Capitulo 3 : La propuesta

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Pasaron los años y decidí no contar nada a nadie. Mantenía mis poderes en secreto y procuraba no usarlos. Conforme fui madurando cada vez me preguntaba porque a mi, yo no necesitaba mis poderes para nada, derecho algunas veces incluso estorbaban.
           En lo que voy a explicar ahora es donde verdaderamente empezó a cambiar mi vida.
     Tenia doce años, no recuerdo con exactitud que estaba haciendo, pero si recuerdo que fue interrumpido por el sonido de mi ventana abriéndose, me acerque a esta con cautela y la cerre bastante extrañada. Me giré y escudriñe cada rincon de mi cuarto. Me sente en la cama, me lleve las manos a la cabeza mientras bostezaba y me deje caer en la cama cerrando los ojos un par de segundos, cuando los abri encontre a un hombre mirándome. Grité y alcé mis manos para mover mi escritorio con mi quinesis y así dejarlo inconsciente hasta que mi madre volviese del trabajo, sin embargo el hombre desapareció justo cuando la mesa iba a chocar con su cuerpo. Me gire y le vi al otro lado de la cama, mirándome impasible, en ese instante comprendí que no era humano e intente salir corriendo, sin embargo el hombre susurro unas palabras indescifrables que impidieron que pudiese moverme petrificando todos y cada uno de los músculos que había en mi cuerpo.
- Katherine, estuve aquí hace seis años y te di un don que se que has descubierto- me miro a los ojos, y sentí como su mirada llegaba hasta mi mente- No voy ha hacerte daño, pero si quiero proponerte algo- sentí que retomaba el control sobre mi cuerpo, me senté en la cama intrigada- como ya has visto no soy humano, y aunque puede que no lo parezca, soy un ángel- y mientras pronunciaba esas palabras se quito la chaqueta y pude ver unas enormes y lustrosas alas blancas- yo y los míos te necesitamos, al igual que el resto de este mundo. Te propongo salvarte a ti, a tu familia y a todos los que te importan, pero para eso tendrás que poner en peligro tú vida, y tendrás que venir conmigo.
Le miré con sorpresa, supongo que tenia miedo, pero la verdad creo que mi respuesta fue de lo más egoísta, ¿pero que se esperaba?

Memorias de un ángel. #AllInAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora