scomiche One Shots (+18)

Arriesgarse

Aclaración previa: Esto está, de cierta forma extraña, inspirado por la canción "Work" (Rihanna), ni siquiera estoy segura de si me gusta esta canción...o de si me gusta Rihanna. Pero la gente con la que vivo me bombardeó todo el día con esta canción, y se me hace muy sexual, ¿y qué rima con sexual?  Exacto! Scömìche :3  

La verdad es que la historia en si no tiene mucho que ver con la canción, pero la idea me surgió escuchándola. 

No sé qué pasa conmigo, últimamente todo lo que escribo resulta super romántico...a pesar del Smut *guiño guiño*

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*Época: justo después de ganar The Sing Off* 

Para Scott nada había cambiado, desde la primera vez que lo besó, el día de la audición para The Sing Off. En el fervor de la alegría no pudo contenerse, cuando nadie los estaba viendo simplemente se abalanzó contra él y lo besó con locura. 

Todo quedó en nada cuando la exigencia el programa los tenía totalmente agotados, ciertamente eran "algo" pero cada vez que Scott lograba robarle un beso escondido, Mitch hacía lo mismo: Lo besaba de vuelta con esa mágica boca que traía a Scott en las nubes, pero apenas la situación subía un poco de tono, se alejaba, cambiaba de tema o simplemente, hacía como si no hubiera pasado nada. 

Había pasado un tiempo desde que no intentaba nada para seducirlo. Scott sabía que Mitch había pasado por dificultades amorosas antes, que tenía mucho miedo, que fue horrible declararse gay en la escuela a la que asistían y que mucha gente le hizo daño, lo entendía y lo esperaba por eso...pero por sobre todo, lo deseaba. 

Ahora estaban en un nuevo comienzo, recién llagados a Los Ángeles para comenzar su carrera, compartiendo un departamento. Iba ser muy difícil para Scott mantener el lentísimo ritmo de Mitch ahora que lo tendría tan cerca cada día. Quizás ya era hora de cambiar un poco las reglas del juego.

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Su primera noche en su nuevo hogar merecía celebración, así que luego de la primera botella de chardonnay ambos ya estaban descalzos sobre el sillón, de frente, con una suave música que brotaba de alguna parte de la sala. 

Se rieron y hablaron como siempre, como los mejores amigos que son, pero Scott no podía concentrarse en la conversación viendo al pequeño cuerpo de Mitch moverse con la música, tampoco había pasado por alto el sonrojo en las mejillas del chico ni  que la ancha camiseta que traía puesta se había movido de su lugar, cayendo por un hombro de Mitch, dejando a la vista esa suave piel que él tanto quería tocar.  Se sentía increíblemente incómodo en sus pantalones. 

En algún momento Mitch se levantó para ir en busca de la siguiente botella de licor a la cocina, hizo todo el camino bailando al compás de la suave melodía,  moviéndose con la música y con los azules ojos de Scott pegados en su cuerpo, devorándolo con la mirada. Parecía que estaba incluso intentando tentarlo, actuando todo inocente pero moviéndose tan sensualmente con esa prenda que dejaba a la vista más de lo que Scott podía resistir. 

Cuando hizo el camino de vuelta al sillón, con una botella en la mano, no alcanzó a sentarse. Scott tomó su muñera y con un movimiento firme tiró para que quedara sentado frente a él, en la mesita de la sala. Un quejido agudo salió de la boca del chico, pero no dijo nada. Sólo se quedó sentado ahí viéndolo con grandes ojos y la respiración entrecortada. 

La voz de Scott sonó ruda y muy grave cuando habló y dejó a Mitch fuera de combate en seguida. 

-¿cuánto tiempo más voy a tener que andar acechándote? sabes que tienes mi corazón y mi paciencia, que quiero darte lo mejor de mi, pero andas por ahí actuando como si no te gustara a pesar de que estas aquí todo excitado, Mitch.