20. Recuerdo (XVIII).

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04 de Mayo, 2014.

Había escuchado bien, ¿verdad? Taehyung era libre desde hace un mes... ¿Estaba soñando? El dolor que sentí al pellizcarme me devolvió a la realidad. Esto no era un sueño. Tae estaba frente a mí. Diciéndome que había terminado con Paulette.

– Hey Stone, reacciona. – V movía su mano frente a mí haciéndome reaccionar.

– Sí sí aquí estoy. – Contesté apresurada.

– Trae tu cámara. – Sonaba tranquilo. – Hoy capturaremos al sol-y eso fue todo. Con una sonrisa hacía explotar mi corazón.

Salí de mi apartamento con un suéter blanco holgado, unos jeans y mis converse color negro, mi cabello agarrado en una sencilla coleta y mi morral donde llevaba la cámara y demás. Taehyung me esperaba en la puerta principal y una vez con él me dirigí hacia donde él iba; no tenía ni la más mínima idea de a donde iríamos pero si estaba con él todo estaba bien. Ya no tenía que preocuparme por terceros; sólo seríamos nosotros dos.

Aquél día se pasó más rápido de lo que pude haber querido: Habíamos tenido una "cita", por así decirlo. En la mañana nos dirigimos a Central Park, con su característico ambiente fresco y los grandes y frondosos árboles que acompañaban su paisaje; tomamos bellas fotografías del sol comenzando a mostrarse, dando los primeros rayos de luz y pintando el cielo de diversos tonos amarillentos y rojizos. Luego tuvimos un agradable desayuno en el Uptown para después vagar por toda la ciudad durante varias horas; y entre risas, juegos, edificios enormes, conversaciones sin sentido, autos recorriendo las calles, gente transitando por la acera y una felicidad enorme se habían llegado las cinco y media. Ni siquiera habíamos comido. A esa hora él y yo ya estábamos de vuelta en central Park sentados en una banca que había, admirando las copas de los árboles en una tranquilidad reconfortante, comiéndonos nuestros respectivos helados que habíamos comprado minutos atrás.

– ¿Qué piensas de esto? – Dijo V rompiendo el silencio que había.

Tardé en contestarle, puesto que no sabía a qué se refería exactamente con esa cuestión.

– Pues me gusta donde vivo y la escuela es muy buena, puedo decir que me gusta esto. – Lo miré de reojo y noté como soltó una sonrisa ladina con la mirada fija en un punto muerto.

– Supongo. – Fue lo único que se escuchó salir de su boca.

Nos quedamos sentados hasta que se dieron las ocho en punto, sólo admirando como las sombras reflejadas en el suelo se hacían más grandes mientras que el sol se escondía conforme el tiempo.

– Gracias por traerme pero... Era innecesario, ¿Sabes? Me queda muy cerca de casa y... – Paré en seco cuando sentí en mis mejillas las suaves manos de Taehyung, seguido de sus dulces labios sobre mi frente, depositando un corto pero a la vez magnífico beso. Tal vez hasta mágico.

– Buenas noches, Stone. Dulces sueños. – Y después de decir aquello caminó con pasos agigantados, alejándose de mi vista y dejándome con un lío en mi cabeza.

Esa noche no pude conciliar el sueño por su culpa. Así que decidí adelantar trabajos al ritmo de lo que mi reproductor quisiera poner.

08 de Mayo, 2014.

Dalton School, Nueva York.

– Entonces me ayudarás, ¿verdad YoonGi? – Le hablaba al chico a lado mío. Él sólo se dedicaba a mirar las partituras expuestas ante su frente con concentración, eso, o simplemente estaba mirando aquello mientras que su mente viajaba por otros rumbos.

– Claro que sí te ayudaré-mostró una pequeña sonrisa, para después posar sus manos sobre el instrumento y empezar con aquella pasión característica de su persona, mientras que yo sólo me limitaba a observarlo y escuchar la melodiosa armonía que emitía el piano.

Old Days, memories» Taehyung BTS [김태형] 🔖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora