Una Nueva Manada • STEREK - SCIAM •

Capítulo 45

[NARRADOR]

En la casa Lydia estaba a los gritos, desesperada, asustada, ya tres veces había soltado sus gritos desgarradores de banshee que estremecían a los que estuvieran cerca.

- Debemos ir, debemos buscarlos. - Dijo Lydia en medio de sollozos.

- ¿Cómo? No podemos salir, hay ceniza de montaña rodeándonos. Y aunque pudiéramos salir no sabemos a donde ir. - Dijo Thomas.

- No lo sé, no lo sé. - Se quejó por un dolor en su nuca.

Sin pensarlo dos veces, aunque con miedo la banshee corrió hacia la entrada de la casa y abrió la puerta con facilidad saliendo afuera, rompiendo así el círculo.

- Pero.... ¿qué? - Dijo Faith.

Lydia comenzó a caminar, llegó a su carro y se montó en él.

- Vamos tras ella. Ella sabe a dónde va, lo ha hecho antes. - Dijo Malia.

- Pero si sabe dónde va quiere decir que.... - Dijo Kira.

- Ya hay muertos. - Malia asintió.

Se montaron en otro auto y siguieron a Lydia.

(...)

Melissa y Deaton llegaron tan pronto como pudieron a la fábrica abandonada.

Deaton acudió primero a estabilizar y quitar la bala de la manada de Derek, pues llevaban más tiempo con ella y era más rápido estabilizarlos.

Stiles tenía a Derek nuevamente en sus brazos.

- Si tuviera una moneda por cada vez que te he tenido así en mis brazos.... tendría tres, creo. - Dijo el menor.

- Si pudiera me quedaría una eternidad en esta posición, la vista es increíble. - Luego de hablar escupió sangre.

- ¡MELISSA! - Gritó Stiles desesperado.

Pero la enfermera estaba tratando de detener el sangrado de Liam para luego poder cerrarlo, sabiendo que sanaría sólo en unos días.

La mujer no podía entender y hasta le resultó extraño ver tanta preocupación por parte de su hijo hacia el herido, lo entendía, era su beta.... pero ¿para llorar?

- Tranquilo hijo, no morirá, es fuerte y es un hombre lobo.... como tú. - Le dijo tratando de tranquilizarlo.

(...)

Lydia detuvo el auto y bajó corriendo, los demás iban tras ella. Entró en la fábrica y vio el cuerpo muerto de Caleb, se asustó pero no se sorprendió, los otros en cambio si lo hicieron.

Más adentro se veían sobre unas mesas viejas y oxidadas el veterinario sonriendo por haber salvado a Cora, Isaac y Jackson. La banshee corrió y sin pensarlo, sin mirar el cuerpo muerto de Noah y los inconscientes Kevin y Lauren, visualizó a su novio y lo abrazó fuerte.

- Creí que te había perdido. - Le susurró.

- No, no dos veces. - Respondió Jackson

Thomas, Malia y Kira estaban sorprendidos por la escena frente a sus ojos.

- Stiles, necesitaré que me des permiso. - Dijo Deaton.

El joven miró a su compañero de vida a los ojos, éste le asintió, finalmente le dio espacio para que intentaran salvarlo.

(...)

Los adultos mayores habían dado órdenes de salir del lugar, pues perturbaban en su concentración, encima no tenían todos los elementos que sí tendrían en el hospital, pero no había tiempo de ir a uno.