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Segundo tras Segundo

Habiamos tardado mas gracias al giro que tuvimos que dar después de la tragedia, habia caido de nuevo la noche y estabamos escondidos tras una casa, estabamos admirando la enorme muralla que se alzaba ante nosotros y tras esa se encontraba nuestro destino, la base de Jonathan.
Seguía pensando en lo que dijo Ruben, ¿Le gusto?, es obvio que le gusto, ¿A mi me gusta?, pues si, no, nose, estoy apunto de entrar a la base enemiga y me pregunto eso, pero es que...
-¡Caroline! Concentrate- susurro Daniela
-Lo siento- dije sacudiendo mi cabeza para despejarme los pensamientos
-Hay que acercarnos ala muralla para que Caro pueda ver a cuantos enemigos nos enfrentamos- Dijo Daniela. Nos acercamos sigilosamente cerca de la muralla, esta media el triple de lo que median las puertas de la base principal de España, era gigante, enorme. Toque aquel material extraño y liso, pero no pude ver nada, era un metal y repelia mis poderes- Que extraño, no logro ver nada- dije-Hare un tunel pequeño para pasar por debajo, no creo poder controlar este material- seguido de eso lleve lleve mis manos hacia abajo y se creo un agujero para poder pasar al otro lado.
Ya estábamos todos metidos en el agujero, saqué mi cabeza hacia el otro lado para poder ver, era una base gigantesca, había casas de campaña, edificios grises y en medio de todo eso la estructura principal, era de la misma altura que la muralla, voltee para los dos lados y no había enemigos a la vista. Les hice un gesto al escuadrón para que subieran en silencio, me quedé agachada unos minutos y luego me pare para empezar a caminar sigilosamente. Todo estaba en extrema calma, sólo se escuchaba el viento y nuestas pisadas en aquel material extraño, no alcanzaba a ver lo que había más allá de unos 5 metros, las estructuras creaban las sombras para no chocar contra ellas, seguimos avanzando, todo en silencio. Luego sentí que esto ya había pasado, en Portugal, no, otra vez no, toque el suelo y cerré mis ojos, como lo había pensado el suelo repele mis poderes, me levanté de nuevo y escuchamos que algo se caía en la distancia, todo el escuadrón volteamos hacia la obscuridad, efectivamente ya nos esperaban.
Me di vuelta y grite -¡Regresen!- el escuadrón hizo lo mismo y comenzamos a correr hacia la muralla, de repente toda la base se iluminó gracias a los grandes reflectores que proyectaban una luz Blanca, nos cegamos unos segundos pero no paramos de correr, estábamos a unos escasos metros de llegar a la salida improvisada y sentí el primer golpe en la espalda, me tambalee hacia adelante y caí de rodillas, Daniela se volvió para pararme, me jaló del brazo para continuar corriendo, Génova y Zerovia ya se encontraban dentro, Susejh y Auron llegaron al mismo tiempo. Gire mi cabeza unos segundos y pude ver como las placas de metal venían directo hacia nosotras, empuje a Daniela quien cayó dentro del hoyo, yo sentí el impacto de la placa en la pierna, me caí y mi cabeza estaba en la orilla del agujero, sin pensarlo me arranqué el intercomunicador de la muñeca y lo lancé dentro, como pude me pare y les heche una rápida mirada al escuadron-¿¡Que haces!?- grito Susejh, les di una sonrisa y les dije-Lo siento- cerré el hoyo y sentí como me empujaban desde atrás cayendo hacia el frente. El impacto me dolió en el estómago, solté un golpe que impactó en la boca de un enemigo, me lancé hacia otro y comencé a conectar varios golpes con su estómago. 5 hombres se encontraban encima de mi, intentando sujetarme las extremidades, me colocaron las placas en los tobillos, en las muñecas y en mi cuello, me dejaron tirada en el suelo y me rodearon, observé detenidamente las placas, intentando quitarmelas.
-Es una tecnologia increíble ¿No lo crees?- el apareció en frente de toda la gente, Jonathan
-Hola- me pare del suelo, recordé por un momento la burla de Daniela en el Cazador, no le iba a decir que venía para matarlo
-Caroline que agradable sorpresa- dijo
-Si bueno, ya sabes que me gusta este tipo de cosas- al menos el escuadrón pudo salir
-Es momento de que te ponga en tu lugar, ¿No quieres un Tour por la base?- dijo
-Interesante- intenté captar su atención, di un vistazo atrás donde la muralla perdía color, donde el escuadrón pudo escapar.
Nos adentramos en aquella fortaleza de azulejos blancos y paneles de cristal por todos lados, pasamos por sus laboratorios, su control de misiones, salas de Conferencias, ¡Realmente me estaba dando un Tour!, paramos unos minutos y yo ya tenía estudiada toda su base, en efecto la habitación de las defensas que tendría que desactivar el escuadrón estaba en el último piso, de repente sentí como las placas de metal se movían solas y se iban hacia atrás, haciendo la función de unas esposas, tenía mis manos atadas a la espalda, me cubrieron la cabeza y me guiaron por los pasillos, derecha, izquierda, otra ves derecha hasta se nos detuvimos. Entramos a lo que parecía ser una enorme sala, pues nuestras pisadas creaban un eco increíble, me sentaron en una silla, todavía no veía nada.
-Caroline, llevo años buscandote y tu vienes directo a mi- dijo
-De nada- le dije
-Sabes, eres un experimento increible- empezó a caminar por la habitación
-Si si, lose-
-De todos los países, de todo el mundo fuiste tu, la que perdió a sus padres y se convirtió en un supersoldado-
-No los perdí, ¿Recuerdas?, tu los mataste- dije, me temblaba la voz
-Ah, si, es verdad- dijo restandole importancia
-¿Qué vas a hacer conmigo?-
-Frustraste mis planes, sería algo aburrido matarte ahora- así que mejor juguemos
-¿Jugar?- sin pensarlo, sin saber, sentí un tremendo golpe en la cara
-Si, jugar- me quitó lo que traía que me nublaba la vista y pude ver mejor la sala, era enorme con cámaras en todos los ángulos, había pantallas, instrumentos filosos, cuchillos, masos y un par de guantes se hallaban en un mesa de metal al lado de mi, una perfecta sala de tortura.
-Para mantenerte despierta vas a contar segundo tras segundo- dijo poniéndose los guantes, de nuevo me golpeó pero ahora del otro lado de mi cara, comencé a contar en mi mente, una patada en mi estómago me hizo gritar -¡Empieza a contar fuerte y claro Caroline!- me grito cerca del oído reventandome los tímpanos y mentiendome el pánico en el cuerpo.
-Uno, dos, tres...- otro golpe- cuatro, aggg, cin-co-
Seguía mentiendo golpes en todo mi cuerpo, sin darme cuenta ya había caído en su juego, ya me sudaban las manos, Ya me temblaba el cuerpo, respiraba agitadamente , ya estaba inmersa en el pánico y yo seguía contando segundo tras segundo.