Capítulo 27

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Shaleen POV

Última semana de clases y por fin saldremos de esta cárcel. No sé si ponerme a bailar o ponerme a dormir por lo aburridos que son los últimos días. Y a pesar del esguince en mi tobillo, mis padres no me dejaron faltar a la escuela; ahora caminaba lento pero seguro.

-Es una lata que no puedas caminar rápido- farfulló molesta mi hermana.

-Ya te dije que no tienes que esperarme, te puedes largar con tus amigos- repliqué mientras me cubría más la boca con la bufanda. Hoy el maldito frío era extremo, estoy de acuerdo que había hecho un poco de aire los días pasados pero ahora parecía como si el frío invierno nos quisiera congelar a todos.

-Bien sabes que mi madre me dijo que no despegara mis ojos de ti, eso te pasa por no ver donde pisas- me sacó la lengua y llegamos a sentarnos a una pequeña jardinera que se encontraba por la entrada.

Habíamos llegado demasiado temprano para mi gusto, me quería ir a mi salón pero Kristie se había quedado de ver con Bonnie aquí, así que teníamos que esperarla.

-Hola Shaleen- me saluda Axel cuando llega.- Me enteré de lo que hiciste, eres toda una heroína.

-Claro que no, sólo hice lo que cualquier otra persona haría en su sano juicio. Además, el chico es mi amigo.

-Eso no importa, eres una heroína. ¿Qué te sucedió exactamente?

-Un simple esguince de tobillo de segundo grado.

-¿Cuánto estarás con esa cosa?- dice señalando con la cabeza hacia mi férula.

-De 4 a 6 semanas, depende de cómo vaya mi recuperación.

-¿Pasarás las vacaciones con esa cosa?- asiento y Axel se ríe.- Las consecuencias de ser una heroína- me guiña un ojo juguetonamente y Kristie pone los ojos en blanco.

-Hola chicos- canta Bonnie y nos saluda a todos con un beso en la mejilla.- ¿Cómo te sientes Shaleencita?

-Genial, aunque es incómodo traer pegada a Kristie todo el día refunfuñando porque camino lento- todos nos soltamos riendo, inclusive Kristie.

Luego se nos unió Penny y Damián y empezamos a platicar, hace tiempo que no pasaba el rato con los amigos de Kristie y ya veo que siguen estando igual de locos, eran muy divertidos y por cualquier cosa hacían algún chiste. Todo iba bien, hasta que llegó él.

-Hey- saludó Edison y yo giré mi cabeza para ver quien entraba. Quería largarme de aquí pero no podría irme al menos que Kristie me acompañara al salón o que viera a un amigo.

Ahora sentía mis hombros tensos, miraba hacia todos lados, en ocasiones Axel o Bonnie me preguntaban algo y yo contestaba con mi natural humor ácido. Intentaba con todas mis fuerzas no mirar hacia Edison pero sentía que con el paso de los minutos mis fuerzas iban flaqueando.

¡¡Oh Dios, por favor ten piedad de mí y sácame de aquí!!

Necesitaba que mis plegarías fueran escuchadas, creo que recé más en estos minutos que lo que he rezado en toda la semana.

-Así son la mayoría de los hombres, Bonnie- dijo Kristie.- Un día eres el amor de su vida y al siguiente ya ni recuerdan quién eres.

-Pero yo pensé que él si me quería, siempre era un chico muy lindo- responde Bonnie haciendo pucheros. Al parecer el chico con el que estaba saliendo Bonnie ya la dejó y ahora está con otra chica.

-Mírame a mí, Jerry era igual en un principio. Siempre era: Kristie para acá, Kristie para allá. Conforme fue pasando el tiempo se fue distanciando, lo miraba poco y ya no era detallista. Finalmente me engañó y se largó, no le importó dejarme destrozada.

Lost in youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora