Adoptada

Dia nueve.

Creía que había muerto... Y todo había acabado pero no... Desperté, al parecer Tomás sí se había ido y me había dejado. Ya no sentía dolor, eso era lo más extraño.

Bere estaba tirada en el suelo... Susurraba cosas que me asustaban.

—Bere... Estoy bien..

—...

—Bere... Responde... Te necesito, no me dejes ahora.

—...

—Necesito a alguien cuerdo, necesito no caer en esta locura que me entristece más... Respóndeme Bere.

—Tú... Casi mueres.
Fue lo único que dijo...

—Pero... No Bere, no iba a dejarte sola, no he olvidado la promesa.

Ya no dijo más, al parecer me había dormido todo el día. Ya que ya estaban prendidas las luces. Me levanté lento y comencé a ver mi cuerpo... Estaba lleno de moretones... Suponía que mi cara estaba igual... Deforme...

—Tú... Un monstruo... Dijo Bere destrozando mi corazón en mil pedazos.

—Sólo... Es maquillaje... No... No te asustes. Se quitará.

Mi cara estaba mal... No podía verla pero podía sentir mi ojo hinchado y mi labio partido...
Entró Tomás y me vio así... Cerró la puerta detrás de si para que nadie entrara.

—Me dejaste... Dije enojada.

—¿Cuando?

—Ayer... Me dejaste tirada y te fuiste...

—No es así, yo fui por el botiquín. Es sólo que te desmayaste y sané tus heridas pero... Jamás te deje... Nunca lo haría

—¿Y qué pasó con Juan?

—Sólo le dije que su esposa lo necesitaba más que estar aquí contigo. Así que se fue.

—No entiendo, por qué a veces dejan las cámaras solas...

—No creen que nadie pueda escaparse... Además las únicas personas que les interesan en este momento son ustedes y nadie más.

Él volteó a ver a Bere... Él no sabía que Bere estaba siento atacada por el virus.

—Bere...

—Sí, está mal... Debo sacarla de aquí. ¿Qué hacen ahora Juan y Lucía? Le dije

—Juan está a cargo, Lucía... Está en en hospital.

—¿La mandé al hospital?

—Sí... Y tú deberías ir también, yo te llevaría... Estás muy mal... Si tan sólo pudiera sacarte de aquí...

—¿¡Sacar de aquí a quién!?

Rayos era Juan, estaba detrás de la puerta escuchando... Él nos había escuchado... Era el fin seguro era el fin.