-Creo que necesito sentarme- Zayn apareció por la puerta del salón y desplomó su cuerpo sobre el sillón. Exhaló un gran suspiro-. ¿Alguien me puede traer un vaso de agua?- murmuró.
Sabía que se estaba refiriendo a mí porque me estaba mirando pero no estaba por la labor de ser la chacha. Aparté la vista de él, esperando que cogiera la indirecta y Louis soltó una ligera risa al notar el gesto
-¿Ashley?- lo intentó con ella pero también negó con la cabeza.- ¡Oh, vamos! Acabo de subir una puta estantería por las escaleras hasta un tercer piso a pulso. Lo menos que merezco es un vaso de agua.
-Lo dices como si lo hubieras hecho solo- sugirió Ashley. Louis tenía una pequeña sonrisa en los labios, divertido por cómo estaban humillando a su amigo.
-En el primer estante están los vasos. Hay agua en la nevera- le indiqué desde el sillón opuesto.
-Ya no quiero nada-. Se cruzó de brazos apretando los labios en una fina línea.
-Eres un mierdas, Malik- era la primera vez que Louis hablaba desde que estábamos en la calle.
Al contrario que Zayn, que se había estado quejando todo el rato, Louis había permanecido callado y sin rechistar. Cuando habían subido la estantería me había sorprendido la facilidad con la que la que la había cargado. Mientras Zayn estaba acalorado en el sillón, Louis tenía las manos en los bolsillos y ni una gota de sudor le rondaba la frente.
-Tenemos que salir, así que será mejor que os marchéis- anunció Ashley levantándose de mi lado y dirigiéndose hacia la puerta donde estaba Louis. Al ver que ninguno de los dos chicos la seguía se paró en medio del pasillo-. ¿A qué estáis esperando? Moveros- ordenó. Zayn obedeció y se levantó. Se colocó la chaqueta y se acercó a mí.
-Nos vemos pronto- susurró y me dio un beso en la mejilla. Me incomodó un poco el gesto y más porque Louis nos miraba con una expresión difícil de leer. Zayn se estaba tomando muchas confianzas y eso no me gustaba. La próxima vez le dejaría claras mis intenciones. Se alejó, no sin antes guiñarme un ojo, y desapareció por la puerta. Louis me echó una última mirada y se dio la vuelta.
-¿Es que no te vas a despedir? Ah, claro, que eso de los modales no es tu fuerte...- él giró su cabeza un poco, lo suficiente para verme. Abrió la boca y yo esperaba que dijera algo pero, en vez de eso, la cerró de nuevo y se fue. Estaba claro que si buscabas maleducado en el diccionario saldría su cara, sin duda.
*
Una vez que se habían ido, nos arreglamos para salir. Habíamos quedado con nuestras madres. Hoy por la tarde volverían a Nottingham y nos teníamos que despedir de ellas.
-¿Me estás diciendo que me tengo que meter en eso?- señaló al pobre Ford blanco.
-Sí. No te quejes, que esto es mejor que nada- sin rechistar más, se metió en el coche, al igual que yo.
Tampoco era para tanto, era un coche como todos los demás. A veces Ashley se pasaba de consentida. Conduje despacio hasta el hotel dónde antes me hospedaba. Habíamos quedado allí para tomar algo en la cafetería y después, nuestras madres se marcharían.
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Fast
أدب الهواة"-Entonces ¿por qué estás aquí conmigo y no con él? -él quiso darle un giro a la situación y ponerla de su parte para hacerme de rabiar, pero ambos sabíamos que las cosas no eran así. -¡Sabes que no tenía otra opción para volver a casa! -exclamé, fr...