26. Recuerdo (XXIII).

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10 de julio, 2014.

― No, gracias Taehyung ―respondí ante su anterior pregunta. Me había ofrecido un poco de jugo en la botella.

― Bueno ―me sonrió delicadamente. Devolví el gesto, pero duró menos de lo que hubiera querido.

No sabía qué sentía en este momento. No sabía cómo comportarme ahora.

No sabía nada.

Taehyung era el mismo, hasta podría jurar que estaba más aliviado debido a lo que me dijo. Ese día... Sentí un golpe desgarrador y mi corazón lloró. Lloró, porque sabía lo que significaba todo aquello que me reveló Tae. Pero en esos momentos yo no quería aceptarlo.

Ese día estuvimos juntos como cualquier otro día antes del viaje. Y al igual que aquellos paseos, nos divertimos en cantidad. Reímos hasta llorar y caminamos a la par del otro. Pero... Yo no me sentía del todo feliz. No como aquellos días.



03 de Agosto, 2008.

Taehyung hablaba con una niña que era un poco más alta que él, al parecer eran cercanos, por la forma en la que se jalaban del brazo y se reían. Todo era normal, hasta que llegó un punto en el que se abrazaron.

Y él sonrió.

Y yo no. Yo me quedé ahí parada, con una punzada que fue creciendo en mi pecho, y con la fotografía que había tomado para V. Era la primera fotografía que tomaba y la más especial.

Otro día se la daré. Pensé. Y me fui, lentamente, arrastrando los pies como si me costara caminar, dejando a Tae y la chica atrás.





01 de Agosto, 2014.

Era viernes y para ser sinceros no tenía nada que hacer, así que llamé a Susan para vernos, si es que la dejaban salir. Afortunadamente, pudo salir conmigo, por lo que estaba afuera de mi edificio esperándola.

― Lamento haberte hecho esperar, mi madre no quería que fuéramos solas, pero la convencí ―habló Susan una vez llegó.

― No te preocupes, ¿nos vamos?

A pesar de llevar ya unos meses en la ciudad todavía había lugares a los que no había ido, así que fuimos a un museo que si bien no quedaba muy cerca podíamos ir perfectamente a pie a un paso considerablemente lento. Una vez en el lugar pude observar las distintas pinturas surrealistas que en ese día se exponían y la verdad me quedaba impresionada: a parte de la técnica, el significado de las obras por parte de Susan mostraba un sentimiento único, a ella definitivamente le aficionaba ese estilo. Cada obra que veíamos era un momento de hablar sobre el autor y la pintura en sí, y aunque, no era mucho el conocimiento acerca del tema podía entender a lo que se refería Susan cuando me explicaba.

Ese día me puse a pensar en todo lo que nuestra mente intenta ocultar, en esos pensamientos abismales, en aquellos océanos lejanos del puerto al que nos limitamos y lo profundo que es el mar.





07 de Agosto, 2014.

Mi relación con Jimin había vuelto a la normalidad. Ya no más comportamientos extraños. O eso aparentaba, puesto que le sentía tenso algunas veces. O también podía ser que el que Hoseok estuviera con nosotros influyera, y para no ser frío conmigo en frente de él sonreía como si no importase los días anteriores. Cualquiera que fuese la verdad, me sentía muy bien estando ahí, con ese par que realmente se había vuelto muy cercano.

No estaba segura del lugar en donde estábamos, porque ese día llegaron muy temprano y de sorpresa al departamento, me vendaron los ojos y me llevaron en auto a no sé dónde. Lo único que sabía, era que aquello era un centro comercial y que nos divertíamos mucho en el área de juegos. Después de jugar bastante tiempo vimos una película en el cine que había ahí. Entre los dos se lanzaban palomitas y yo, debido a que estaba entre ellos, recibí varios proyectiles de maíz. Tuve que pegarles para que dejaran su pequeña guerra.

― Jimin ―susurré para no molestar a la demás gente mientras pasaba la escena en la pantalla.

― Dime ―volteó y pasó algo que no me esperaba. Nuestros rostros quedaron lo suficientemente cerca como para... Bueno, ni siquiera me atrevo a decirlo. Abrí los ojos de más pero... Nos quedamos ahí. Él no hizo ademán de moverse y yo tampoco alejé mi cabeza. Me había quedado estática.

Intenté procesar aquello cuando Hoseok tosió intencionalmente haciendo que nos apartáramos y siguiéramos viendo la película. No sé si él se habría sentido igual que yo, pero fue incómodo después de reaccionar.

...

V: Stone, ¿tienes algo? No nos hemos visto tanto. ¿Quieres salir mañana?

Me: Claro, me encantaría V.

V: Está bien, buenas noches.

Me: Buenas noches.

Sé que ha pasado un mes desde que me lo dijiste Tae, pero desde esos días ha sido un poco difícil de asimilarlo... perdón.




18 de Agosto, 2014.

¡Hoy era lunes! Lunes de volver a la escuela. Pero no estaba malhumorada ni nada de eso. De alguna forma, el día había amanecido con un buen tiempo y las nubes estaban parciamente esparcidas por el cielo.

Hoy será un buen día, resonaba en mi cabeza.

Me levanté e hice la rutina que siempre hacía en día escolar, por lo que ya estaba lista para irme.

Me dirigí hacia la entrada del edificio donde Taehyung ya me esperaba y nos dispusimos a caminar rumbo a la escuela.

Durante el trayecto él y yo hablábamos de cosas sin sentido como la mayor parte del tiempo, hasta que una llamada en el teléfono de Tae nos interrumpió. Me di una vaga idea de quién era.

Y acerté.

En el camino restante para llegar se la pasó hablando por teléfono con ella.

Bueno, aún no se acaba el día, pensé.



Dalton School, N.Y.

Todos hablaban de lo que habían hecho en vacaciones mientras que yo tenía los audífonos puestos, una melodía de piano sonaba a través de estos cuando el profesor Williams entró y audazmente empezó a hablar.

― Estudiantes míos, es un placer saludarlos de nuevo en este nuevo ciclo, recordándoles que ya les falta un año para graduarse de esta institución ―empezó felizmente y con una sonrisa en el rostro―. Yo les impartiré ahora la materia de-

El profesor se vio interrumpido por alguien que tocaba la puerta.

― Disculpe que lo moleste profesor, pero la directora quiere ver a alguien de su clase ―habló la causante de la interrupción a la clase una vez que le abrieron la puerta.

― Está bien, ¿a quién busca?

― Lia Stone ―La mayor parte se giró para verme. No sé por qué siempre voltean todos cuando alguien es nombrado. Se sentía como si hubieras hecho algo malo.

¿Para qué me querría la directora?

― Por favor, Lia, acompaña a la señorita.

― Claro.

Durante el recorrido por el pasillo, me preguntaba si realmente hoy sería un buen día o si mi instinto me había fallado. Pensamientos vagaban por mi mente, haciendo el camino más silencioso de lo normal. Tanto que se escuchaba el eco de nuestros pasos.

Una vez en frente de la oficina de la directora, la chica abrió la puerta y me dejó pasar primero, para así cerrar de nuevo ésta una vez que la directora le dijo que lo hiciera. Hizo un ademán con la mano para que me sentara y así lo hice. Se aclaró la garganta y suspiró.

― Tenemos que hablar de un asunto importante, Lia.

Puede que hoy no fuese un buen día al parecer.







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Stone está en problemas. Jiji.

Kim, te extraño ;-;

Jas, no empieces.

♥ Besos y abrazos con love ♥ 

Watson.

Old Days, memories» Taehyung BTS [김태형] 🔖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora