Intento explicarle a Gale mi situación con Peeta, pero las imágenes que se proyectan en la televisión no tienen explicación.
-Gale…-susurro yo. Pero ya es demasiado tarde. Él se levanta bruscamente del sofá y nos lanza una última mirada de odio a Peeta y a mí. Después, sale de la habitación y a los pocos segundos oigo el portazo de su cuarto.
Voy corriendo detrás de él, gritando su nombre, pero no me hace ningún caso, y, al igual que hace tan sólo unas horas, me derrumbo al lado de su puerta y llamo levemente.
No obtengo ninguna respuesta en las horas que me mantengo en su puerta.
Tras un par de horas, Cinna aparece en medio del pasillo y se sienta en frente de mí.
-Duro, ¿eh?-me pregunta, mirándome fijamente, preocupado.
-Ni te lo imaginas.-le contesto yo, con la cabeza apoyada en la puerta, aburrida.
-En realidad…sí, me lo imagino.-Ese comentario hace que me incorpore y mire a Cinna algo extrañada. ¿De verdad Cinna me va a contar sus líos sentimentales?-Pero no es momento de hablar de mí.-concluye al ver mi cara, y, al ver mi tono de decepción, sonríe.-Es hora de cenar, Katniss.
-No tengo hambre.
-Bien, entonces yo tampoco.
-Oh, vamos, Cinna, no seas estúpido. Ve a cenar. Yo estoy bien, no hace falta que te quedes conmigo.
-No lo estás, sé cuando mientes perfectamente. Además, quiero quedarme contigo.
No discuto demasiado, porque la verdad, es que quiero que Cinna esté conmigo. Él se acerca más a mí y se pone a mi lado. Yo descanso mi cabeza sobre su hombro, y me siento tranquila.
Tras unos minutos en silencio, le pregunto por los entrenamientos.
-Ha ido todo bien, tranquila. Gale ha hecho caso a todo lo que le dijisteis. Ha estado de puesto en puesto, sin mostrar sus cualidades. Teníais razón, todos los vigilantes estaban pendientes de él. Sólo ha hablado lo necesario con otro par de tributos. Respecto a Emily, lo normal. Hoy se ha centrado en el fuego, las plantas y los nudos. Mañana se centrará en las armas.
Yo asiento y nos quedamos en silencio unos minutos más.
Cinna también intenta llamar a Gale, pero nos sigue ignorando. Me informa de que las sesiones privadas con los vigilantes serán pasado mañana, cuando acaben los entrenamientos. Al día siguiente, tendrán lugar las entrevistas con Caesar, y después…la mañana siguiente darán comienzo los septuagésimos quintos juegos del hambre. Se me hace un nudo en el estómago sólo con pensarlo.
Pasan un par de horas más, y no sé si me despierto por el hambre que siento, ya que no he cenado o por la conversación que mantienen dos personas a poca distancia de mí. Aún sigo sentada frente a la puerta de Gale, pero mi cabeza ya no está apoyada sobre el hombro de Cinna. De hecho, una de las personas que están hablando es Cinna.
-… me dijo que no quería cenar, y me pidió que me quedara con ella. Después supongo que nos hemos quedado dormidos.-le explica a la otra persona.
-Tan cabezota como siempre…-la otra persona es Peeta. Oigo los pasos y noto como él me acaricia unos mechones de la cara y me los coloca detrás de la oreja.-Voy a llevarla a su habitación, y después intentaré hablar con él. Antes me hizo caso, quizá le pueda hacer entender…Debes estar muerto de hambre, Cinna. Haymitch y Effie aún están abajo, ve a cenar.-Oigo como Cinna también se acerca a mí y me da un dulce beso en la frente. Después, oigo cómo le da una palmadita en el hombro a Peeta y le desea buenas noches. Peeta y yo nos quedamos solos. Podría abrir los ojos ahora y seguir en la puerta de Gale. Sin embargo, cuando los brazos de Peeta me cogen suavemente en volandas, no me resisto. Estoy agotada, y, si siguiera en la puerta de Gale, acabaría durmiéndome, y prefiero dormir en mi cama.
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En Llamas. ¿Qué pasaría si...?
FanficEsta es una versión alternativa de "En Llamas", segundo libro de la trilogía escrita por Suzanne Collins. En esta versión, no habrá Vasallaje de los Veinticinco, y Katniss, junto a Peeta y Haymitch, tendrá que ejercer de mentora sobre dos nuevos tr...