Lost in you

Epílogo

N/A: Cuando vean ** ya saben que pueden poner el vídeo que les dejo en multimedia, espero que les guste, disfruten el cap...(tomen pañuelos por si las dudas). PD: Lean la nota final que es importante.

Shaleen POV

2 años después...

La música seguía sonando tan fuerte que podía sentir en mi cuerpo las vibraciones, continué bailando con los ojos cerrados, hace tiempo que empecé a bailar así y era un milagro que no terminara con mi cara estampada en el suelo. Dejé de bailar cuando las vibraciones dejaron de sentirse; la canción había acabado.

-Bien hecho chicos, el ensayo ha terminado- anuncia Fabricio, el coreógrafo, y todos aplaudimos.

Tengo sudor en todos lados, inicia desde mi cara, baja por mi cuello y se sigue deslizando a lo largo de mi espina dorsal. Después de que pasó mi quinceañera me di cuenta de que me gustaba mucho bailar, además que lo tomé como una medida de escape ante mi estrés. Mis padres me ayudaron a buscar una academia de baile en la cual me inscribí y actualmente sigo aquí.

-Lo has hecho fa-bu-lo-so, nena- canturrea Fabricio cuando me acerco para coger mi toalla y así limpiarme el sudor.

-Muchas gracias, corazón.

-Joder chica, eres afortunada por tener a esa lindura de chico esperando por ti- me señala hacia atrás y me giro, ahí veo a mi apuesto novio.

-Lo sé, soy muy afortunada- admito sonrojándome como una vil colegiala al ver la sonrisa de él, sus lentes lo hacen verse más apuesto y en cierta parte no puedo enojarme porque todas las chicas a mi alrededor se lo coman con los ojos, en los últimos años se ha puesto más guapo de ser posible.- Nos vemos el próximo martes, Fab.

-Nos vemos, cielo- nos damos un beso en cada mejilla, tomo mi mochila y camino hacia él.

-Hola galán- le saludo coquetamente y me rodea la cintura con esos brazos a los que ya estoy tan acostumbrada.

-Hola, muñequita.

*Flashback*

Salí temblorosamente de la casa de Zed, seguí caminando mientras sacaba mi celular, le marqué a Edison y por obra divina al segundo tono contestó.

-Hola, chaparra.

-Necesito verte- susurro entre sollozos.

-¿Qué tienes? ¿Por qué estás llorando?

-¿Estás en tu casa?

-Sí, ¿por?

-¿Nos podemos ver en el parque que está a la vuelta de tu casa?

-¿Quieres que vaya por ti? ¿Dónde estás? ¿Qué ha pasado? Contéstame ya.

-Te necesito, flaco, en 15 minutos llego al parque.

Cuando llegué al parque Edison ya se encontraba ahí sentado en una banca, él estaba de espaldas a mí así que no fue capaz de verme hasta que me senté frente a él.

-¡Oh, mi amor!- exclamó preocupado abrazándome.- ¿Qué ha sucedido?

-Solo sigue abrazándome- musite y así lo siguió haciendo. Ahí confirmé todas mis sospechas.

-¿Me dirás que sucedió?- asiento y me separo de él, tomo unas cuantas respiraciones antes de comenzar a hablar.

-Me he peleado con Zed.

-¿Y por eso estás así? Ya todo lo arreglarán, por eso son mejores amigos.

-Necesito que escuches todo lo que tengo que decirte.