La Cazadora de Serpientes (Draco Malfoy)

Capitulo 28 (Corregido)

-¿De qué querías hablar?

-Quiero que rompas el compromiso- Reena miró al chico fijamente

-No voy a hacer eso.

-¿Por qué?- la chica se quedó perpleja ante la respuesta de Dorian

-Ya te lo dije, me gustas- el chico sonreía-.No voy a dejar que te vayas con otro que no sea yo. Además- su sonrisa ya no era dulce-,se que sientes algo por mí, aunque solo sea atracción.

-Dorian, yo quiero a Draco- los intensos ojos azules de Dorian la miraban fijamente-.Por eso no quiero casarme contigo-la estaba poniendo muy nerviosa su mirada. Parecía que estuviese leyendo a través de sus palabras-.Por eso te pido amablemente que lo hagas.

-Lo siento, pero mi respuesta sigue siendo la misma- dijo Dorian-.Además no puedo dejar que te cases con el hijo de un mortífago y mucho menos con un Malfoy.

-¿Pero cómo te atreves a decir eso?- su mano salió disparada, pero Dorian la frenó.

-Solo he remarcado un hecho- la fuerza de su agarre aumentó mientras cogía la otra mano de la chica para sujetarla-.No voy a dejar que otro chico te tenga- su mano libre sujetó la cintura de Reena-.Cuando mis padres me lo propusieron, acepte encantado. No me lo pensé un solo segundo- el cuerpo de la chica chocó contra la pared. Algo invisible le sujetó las manos contra la pared-.Hacia tiempo que me había fijado en ti, pero siempre estabas con Malfoy y sus amigos mortifagos, así que era muy difícil acercarme- su rostro estaba muy cerca del de Reena. Podía notar el roce de sus labios con cada palabra que decía-.Siempre me parecía raro que solo fueses la amiga de Malfoy. Mi hermano me dijo que nunca os habías acostado, bueno no solo con él, no te habías acostado con ninguno, y la verdad eso me hizo muy feliz. Saber que te tendría solo para mí- Reena intentó forcejear, pero solo consiguió que aquel conjuro de atadura se le clavase en las muñecas haciéndole daño-.Pero la noche de navidad...- su mirada se tornó furiosa-,ese maldito mortífago me quitó lo que era mío-sus ojos brillaban con verdadero odio-.Pero no pasa nada, porque pronto serás solo mía- junto sus labios con los de la chica con fuerza, cogiendo por sorpresa a Reena, que intentaba retirar la cabeza, pero la pared se lo impedía. Dorian se abrió paso a través de la boca de Reena con fuerza y urgencia. Sus mano recorrían el cuerpo de la chica subiéndole lentamente la camisa. Su boca dejó libre la de la chica para dirigirse hacia el cuello. Allí comenzó a darle suaves besos, que hacían que Reena se removiese incómoda debajo de él. Con una malvada sonrisa en el rostro Dorian le mordió fuerte el cuello haciendo que esta soltase un leve grito, lo que complació enormemente al chico-.Esto solo es una prueba de lo que puedo darte si estás conmigo-y pequeño hilo de sangre bajó por su cuello-.Es mejor que vayas a clase si no quieres llegar tarde- el conjuro desapareció provocando que la chica se deslizase hasta el suelo. Con un fuerte dolor en las muñecas y en el cuello.

Tras darle un último beso Dorian se alejo de allí, dejando a Reena totalmente confundida y desconcertada.

-¿Te encuentras bien?. No has ido a Historia de la Magia, ni a pociones- Jessica se tiró en su cama- ¿Reena?- la chica miró a su compañera. Estaba tumbada boca abajo con la cara apoyada en la almohada y Medianoche a su lado-.¿Reena?- Jessica agitó a su compañera preocupada- .¿Qué te pasa?. Dímelo- la del pelo azul negó con la cabeza. Sabía que si se lo contaba a Jessica, esta se lo diría a Draco y era lo último que quería. Que el rubio montase en cólera y fuese a pegar a Dorian y este se riese de él.

-Me duele la cabeza- fue la única contestación de la chica.

-Vale, entonces te dejo tranquila –Jessica salió por la puerta no muy convencida por la excusa de su amiga.