Punto de vista de Noah:
Los rayos del sol alcanzan mis ojos obligándome a despertarme. Miro al techo de mi habitación, y no paro de pensar cada uno de los detalles de esa habitación dónde estuve cinco años. Pero nada, solo recuerdo una vieja cama, una minúscula cama, recuerdo como el frío del suelo subía por mi cuerpo provocándome un escalofrío, porque recuerdo que nunca me ponía zapatos. Recuerdo vagamente una voz, una voz que me decía cosas de las que ahora no puedo acordarme. Y sobretodo, un hombre, un hombre que perturbaba mis sueños, tanto de noche como de día. La pared estaba rugosa, lo recuerdo porque siempre seguía con el dedo los rayos de luz que entraban de una pequeña claraboya. Y la hoja, como no iba a acordarme de la hoja, era la única prueba que tenia de que había algo más allí fuera, algo más fuera de la habitación. Había una hoja encajada en la claraboya, nunca había visto otro ser vivo aparte de mi madre, el hombre que venia por las noches y las plantas secas. Yo nunca me había visto en un espejo. Y tanto que me acuerdo de la habitación, pero, ¿qué va hacer Denovan con toda la información? Esa hoja de un árbol seguramente ya no estará.
Se está haciendo tarde, así que me levanto para vestirme. Recuerdo que he de ir a buscar a Wendy, y mis comisuras se elevan formando una sonrisa automáticamente. Se ilumina la pantalla de mi móvil, mensaje de James Denovan: "Tengo malas noticias". ¿Con qué se refiere a malas noticias?... No la han encontrado. Un vacío invade mi cuerpo en cuestión de segundos, cómo es posible, era la tercera búsqueda y la última.
[19/4 07:06] James Denovan: Tengo malas noticias.
[19/4 07:06] Noah Andersen: ¿No la han encontrado cierto?
[19/4 07:07] James Denovan: No... Han hecho lo que han podido.
[19/4 07:07] Noah Andersen: ¿Lo que han podido? pero si no la han buscado ni tres días.
[19/4 07:08] James Denovan: La llevan buscando hace mucho tiempo Noah, si no la han encontrado es que no la han encontrado.
No contesto, hasta que la pantalla de mi móvil se vuelve a iluminar, otro mensaje de James: "Creemos que está muerta Noah". Tiro con toda mi fuerza el móvil al suelo, provocando que se rompa en mil pedazos, reflejando mi situación actual.
Punto de vista de Wendy:
Noah viene tarde, creo que voy a ir a pie al instituto. Nunca me había recogido tarde. Hoy toca Club de Arte Dramático, y lo último que quiero es llegar tarde. No responde mis mensajes, así que dejo su casco en casa y me dirijo al instituto. De camino me encuentro a Ben, me pregunta donde está Noah, él también lo está buscando.
Toca literatura, me siento en mi sitio y Amanda mira extrañada el sitio de Noah.
- ¿Dónde está? - Me pregunta.
- No lo sé, no responde a mis mensajes - le respondo.
Me mira confusa, y vuelve su mirada al pupitre, algo le preocupa.
Suena el timbre, saco mi móvil, aun no responde. Hasta que abre la puerta de la clase, ¿por qué viene a segunda hora?
- ¿Dónde estabas? - le pregunto mientras deja sus cosas en el pupitre. Huele mucho a tabaco.
- Me he despertado tarde - se limita a decirme.
- Me lo habrías dicho por teléfono - espero que note que estoy enfadada.
- Se me ha roto - ¿como que se lee ha roto?
La conversación se acaba cuando el profesor nos obliga a callar. Lo miro, está muy nervioso. Miro a Amanda, y se nota que se preocupa por porqué no le quita ojo. Le paso una nota a Amanda diciendo:
"¿Sabes que le pasa?"
A lo que me responde que no, pero que huele mucho a tabaco, eso quiere decir que es otra vez su madre. ¿Cómo que su madre? La miro y me dice que luego hablamos a lo que simplemente asiento.
Finalmente, es la hora del patio.
- Digo que es un problema de su madre - me vuelve a repetir.
- ¿Pero por qué su madre? ¿Qué pasa con su madre?
- No tengo ni idea, solo que esta le marco mucho de pequeño.
- Yo he visto su madre, y parece muy alegre y normal - le digo recordando los cuadros que había encontrado en casa de Noah.
- ¿La has visto? ¿Cómo es? A mí nunca me la había enseñado.
- Bueno, la vi en unas fotos de su casa...
- Esa debe de ser su tía, él no tiene fotos de su madre
- Pero, aun tengo una pregunta, ¿cómo sabes que es su madre? - Le pregunto.
- Hace mucho tiempo, cuando nos conocimos el fumaba muchísimo, y me contó que le ayudaba con el asunto de su madre, pero nunca me contó que asunto, meses mas tarde, le ayudé a dejar el tabaco pero ahora ha vuelto a él.
- Así que, ¿todo lo que le está pasando es por el asunto de su madre? - pregunto.
- Si, probablemente sí.
He estado todo el día pensando en lo me dijo Amanda, e intento recordar si Noah me había contado algo de su madre, pero no. Necesito saber que le paso con ella, pero primero tengo que hablar con el. Finalmente, decido ir a su casa.
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EL LADRÓN DE WALL STREET
Ficção AdolescenteNunca has mirado una persona y te has preguntado: ¿cómo habrá sido su pasado? Imagínate todas las respuestas posibles, pues estas, ninguna se parecerá a la historia de Noah Andersen. Descubre el significado del amor en esta apasionante aventura don...