Reencarnación® #Wattys2016 (SerieRe#1)

18: "Reencuentro"

Me encontraba agachada despidiéndome de toda la manada casi llorando. Ya ha pasado un mes y Lucia estaría esperándome hoy en su local, para llevarme al departamento que tenia de más. El día de ayer caze más de la cuenta para dejarles algo de comida y hoy, ya con mis cosas preparadas dejaría lo que fue mi hogar por diez meses.

—Gracias por todo —les digo a todos viendo como los cachorros, ahora no tan cachorros, llorisquean y les sonrió—. Prometo volver todas las semanas y traerles algo rico para comer, ¿vale? —todos aúllan y yo rió—. Los quiero tanto, mi familia —finalizo y tomo mis cosas caminando hacia la salida, me doy media vuelta y con lágrimas en mis ojos los saludo con mi mano.

Camino tristemente hacia el local y al entrar saludo con un abrazo a Lucia que me sonríe antes de exclamar:

—¡Feliz cumpleaños! —yo sonrío y vuelvo a abrazarla—. Tengo un regalo para ti.

—No debiste hacerlo, todo lo que me estás dando ahora es demasiado —ella sonríe con ternura.

—No costó tanto, es algo que de verdad querías —la miro confusa— ¿Recuerdas ese papel que me firmaste hace una semana? —yo asiento—. Vale, era un documento.

—¿De qué? —pregunto asustada y curiosa.

—Ahora —hace una pausa—, eres oficialmente Emma Benson —se me corta la respiración y pego un grito de felicidad abrazándola. Ella era Lucia Benson y en un momento cuando hablábamos le dije que quería cambiarme el apellido y ella cumplió mi deseo, le tengo un gran cariño a esta mujer.

—Gracias —vuelvo a decirle—. Enserio no sé como pagártelo.

—No tienes que hacer nada dulzura —me dice con cariño—. Y otra cosa —agrega y la miro sonriendo—. Hable con el director y le conté tu situación —fruncí el ceño al oírla—. No le dije que eras tú tonta —suelta una risa y yo suelto un suspiro—. Le dije que por problemas personales no habías podido terminar tu ultimo año y dijo que el lunes que viene te harán una prueba donde verán si en unos meses puedes graduarte.

—¡Muchas gracias! —exclamo abrazándola nuevamente.

—Vale —da unas palmaditas en mi espalda—. Ahora te mostraré donde te quedarás —asiento y la sigo. Cruza la calle a un edificio y subimos al 2° piso, donde abre una puerta y me deja ver el hermoso departamento donde me quedaría. Era acogedor y eso lo hacía perfecto para mi, volví a agradecerle y cuando se fue decidí salir a encontrar un trabajo y con el dinero que tenia comprarme un celular.

Me coloco un jean, una blusa y una botas con un poco de tacón, encima me pongo una chaqueta que use solo un par de veces y me miro al espejo. "Esta es la nueva Emma" Digo para mí misma y sonrió confiada, nadie podrá destruirme. Ni Ellos, ni nadie que conociera.

Tal vez todos se sorprendan al verme pero no me importa, por fin tengo 18 años y puedo hacer lo que quiera con mi vida. Terminaré el instituto, ahorraré un poco de dinero y me iré de aquí, alejándome de todo lo que me daño por siempre. Al principio dolió dejar de pensar quien era mi familia, mis amigos pero todo eso cambio cuando los lobos me aceptaron como una más de las suyas, ellos son mi familia ahora. Y no pienso acercarme aun menos cuando se que los pondría en peligro.

Salgo del piso, poniendo en un bolso todo lo que necesitaría. Agradezco que Lucia haya sido tan buena conmigo y me haya dado cosas que ella no necesitaba porque si no, no tendría nada. Cruzo la calle mirando hacia ambos lados y entro al local avisándole lo que haría a ella por si me buscaba.

Camino hasta que encuentro un local donde venden móviles, al entrar veo como los ojos de la vendedora se agrandan y yo le sonrió.

—Hola —saludo—. Quisiera comprar un celular —pido, ella asiente rápidamente y yo sonrió aun más al ver su reacción.