>> Tras esto me enganché en su brazo y anduvimos por el pasillo sin decir ni una palabra. Yo moría de la vergüenza por estar a su lado, y él sonreía con la cabeza en alto.
Al llegar al ascensor, pulsó el botón de la planta baja y se quedó mirándome.
-Eso es bueno.- dijo de pronto.
-¿Qué?
-Lo del novio.- seguía mostrándome una sonrisa escasa ligeramente torcida hacia un lado.
-¿Por qué?
-Nada.- me miró por el rabillo del ojo y volvió a levantar la barbilla en tono de superioridad. Era más alto que yo en tacones y verlo ahí parado a mi lado, en carne y hueso y sacado de un vídeo de YouTube me intimidaba.
Harry salió antes que yo del ascensor y aproveché para admirar su atuendo y lo bien que le sentaba.
-Voy un momento a buscar a mis padres, ahora vuelvo.- él asintió y emprendí mi busca por el salón hasta que los encontré.
-¡Hannah! Te estaba buscando.
-Me llegó tu mensaje hace un par de minutos y por eso no subí a recogerte.- habló mi padre tranquilo, a diferencia de mi madre que parecía preocupada.
-¿Dónde te has metido?- volvió a preguntar ella.
-Acabo de llegar, me estaba arreglando. He bajado con un chico.
-¡¿Un chico?!- gritaron a la vez
-¿Cómo se llama?
-Sólo llevamos aquí un día, cómo lo has conocido.
-Es sólo un amigo.- suspiraron y continué.- los conocí anoche porque me despertaron haciendo ruido en el pasillo. Hoy los he visto en la piscina y nos conocimos mejor.
-¿Los? ¿Cuántos son?- preguntó mi padre extrañado.
-Tres, en realidad ya los conocía.- me lanzaron una mirada de eres-una-cría-y-debes-contarnos-todo-o-estarás-castigada. Suspiré.- Mamá, ¿te acuerdas el grupo de chicos que cantan que tanto me gustan? Pues son ellos.
-¿Famosos? ¡Salud!- mi padre nombró a mi madre con tono molesto.- ¿Y si se quieren aprovechar de la niña?
-No se van a aprovechar. Además, ya es mayorcita. Tiene que enfrentarse a nuevas experiencias.
-No me gusta tu faceta de madre liberal, lo sabes.- refunfuñó de nuevo papá.- Bueno, ve con ellos si quieres hoy pero ten cuidado y vuelve pronto.
-¿Los encontraste? Has tardado mucho.- dijo Harry cuando volví hasta su posición.
-Sí, pero ha habido un pequeño suceso.- le contesté mientras tomaba su brazo, entrelazándolo con el mío.
-¿Qué ha pasado?
-¿Qué?- pregunté como un acto reflejo, usando esa maldita muletilla que tanto decía incluso cuando me había enterado de la pregunta.
-Qué ha pasado con tus padres.
-Oh, no importa. Una pequeña discusión.- sonreí quitándole importancia –pues no la tenía- y entramos al salón.
Era una amplia habitación con una barra, escenario y mesas para la cena. Las luces estaban atenuadas y las ventanas adornadas con cortinas de terciopelo rojas recogidas con un cordón gordo de color oro.
Primero sonó música movida y estuvimos bailando un buen rato hasta que el DJ anunció que iba a cambiar el ritmo de la música para todas las parejas de la pista. Enseguida entendí lo que eso suponía y comencé a sudar.
ESTÁS LEYENDO
MIEDO
Teen FictionCuando un ser humano se encuentra solo en un Universo adverso, en un Mundo no reconocible, hace locuras para mantenerse en sí. La magia del amor, el odio, la ciencia y el gran poder de nuestra mente se mezclan en esta historia. "Miedo. Eso es lo q...