JAMES (sin editar)

III

Rene besa mi mejilla repetidas veces y yo me quejo. Son besos babosos, pero pasa su lengua por mi mejilla y termino riendo.

—¡Ya!

Veo como su blanca sonrisa ilumina su rostro y despeina mi cabello. Cierro los ojos y río.

—Mi pequeña hermana está creciendo.

Le saco la lengua y él sigue cocinando. Escucho a Jessie maldecir y frunzo el ceño luego de escuchar sus gritos. Bajo del taburete y camino a la habitación.

—¡Que no te quiero volver a ver, Mason!

Me cruzo de brazos y me pego al marco de la puerta. Jessie camina de un lado a otro en la habitación y su melena corta se agita con cada sacudida de su cabeza. Tiene los ojos llenos de furia y aprieta los dientes. Vaya que está enojada.

—¡Vete a la mierda!

Cuelga el teléfono y suelta un gruñido poco normal en ella.

Jessi lleva dos días (contando hoy) conmigo y Renee. Duermo con mi hermano, quiero darle su espacio a Jessie y pasar un poco de tiempo con mi hermano. La ranita tiene horarios más pesados que antes y solo le veo en la mañana y casi madrugada.

—¿Mason? —pregunto y ella vuelve a gruñir.

—Es un grano en el culo —masculla y suspiro.

Me acerco a ella y la siento en la cama.

—Hay que sacar ese grano mañana.

Ella sonríe y asiente. 

Mañana será viernes ¡al fin! Luego de lo sucedido en el elevador no pasó nada interesante, solo que Jessie me atacó con preguntas sobre lo que paso dentro de ahí y de solo recordar la corriente me estremezco y la piel se me eriza.

—Tenemos media hora para arreglarnos.

Abro los ojos como platos y salgo volando a la habitación de mi hermano. Me quito el pijama lo más rápido que he hecho antes en mi vida y entro la ducha. Salgo cinco minutos después y corro como una loca a mi habitación por mi ropa, y de paso veo el trasero bronceado de Jessie. Rene está dentro de la habitación y arrojo la ropa en la cama y me meto en el baño con la ropa interior. A duras penas me pongo el sujetador y las bragas. Corro de regreso y veo a Rene solo en boxers. Él me mira divertido.

—¡Ah! Pero querías dormir tarde anoche —se burla y ni me detengo a decir algo.

Dando saltos me subo los jeans y meto la blusa por mi cabeza. Tomo los tacones, la chaqueta y salgo corriendo mientras escucho la risa asmática de Rene. Dejo las cosas sobre la mesa que esta junto a la puerta y regreso a mi habitación donde Jessie tiene la cama llena de ropa.

—¡Es tarde!

—¡Lo sé, demonios!

Tomo el peine y comienzo a quitar los nudos de mi cabello. Gruño cuando el peine se traba varias veces en mi cabello y de un tirón me arranco una bolita de cabello castaño. Miro a Jessie, le arrojo el peine y ella lo atrapa en el aire. Me pongo los tacones y me pinto los labios de carmesí.

—Vayámonos!   

Salimos como alma que lleva el diablo y a tiempo récord llegamos a la oficina. Me arrojo sobre mi silla jadeando y acomodo mi chaqueta. Mi jefa pasa y murmuro un "Buenos días" antes de ponerme a teclear varias cosas.

Pasan varias horas cuando aparece Rick.

—Hola, muñeca.

Sonrió un poco y muevo la cabeza en forma de saludo.