Verona, Italia.
El colegio siempre me pareció un ambiente tóxico, desde que empecé primer grado, e incluso podría afirmar que en cuanto entré al jardín de infantes. Y gran parte de esto se debe a que he visto y presenciado circunstancias que hubiera preferido evitar. El acoso, las burlas, los susurros en los pasillos y los oídos sordos de las autoridades ante eso son sólo un claro ejemplo de porque me gustaría tener un giratiempos simplemente para poder avanzar hasta ser capaz de llegar al momento en que mis pies toquen el suelo de la Universidad a la que iré.
Afortunadamente, nunca fui una víctima de lo que ahora llaman "bullying", pues a pesar de ser más tímida de lo que me gustaría serlo, tengo una boca tan suelta que cuando alguien dice o hace algo que me parece incorrecto no cuento con la habilidad de mantenerla cerrarda; recuerdo perfectamente el día en que una vieja compañera intentó burlarse de mi cabello pelirrojo, comparándolo (no de una manera amigable) con una enorme fresa, y entonces visité al director de la escuela tantas veces que el idiota, con la sola intención de callarme, la suspendió por un par de días.
Para mi mala fortuna, no puede decir lo mismo de mi mejor amiga, Gabby, quien sufre de pánico escénico. Gabby es de lleno la persona más vergonzosa que alguna vez conocí; yo debo ser una de las pocas estudiantes en la escuela con las que se habla, y si alguien por algún motivo le dice algo ofensivo es de esas que prefieren agachar la cabeza y seguir su camino. Para su fortuna, eso no sucede cuando estoy junto a ella porque, ¿Cómo podría ver como alguien la trata de mala manera y no hacer nada? Una de esas personas, casualmente, es Justin Sullivan.
Justin es un muchacho de su clase del cual Gabby ha estado enamorada, prácticamente, desde que tiene uso de razón. Para mi criterio, Justin no es exactamente uno de esos chicos del cual alguien se alegraría que saliera con su mejor amiga. Pero, por razones obvias, Gabby no piensa igual que yo...
—Menos de un mes —canturrea ella sosteniendo dos papeles frente a mi rostro y sonriendo con la emoción desprendiendo de sus ojos como si se hubiese ganado la lotería—. Charlie, queda menos de un mes para el baile de graduación. Aún me es imposible creer que Justin Sullivan me haya invitado a ir con él, ¿a ti no?, de todos modos me puse tan nerviosa cuando se acercó a hablarme que casi hago el ridículo frente a él.
Continúo garabateando sobre mi libreta de física, mientras mi mejor amiga me relata la historia de como por poco perdió la oportunidad de ir al último baile de la escuela junto a su amor platónico.
—¿Qué hiciste? —pregunto aún jugando distraídamente con mi lápiz. Aún así, mi atención está completamente sobre ella, no es como que el baile de graduación cause mucha emoción en mi, pero como sé que para Gabby es importante lo menos que puedo hacer es escucharla.
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OUTSIDE THE DARK ― steve rogers
Fanfiction❝Más allá de la oscuridad, encontraremos nuestro camino❞ COVER BY → @-Naria copyright © 2016