l.La Ciudad de las Almas Nocturnas

23.El nuevo alcalde

El espectro que aterrorizaba a todo el pequeño pueblo había sido derrotada, su nombre se había dado como Banshee que se traduce como espectro que se lamenta y eso hacia, al parecer, lo que les dijo Vhier, era que hace muchos años, ya remontando en los siglos: Vhirna, una hechicera agua, muy buena y excelente en su categoría, vivía una vida feliz y tranquila como curandera de su pueblo, ya que ella era de las pocas que tenían en su conocimiento la curación con el agua. Tenía 2 hijos, gentiles y preciosos, Mhannabell y Hiuck, los 3 eran una familia feliz, noble, su esposo Lhuka, murió en la guerra. Hasta que la aldea fue atacada, un día, por los orcos y hechiceros de Badhour, no dejaron a nadie vivo, pero sí a la mujer, que estaba destrozada no por sólo presenciar la muerte de sus hijos, si no la de toda su aldea, ancianos, niños, hombres, mujeres, ella rompió en un llanto eterno que la termino matando, poco a poco se fue apagando la mujer dulce y gentil quedando solo alguien que lloraba y sufría, en una mañana decidió que su dolor era demasiado para seguir viviendo, solo pronunció las palabras que eran una maldición, un conjuro: me voy, pero regresaré para tomar venganza de mi familia, y de la caída de mi pueblo absorberé 100 almas para sacar mi, tomo el cuchillo y se corto el cuello........el único pensamiento que la mantenía intranquila era ver a ese hombre alto, de nariz delgada, con un parche, de cabello largo, por eso, solo, buscaba hombres. Su maldición. No sabían cómo había terminado bajo el control y a servicio de Veadhus, y era un misterio.

La gente cuchicheaba sobre quién o quiénes habían calmado la ira del espectro, y los jóvenes que realmente lo habían hecho estaban en la oficina del sheriff Bert, que no los miraba ya que les leía los correos que le llegaron felicitándolo por haber acabado con esa cosa chupa almas, otros realmente cuestionaban si sus hombres estuvieron involucrados o fue una ayuda que vino de fuera, otros argumentaban que podía regresar con ganas de venganza.
Los chicos estaban hecho un asco: Logan tenía su camisa y su chaqueta rasgada y empolvada, su rostro estaba igual o peor, Carly tenía su blusa amarilla vuelta en color café por el polvo, sangrante de la mejilla derecha, Jhade no perdía su posee ni su mirada penetrante y vacía, mide su labio escurría un poco de sangre y su ropa era negra no se notaba sucia, solo su rostro, Oddie se había salvado peor por muy poco, apenas se veía sus marcas de batalla.
Pero aún quedaban las víctimas, que habían sido completamente hombres: adolescentes, niños, ancianos, adultos, entre esas categorías estaba el joven Zack. Vhier fue de muchas ayuda, sino es que fue gracias a él que los desalmados volvieran a caminar, tan rápido los regresaron a su estado viviente se encargaron de que nadie recordará sus rostros, les borraron de su memoria los rostros grabados, era simple consistía en hacerles beber la poción para revivirlos y de inmediato les daban otra para que no se acordaran de ellos, pero les daban instrucciones:
No corran, sus piernas a penas se están recuperando, lo mejor es que caminen.
Sus ojos están desacostumbrados a la luz así que deben usar por un tiempo gafas de sol.
Sus oídos también, procuren evitar la música a volumen alto.
Y así les borraban la memoria a excepción de Zack, que estaba cegado y sordo, pero eso era temporal. Aturdidos, se encaminaban a sus casas, el sheriff les indicaba la salida, donde sus familias estarían contentas de tenerlos
con ellos nuevamente en sus casas. Logan estaba muy satisfecho.

Ya eran semanas lo que separaba los días que nadie quería salir de noche a la calle por temor a ese espectro. Todo ahora era completamente diferente en todo sentido de la palabra, había fiestas hasta 5 de la mañana, reuniones, la música no se dejaba de oír, Green Mille se había vuelto nocturno. No tenían nada que temer.

Un día después de la escuela todos se reunieron para ir a comer pizza, era en conmemoración de la victoria sobre banshee y la liberación del miedo en que vivía el pueblo — Entonces Logan la sujetó bien y fue cuando Carly y Jhade la cegaron......— narraba Oddie con orgullo, aunque él no había hecho ni pizca para derrotarla más que estorbarles a los demás— Sí, y casi te petrifica a ti también, niño, de no haber sido por mí también estarías medio ciego— le refresco la memoria Jhade, y era cierto ella había evitado que Oddie fuera petrificado el día de que la enfrentaron de nuevo— En mi familia, eso es una perdida de honor, y no sólo en la mía, me atrevo a decir que en todas las que provienen de Telour, tú, Oddie, me debes una ya que mi sangre fue derramada por tu culpa y estas obligado a cumplirla o serás mi lacayo, hasta que yo quiera y no sólo moralmente, es una maldición, por así llamarlo, ahora tráeme más gaseosa, que ya no tengo— Oddie, ofendido volteo a ver a Logan que solo sonreía sin decir una palabra, él niño esperaba una defensa, la cual nunca que llegó, así que tomó el vaso de Jhade y fue a hacer lo que quería. Un gran júbilo inundaba la pizzería pero todas las risas se apagaron cuando en la televisión se anunciaba la presentación del nuevo alcalde de Green Mille, con mucha seguridad rodeándolo y Oswald Bert, por un lado con ceño, muy elegante, y al otro lado estaba Ulises Barner, portando su clásico traje, pero en medio de los dos subió al podio un hombre alto e imponente, con nariz ganchuda, llevaba un traje con corbata roja oscuro que hacían juego, era calvo, y tenía unas cejas finas pero pobladas le resaltaban sus ojos verdes— Es un honor para mí, ser el nuevo alcalde que Green Mille necesita— dijo a los micrófonos que tenía enfrente, y en su boca bordeada por una barba de candado se dibujó una sonrisa.