que no comprendí del todo.
-No seas gruñón_me miró en advertencia. Juraría que es el hombre con menos sentido del humor del mundo_no sé lo que desayunas antes de ir al trabajo_me encogí de hombros_hice café con tostadas.
-Eso está bien_asintió.
-¡Súper! en el baño del pasillo dejé una tableta de aspirinas por si te duele la cabeza_vertí café en la taza.
-No te preocupes tanto por mí, Nina. No voy a morirme_dejó reposar su mano sobre la mía.
-Obvio que no vas a morirte, bombón.
Lo contemplé atentamente y unas ganas increíbles de abrazarlo me invadieron. Me levanté de la silla y rodeé mis brazos alrededor suyo, sentí su reacción de asombro cuando su cuerpo se tensó ante la sorpresa, pero después de unos segundos sus fuertes brazos correspondieron el gesto.
-¿Qué sucede?_me apretó con firmeza.
-Nada... quería abarazarte, nada más.
-¿Qué clase de mosquito te ha picado, Dobrev?_acarició mi espalda_usualmente si yo no te obligo a acercarte no lo haces.
-Te amo tanto, Somerhalder_musité_que si algo te sucede por culpa de Marcos...
-También te amo, dulzura.
¡Hola!
Si gustan dejar su apoyo de alguna manera sería genial..., los quiero.
Bendiciones ♡
Pd: agradecerìa si pudieran darle una miradita a mi otra novela "Enigmatic green" les prometo que no van a salir decepcionados ;)
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-Disfruten la vida.
