Un Placer Conocerte... Hermana

Capítulo 16

Sabrina

Me parece que he estado demasiado tiempo frente a esta puerta, estoy temblando y no precisamente de frío, definitivamente tengo nervios y por momentos retrocedo, dejándome abrumar por la cobardía.

¿Qué le voy a decir?

<Marianna, he sido una completa idiota, perdóname y vuelve conmigo>

<Marianna, hemos vivido un amor muy intenso que merece la pena repetir>

<Marianna, soy una perra, idiota, cobarde e inmadura, pero te amo>

Joder...

Miro mis manos temblorosas y frías <¡Maldita sea! Yo no sé hacer esto>, nunca había corrido a los brazos de nadie, creí que eso sólo se veía en los libros de romance y, por lo general, de eso se encarga un hombre...

... O sea ¿Eso quiere decir que yo soy el hombre de la relación?

<Joder Sabrina enfócate y deja de pensar en estupideces> me reprocho por mi balbuceo interno.

Estaba tan ensimismada con mi diálogo interno que tardé en sentir la vibración de mi teléfono, como cosa rara olvidé ponerle el tono cuando salí de la ceremonia, aunque realmente, en este momento lo único que tengo en mi cabeza tiene nombre y es una morena preciosa.

Se me escapa una risa fugaz y cuando miro la pantalla se me hiela la sangre.

Es mi padre...

─ Padre...─ Respondo con una voz algo urgida para que sea una conversación breve.

─ Sabrina, me informaron que estás en la isla, tu madre y yo justo estamos llegando.

─ ¿Ustedes... qué? ¿Y eso? ─ Le pregunto un poco confundida, mirando la punta de los dedos de mi mano izquierda.

─ Sabrina te dije que tengo una conferencia mañana, de hecho te pedí que vinieras...─ mi padre suspira, como tratando de mantener la calma ─ pero últimamente estás demasiado distraída, deberías enfocarte en los negocios y en tu vida amorosa con Raymond ─ suspiro estresada ─ bueno... te quiero en la sala de conferencias de Luxor a las 8 a.m.

─ Papá, no puedo asistir a la conferencia... ehm, tengo asuntos personales que atender.

─ ¡Vaya! Increíble Sabrina...

─ Papá, sabes que hago lo mejor que puedo, esa conferencia es sólo a nivel informativo y conozco el contenido... yo...

─ ¿Qué? ─ mi padre me interrumpe para hablar con alguien al otro lado de la línea, por su voz reconozco que es mi madre, la única que ha podido "dominarlo" o al menos hacer que de alguna manera cambie de idea con algo ─ Ok... Sabrina, estoy muy cansado para discutir contigo ¿No quieres ir? No lo hagas... pero tu madre desea que almuerces con nosotros... así que te espero al mediodía en el restaurant del hotel.

Y cuelga...

Cierro los ojos y suspiro por segunda vez tratando de mantener la calma, él siempre tan autoritario que me saca de mis casillas fácilmente, pero no puedo hacer nada porque siempre será mi padre...

Mi padre...

Aunque jamás tenga un gesto de afecto.

Aunque raras veces me llame "hija".

Aunque me obligue a vivir una vida que no deseo... Por cierto ¿Qué demonios voy a hacer con él?

Palidezco...

Se supone que él cree que me casaré con Raymond ¿Qué le voy a decir? ¿Cómo mantengo esa mentira? ¿Por cuánto tiempo? Esto no es sostenible, tarde o temprano se dará cuenta y entonces... ¿Estaré realmente dispuesta a abandonarlo todo por el amor de Marianna?