Cama para tres (Thadore)

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Si algo tiene de bueno una exquisita comida preparada por una de tus cocineras mas exuberantes , es que inmediatamente , antes incluso de pegar bocado , te imaginas que estará delicioso.

Thadore también se imaginaba muchas otras cosas con la cocinera. Eso hacía que se le abriera el apetito. Cuando llegó el plato de pollo asado con especias del norte , casi se le cae la baba. Tenía que alimentarse bien y follar mejor; tenia un día duro por delante.

Mas tarde , cuando ya hubo comido , se subió a sus aposentos. En la cama estaba tumbada la cocinera ... ¿Giviana? O no , esa quizá fuese la anterior. Daba lo mismo , su belleza haría olvidar el nombre a cualquiera. Desnuda de pies a cabeza, insinuando sus curvas esbeltas en una postura que invitaba a todo. Una sonrisa floreaba en su rostro, no parecía forzada en esta mujer. Tenía verdaderas ganas de tener sexo con su rey. Eso le animó mas si es que era posible.

Se acercó dubitativo al borde de la cama. Siempre le resultaba curioso; había levantado un imperio a base de sangre y demostraciones de poder, pero acercarse a una mujer hermosa le continuaba produciendo un cosquilleo nervioso.

Paseó sus manos por las piernas de la joven y se estremeció al momento. Que sensitiva y que tersa era su piel.

-Mi rey - dijo ella con delicadeza - me vuelve loca que me toques así.

Las manos de Thadore siguieron su camino ascendente con suavidad. Sintió el calor de sus muslos desnudos y ella recompensó sus caricias con un leve gemido. El ardor por debajo de sus pantalones comenzaba a surgir con una intensidad frenética. 

La joven se acarició las tetas y se abrió un poco mas de piernas, parecía realmente excitada al ver su cara de placer. Sus gemidos apagados le embriagaban. Thadore se desnudó rápidamente , exultante, deseando entrar dentro de su mujer. 

Besó sus cálidos labios rojos y ella le agarró del pelo con fuerza. Cuando sus bocas se fundieron , un fuego recorrió lentamente sus cuerpos desnudos , pegados el uno al otro; inseparables. Su verga estaba dura y entró en la joven con facilidad: su mujer de esta noche estaba húmeda por completo. Cuando entró en ella recibió un suspiro en sus labios , luego un gemido potente seguido de unos arañazos en la espalda y un mordisco en el cuello.

-Eres una salvaje -dijo Thadore entre gemidos, agarró su delicado cuello con fuerza y la penetró mas profundo - me encanta de esta forma.

La mujer se contrajo como un animal desbocado cuando la recibió y clavó mas sus zarpas.

-ahh - gimió - Mas dentro. !Mas dentro! - le exigió. Apretó las nalgas de Thadore con sus piernas.

Se colocó un poco mejor y empujó.

-ohh... Asi. !!Asi¡¡ - gritó ella. La sentía toda dentro. A Thadore le excitaba que fuera tan fogosa.

El ritmo de sus latidos se hizo mas intenso , igual que sus gemidos , mientras Thadore la follaba.  La penetraba , la agarraba con fuerza , le mordía las tetas. Ella gritaba , empujaba con sus piernas , le arañaba el pecho...

Entonces surgió una ondulación extraña delante de Thadore. Se quedo boquiabierto y se desconcentró

-Sigue! Sigue!

Había sido casi imperceptible pero lo había visto. Quizá solo fuera el cansancio del momento. Continuó con mas intensidad si cabe. La joven parecía disfrutarlo. Pero pasado un momento, volvió a suceder.

¿Que demonios era eso? ¿Se estaba volviendo loco de veras, como decían muchos a sus espaldas? Había sido como si la imagen de la mujer desnuda que tenía debajo fluctuara , se combara y volviera a su sitió. Todo muy rápido. No pudo evitar fruncir el ceño y parar.

Los Guerreros de la JusticiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora