Punto de vista de Wendy:
No he tenido otro remedio que jurarle a Noah que no iba a preguntarle a James del caso de Noah. Pero una pregunta ronda una y otra vez en mi cabeza y es: ¿de que se trata?, ¿Será algo tan malo que no se lo quiera contar a nadie? ¿Algo demasiado embarazoso para contarlo?
- ¿Al menos me puedes decir porque no se lo quieres contar a nadie? – Le digo a Noah por teléfono. Ya estoy en casa, después de un día terrible.
- A nadie no, lo saben mis tíos, James, los policías... - y se detiene.
- ¿Así que el caso es tan importante que has involucrado policías? – Digo yo haciendo un importante hallazgo.
- Déjalo – dice, parece cansado...
- Y si lo descubro por mi misma... ¿te enfadarás? – Pregunto.
- Sí...bueno...no – dice inseguro. Su voz esta apagada, seguro que no quiere hablar del tema... Así que intento sacar otro.
- ¿Mañana vendrás a recogerme? – Sonrío en solo pensarlo.
- Si, ¿tienes aún el casco? – pregunta inseguro.
- Bueno, habrá que limpiarlo un poco del polvo pero si – le digo bromeando.
- Ja-ja-ja, que graciosa - dice riéndose. Puedo notar su respiración desde el otro lado de la línea telefónica. – Una pregunta - añade.
- Dime – digo.
- ¿Des de hace cuanto James sale con tu madre? – Sabia que tarde o temprano me iba a hacer esa pregunta.
- Pues desde hace más o menos nueve años – digo.
- ¿Y aun no se ha casado con tu madre? – También sabia que iba a decir eso, este chico es muy predecible.
- No, y espero que no lo haga.
- ¿Qué te pasa con el? Al menos a mí me cae bien – dice.
- No me cae bien, se cree que puede substituir a mi padre – le digo finalmente.
- Si me permites preguntar... ¿Qué le paso a tu padre? – algo me dice que no conteste a eso, pero finalmente digo.
- Te lo diré si me cuentas lo de tu madre – espero que cuela.
- Vale pues no hace falta que me lo digas – dice riendo.
"¿Pero que le habrá pasado?" se pregunta mi cabeza una y otra vez. Hasta que finalmente me duermo con esa pregunta.
*
Punto de vista de Wendy:
Hoy llueve muchísimo. Suerte que Noah me viene a recoger. Preparo mis cosas y el casco y solo me queda almorzar. Al pasar por delante del pasillo de mi apartamento veo el despacho de James al fondo. James no duerme aquí, pero como que a veces viene a ver a mi madre y la casa además es muy grande tiene una habitación aquí, bueno, un despacho.
Sé que le prometí a Noah no preguntarle a James sobre su caso, pero no se lo estoy preguntando sino que espiando. Abro la puerta y veo su ordenado despacho. Busco con la mirada el típico archivador donde se encuentran todos los documentos, pero nada. Hay dos posibles respuestas a esto; lo tiene guardado en el despacho de casa o donde trabaja.
Le dije ayer a Noah que si se enfadaría por si lo acabo resolviendo yo y me dijo que no, así que... Tengo un plan, iré a visitar dos veces a James, pero ¿con qué excusa si nunca lo voy a visitar? Ya se me ocurrirá luego. Suena el timbre, ya debe de ser Noah. Le digo el portero del edificio que le abra la puerta y finalmente sube. A la vez que el ascensor abre sus puertas me abalanzo sobre el y le soy un fuerte abrazo. Lo echaba de menos. Huelo su cara colonia, podría estar oliendo esto el resto de mi vida. Y en este momento, abrazada en los brazos de Noah Andersen me doy cuenta de la suerte que tengo, tantísimas chicas desearían estar en mi lugar, ¿Qué verá en mi que no tengan otras?
- Me encanta donde vives en serio – dice Noah sacándome absolutamente de mis pensamientos.
- Ya si, el apartamento lo compró James para mi madre y a mí, es lo único acertado que ha hecho – digo y veo como él se limita a voltear los ojos.
- ¿Estas lista? – Me pregunta bajándose el vidrio negro del casco y dándome la mano.
- Sí – y hago lo mismo.
Todo el viaje en moto con lluvia fue increíble. Veo como Amanda esta sentada en su pupitre de siempre pero el mio esta ocupado. Es un chico, un chico que no había visto en mi vida. Veo como Noah se adelanta y coge el chico del jersey, y le dice brutamente que se levante y que ese no es su sitio.
- Tranquilízate no pasa nada – le digo a Noah cogiéndole de la mano. Ahora entiendo porque no venia al instituto, se pone muy nervioso cuando entra por esas puertas.
- No, no ya me voy – dice el chico nuevo cogiendo todas sus cosas.
- No tenías que...- y el chico se va dejándome con la palabra en la boca.
Veo como Amanda clava la mirada en Noah y le susurra:
-Tenemos que hablar – a lo que Noah solo asiente.
No es que sea celosa pero ¿qué le habrá querido decir con eso de "tenemos que hablar"? Llega el profesor y dice.
- Hoy tenemos un chico nuevo, se llama Brooklyn Stones – dice el profesor. Y veo que Noah no se limita ni a mirarlo.
Por primera vez, levanto la mirada y me fijo en ese chico. Parece nervioso y lo entiendo; yo también he tenido el primer día.
Nota del autor:
En estos capítulos no habrá punto de vista de Noah ya que os haría un gran spoiler.
![](https://img.wattpad.com/cover/66354146-288-k585474.jpg)
ESTÁS LEYENDO
EL LADRÓN DE WALL STREET
Novela JuvenilNunca has mirado una persona y te has preguntado: ¿cómo habrá sido su pasado? Imagínate todas las respuestas posibles, pues estas, ninguna se parecerá a la historia de Noah Andersen. Descubre el significado del amor en esta apasionante aventura don...