Capitulo 17

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Pasaron como dos meses, yo ya estaba en Madrid, mis dias en Salou habian acabado. Yo seguia pensando en Jorge y en que es de su vida, porque tiene un hijo en comun conmigo que le quedan escasos 2 meses para nacer, debo confesarlo, aun me acuerdo de el a diario.

Cuando mis padres se enteraron que estaba embarazada de Jorge, casi me cortan la cabeza, o lo que es peor, casi me cosen mi querida vagina. El caso es que me he levantado de buen humor, o lo mejor que se puede, ya que llevo un bebe dentro de mi, asi que cogi y llame a Jorge...

-Hola Jorge, ¿ te acuerdas de mi? Soy Alexis ... La de la playa ...

- Alexis, ¡que alegria enserio! ¿que tal todo, que tal nuestro hijo?

-Bien, por aqui todo bien, tu hijo esta bien, nacera en dos meses ... ¿ cuando te podre ver?

-Muy dentro de poco, porque voy a ir a Madrid y asi podre pasar unos dias contigo y asi estar apoyandote, ya que he sido un cabron y en este tiempo no te he podido ayudar...

- Vale, perfecto, oye me tengo que marchar, voy a ver si empiezo a estudiar y a ponerme al dia con las clases... Te quiero, Jorge.

-Y yo mucho mas a ti, Alexis.

Me despedi de el con un dolor en el pecho, que llegue a pensar que se me salia el corazon.

Eran sobre las 5 de la tarde y me puse a ver el temario que me tocaba este curso, una mierda, biologia, fisica y quimica ... pff todo una mierda.

Mas tarde cuando llegaron las 9, cene, y en seguida me fui a dormir.

Al dia siguiente me levante muy emocionada por empezar de nuevo las clases, eran las 7, me meti en la ducha, me vesti y desayune lo mas rapido posible, cogi la mochila y sali de camino del instituto, eran las 8:05.

Llegue al instituto, mire las listas y conocia a todos, solo que al principio solo me caia bien, Sara, una chica de al menos 1,65 de estatura y morena.

Cuando entramos me sente con ella, ya que no hablaba con ella desde que me cambie de club de baloncesto, al lado se nos sentaron dos chicos, uno se llamaba Alvaro y otro se llamaba Hugo.

Alvaro es un chico alto, muy alto, rubio, con unos ojazos azules verdoso, y un cuerpo que enamora, estaba muy bueno, pero me caia mal, el año pasado nos insultabamos y nos odiabamos, creo que seguimos igual, creo.

La primera semana de clase transcurrio normal, solo hablaba con Sara, y nos contabamos todas nuestras aventurillas, yo le conte la mia con Jorge, que por cierto iba a venir el fin de semana.

Llego el viernes por la tarde, hice los deberes porque el sabado iba a ver a Jorge y el domingo jugaba y no iba a tener tiempo.

Estaba tan tan emocionada y a la vez tan cansada, que me quede dormida en el sofa.

10 VeranosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora