––Niall, ayuda a ____ a llevar sus maletas. ––dijo Bobby cuando terminamos.
––De acuerdo. ––dijo Niall tomando mi maleta. Yo tome mi bolso y salimos en silencio.
El recorrido fue corto, bastante, para mi gusto. Aun así. Niall espero ahí hasta que abrí la puerta y entramos.
––Wao. Tenía mucho que no venia por aquí. ––dije suspirando. Todo estaba exactamente igual como lo había dejado.
––¿Cuándo fue la última vez que viniste?
Mire el sofá de la tía, donde me había tumbado con Niall para ver películas miles de veces. Luego fije mi vista en el.
––Hace ya muchos años.
––Entiendo.
Un largo silencio se extendió.
––Bien, te dejare instalarte. Mañana es noche buena. ¿La pasaras aquí sola?
––Supongo que sí. ¿Y tú? Según tengo entendido tus padres están separados. ¿Con cuál lo pasaras?
––Nos reuniremos todos, vendrá la familia de mi mama como cada año.
––Eso es bueno.
––Supongo que no pasaras noche buena aquí sola, ¿no te gustaría pasarla con nosotros?
Recordé a Maura y lo mal que nos llevábamos.
––No lo creo.
––Anda ya. Ven a las 7. O si quieres, puedes ir cuando gustes. No importa.
––Esta bien.
––De acuerdo.
Niall se marcho dejándome sola. Tome la maleta y la lleve escaleras arriba hacia mi antiguo cuarto. También estaba como lo deje. No se había movido ni una paja. E incluso todo estaba limpio, como si la tía venia de vez en cuando y limpiaba pero no cambiaba nada de su sitio.
––A desempacar. ––suspire, mire por la ventana a Niall el cual iba entrando a la casa de su padre.
¿Nunca me recordaras, Niall?
***
Me pase todo el dia limpiando la casa. Necesitaba ir de compras. En la cocina solo encontré comida enlatada y cosas no tan importantes para comer. Pero si me sirvió lo suficiente para pasar el día.
Tal vez fuera al supermercado en la mañana siguiente.
Termine de cepillar mi pelo y me acerque a mi ventana. Eran las 9:00pm. Y ya estaba lista para ir a la cama.
Corrí las cortinas y observe la casa de Niall, las luces aun estaban encendidas. Probablemente ambos jugando algún juego o viendo la TV.
Aquí había una TV, frente al sofá en la sala. También había otra en la habitación de la tía Hannah. Lo que no sabía y no había encontrado era una caja.
Esa caja que había extrañado tanto durante los primeros meses que pase en EEUU después de regresar de Irlanda.
Una caja pintada de rosa palido con miles de recuerdo.
¿A caso de eso si se deshizo la tía Hannah?
