Capítulo 6 : La próxima vez no será un simple beso.

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Capítulo 6 : La próxima vez no será un simple beso.

Las horas restantes me la pasé evitando posar mis ojos en Tumbled. Sabía que él seguía sin prestar nada de atención a nada de lo que los profesores decían, es más, sabía que no había despegado la mirada de la ventana. No sabía que me pasaba, no recordaba haberme sentido así con nadie, quizás antes de que perdiera la memoria había tenido novio pero no recordaba el sentimiento de tener el corazón acelerado. A lo mejor me sentía mal por haberme mojado el pelo y ese sentimiento era un efecto secundario, nunca se sabía con eso de las enfermedades. 

El timbre sonó y Lidia y yo fuimos hasta la salida para despedirnos. Anduve hasta donde estaban mis tres hermanos y los saludé, ellos me sonrieron en respuesta y Caleb hizo el signo de "hola". Me agarré de su brazo y le di un beso en la mejilla, me gustaba ser amable y cariñosa con Caleb, se notaba que era un chico tímido que lo único que necesitaba era un poco de atención y amabilidad. 

Llegamos hasta el coche y todos nos metimos dentro para esperar hasta que el coche arrancó. Miré por la ventanilla y llegué a ver a Tumbled sobre una moto fumándose un cigarrillo mientras miraba a las personas que salían del colegio con lo que parecía indiferencia y pasotismo. Había algo en él que me hacía creer que el verdadero Tumbled era el del hospital pero su comportamiento y lo que me había dicho Lidia me hacía ver que muy posiblemente estaba equivocada. 

-  ¿Conocéis a Tumbled Rönngren? - pregunté mirando a mis hermanos haciéndome la indiferente, no quería que pensaran nada como lo había hecho Lidia.

-  De oídas, creo -  dijo Cameron -. Juega al rugby y es conocido por los arrolladores golpes que da y las veces que ha sido eliminado de la convocatoria por eso. No es alguien muy sociable, ¿ de qué lo conoces?

-  Nada, simplemente está en mi clase y tenía curiosidad. 

-  Ese tipo de curiosidad es mala, Aila -  dijo Brandon mirándome fijamente -. Tumbled es peligroso, no quiero que te acerques a él. 

Asentí  y miré por la ventana pensativa. Todo el mundo hablaba mal de él, ¿podía ser tan malvado como decían y haberse ganado su apodo? Me deshice de esos pensamientos y escuché a Mark hablando de lo que había hecho durante el día. 



Por la tarde, Mark y yo salimos de casa a las siete para montarnos en el coche y llegar al entrenamiento a y media. El sol se había escondido un poco haciendo que estuviera un poco oscuro pero el campo estaba iluminado por focos. Mi hermano me había dicho que era muy raro que un colegio inglés se especializase en un deporte tan americano como el ruby pero que Westminster había pensado que habría alumnos de intercambio a los que les interesaría hacerlo. Más tarde, un montón de alumnos que no eran extranjeros se apuntaron y asi fue como se creo el equipo de rugby de Westminster. Mark tiró de mi mano hasta las gradas y me sentó allí para después irse corriendo hasta donde estaban los demás de su grupo y su entrenador. Sonreí, mi hermano pequeño era tan vital y alegre que hacía que mi amargura desapareciera con una sola sonrisa suya. 

El entrenamiento empezó, y cuando llevaba media hora viéndolo, tuve unas ganas terribles de ir al baño así que me bajé de las gradas y entré en el gimnasio buscando el baño. Anduve perdida sin saber a donde dirigirme. Volví a salir afuera y vi una pequeña cabaña que parecía un baño portátil aunque un poco grande. Me apresuré a entrar cuando me arrepentí mucho, no esperaba encontrarme con él en ese sitio. 

Él pareció no verme, seguía colgado de un trozo de madera en el techo y no hacía nada más que subir y bajar una y otra vez, parecía no cansarse. 

Me quedé paralizada sin saber que hacer, solo podía contemplar como él seguía ejercitándose hasta que su voz me paralizó

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Me quedé paralizada sin saber que hacer, solo podía contemplar como él seguía ejercitándose hasta que su voz me paralizó. 

-  ¿Te gustan las vistas? -  inquirió bajándose y mirándome fijamente. 

Cogió una toalla que tenía detrás sobre una mesa y se la pasó por la frente sin dejar de mirarme, su mirada era controladora, firme, sus ojos azules ahora estaban oscuros. Se acercó un poco a mí y casi pude sentir como mi corazón reaccionaba a sus movimientos. 

-  Yo...Yo buscaba el baño y pensé que esto lo era -  dije para dar unos pasos hacia atrás -. Pero ya me voy, adiós. 

Abrí la puerta y salí pero, en un solo segundo, me vi arrastrada por él devuelta al interior de la cabaña. Mi espalda tocó la pared y sentí su cuerpo pegado al mío sin dejarme opcción para escapar. Sus manos agarraron mis muñecas y las subieron encima de mi cabeza para después mirar mis labios con una sonrisa irónica. 

-  No deberías haber entrado aquí -  susurró en mi oído enviando corrientes por todo mi cuerpo -. Creo que te enseñaré lo que pasará la próxima vez que estés en mi camino. 

No supe a qué se refería hasta que sentí como sus labios chocaban contra los míos y como una de sus manos bajaba por mi espalda. Me estremecí al sentir su boca junto a la mía e intenté separarme asustada de lo que sentía pero él me detuvo hasta que respondí a sus labios y sentí como su lengua se internaba en mi boca y tocaba la mía. Me soltó las manos y yo las bajé instintivamente hasta su pelo para acariciarlo. Tumbled me mordió el labio para después separarse y mirarme antes de dar la vuelta. 

-  La próxima vez no será un simple beso, quedas avisada -  dijo. 

Me escabullí por la puerta nerviosa y anduve casi corriendo de vuelta a las gradas. Se me habían pasado las ganas de ir al baño y parecía que el entrenamiento había acabado. Vi como Mark se acercaba a mí y se lanzaba a mis brazos. Lo cogí y alboroté su pelo haciendo que él sonriera. 

-  ¿Podemos quedarnos a ver el entrenamientos de los mayores, Aila?

-  Hoy no, Mark, quizás otro día, ¿te parece?

Él asintió conforme y nos dirigimos hacia donde el chófer había aparcado. Mi corazón parercía haber vuelto a la normalidad aunque todavía sentía los labios hinchados y la piel donde él me había tocado estaba erizada. Entré en el coche para que éste arrancara poco después al tiempo que venía a Tumbled desde la distancia. 

¿Qué me estaba haciendo aquel chico?


En Mi Otra Vida [SL3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora