Vida mágica. (Draco Malfoy)

XXI

Antes que nada, muchas gracias por sus likes y comentarios; pero creo que es necesario aclararles que (al igual que mi anterior fic) la trama secundaria no se desarrollará igual que en los libros/películas, eso sería imposible ya que la protagonista principal ni si quiera existe en la mente de jk rowling, rayis solo existe en nuestros corazones (?

Sin más que decir, les dejo el cap.

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— _____ queríamos decírtelo. — se apresuró Hermione, llegando alado de Harry rápidamente.

— Olvídenlo, no me importa. — les corté y giré para salir de allí.

— ______!— me gritó Harry, pero fue interrumpido rápidamente por la voz de Umbridge.

— Todos acompáñenme, en silencio señor Potter.

    No tardaron en pasar alado mío escoltados por los alumnos de la brigada inquisitorial, la gran mayoría de Slytherin. Según había escuchado en el monólogo de Dolores, se hacían llamar "El Ejército de Dumbledore", y por lo que vi, estaban muchas personas cercanas a mí, que no dudaron dos veces en ocultármelo.

    Caminé lentamente por los pasillos hasta que llegué a la sala común. Las lágrimas no tardaron en aparecer, pero esta vez no estaba triste, no me sentía sola: estaba enojada. Estaba enojada con Harry y con todos, porque nadie había sido capaz de contármelo mientras me veían la cara de idiota. Cuando Draco había intentado decírmelo lo traté de lo peor y lo acusé de querer separar a mi familia. Pero todo lo que sentía y pensaba estaba mal.

    Acaso era un Slytherin el único que se preocupaba por mí?

    Estuve por horas en la sala común, y los gryffindor que entraban no se atrevían a hablarme. Finalmente, casi por la madrugada, llegaron los héroes del mundo mágico.

— No puedo creer que se hayan llevado a Umbridge eso ha sido genial! — gritaba ron.

    Todos se veían muy felices hasta que me vieron. Subieron a los dormitorios, quedando solamente Ron, Hermione, y mi primo. Se limitó a mirarme sin saber qué decir.

— Eres un maldito Harry.

— Lo siento! quería decírtelo pero no podía hacerlo. — levantó la voz.

— Yo no iba a juzgarte. Pero sabes qué? Admiro lo leales que fueron todos al seguirte sin musitar al ordenar que me lo ocultaran. Eres un gran líder. — hablé irónica.

    Entre mechones de pelo, pude notar que la cicatriz de Harry se ponía cada vez más roja. Signo evidente de que estaba siendo carcomido por los nervios.

— Cómo se supone que confíe en ti si te pasas las vacaciones revolcándote con un maldito mortífago?! — explotó — claramente no te lo iba a decir!

    En mi vista periférica pude ver que Hermione y Ron casi se desmayan cuando lo escuchan.

— De qué habla Harry? Con quien te estás viendo? — preguntó una alterada y confundida Hermione.

— Harry por Merlin! — reproché, ignorando su pregunta — quieres saber por qué te han descubierto hoy? — pregunté hablando más fuerte.

— Fue muy claro quien nos delató, y quien lo acompañó. — escupió las palabras.

— Pues te lo voy a contar: Draco fue a avisarme que Umbridge sabía sobre tu estúpido grupito, pero yo no sabía nada sobre eso, cierto?! — sentía la garganta fallarme de tanto hablar en un tono elevado — entonces creí que él estaba intentando separarnos, a tí y a mí! COMO TU ME HICISTE CREER! él te delato hoy para demostrarme que no me mentía! Él lo sabía hace semanas, y si no te delató fue por mí! — ahora estaba gritando y acercándome a él peligrosamente.

    Harry sacó su varita, pero yo estaba desarmada.

— Atácame si quieres. — reproché parándome muy cerca de él y extendiendo los brazos — como si yo hubiese sido la que te ocultaba algo — hablé más despacio.

— Harry ya. — intervino Hermione, que no entendía nada.

    Subí a mi habitación, que estaba extrañamente vacía. Cerré la puerta y me apoyé contra ella, golpeando levemente la cabeza contra la fría madera. Faltaban a penas dos semanas para que acabaran las clases, ya había rendido todos los exámenes importantes y lo que haría en estos quince días restantes serían regularizaciones. Así que finalmente tomé una decisión. Tomé mi baúl y con un rápido hechizo lo acomodé todo, bajé de nuevo pero cuando estaba llegando al final de las escaleras pude distinguir la voz de Harry, ellos seguían en la sala.

«Entonces cuando fui al callejón Diagón la encontré con Malfoy, estaban saliendo del callejón Knokturn, ya saben lo que hay allí ...»

    Simplemente se lo estaba contando todo a sus dos amigos. De todos modos bajé con mi baúl y atravesé la sala común para llegar lo más pronto posible al cuadro de la señora gorda. Ron y Hermione ahora me juzgaban con la mirada.

— A dónde vas? — preguntó Harry.

— No te importa.

— Pero ____ todavía no acaban las clases, podrían expulsarte por ir sin avisar. — dijo Hermione, mostrando aún un poco de comprensión. Pero quien pensaba en si lo expulsaban o no en una situación así?!

— No me importa — dije rodando los ojos, y saliendo por la puerta.

    Nadie intentó detenerme así que seguí mi camino. Fui al despacho de Umbrigde y Cho Chang, que se encontraba esperando afuera, me dijo que los de la Brigada seguían reunidos. Entonces salí de allí y me senté en el suelo de un pasillo cercano a la sala común de Slytherin, por donde sabía que Draco pasaría en cualquier momento.

— Hey. — dijo al fin, luego de por lo menos, una hora.

— Hey. — me incorporé — Yo, lamento no haberte creído... y solo vine a decirte eso. — me encogí de hombros.

— Por qué traes un baúl?! — lo notó de repente.

— Ah, me voy de Hogwarts, ya tomé todas las pruebas, no te preocupes por eso.

— No es eso ____, a donde iras?

— A mi muggle casa? no sé. — estaba un poco cansada y solo quería que el día acabe.

— No lo entiendes, Hogwarts es el lugar más seguro en el que puedes estar ahora, es por eso que te dije que vayas a ver a tu familia en Navidad, planeaba decirte que te quedaras aquí en vacaciones. — ahora sonaba un poco paranóico.

— Qué pasa contigo?

— Es que... — suspiró — nunca hablamos de esto, pero ... él, ha vuelto, lo sabes no?

— Esa guerra que ni siquiera empezó me tiene mentalmente cansada desde el primer año.

— Por muchos problemas personales que tengas, no puedes estar totalmente desinteresada o ajena a ciertas cosas. — hablaba como un adulto.

— Draco por favor, ahora solo quiero escapar de esta situación.

— Hay cosas de las que no puedes escapar ______. — dijo hablando más para sí mismo, que para mí.

— A qué te refieres?

— Yo... no sé como decirte esto.

— Solo dilo. — lo miré fijamente y él agacho la cabeza.

— Voy a convertirme en un mortífago cuando acabe el curso, y, voy a extrañarte mucho luego de eso.