El Caballo Negro

El perdón

En ese momento Ochette quedó maravillada con la hermosa apariencia del caballo negro, apesar de que ella ya lo había visto antes. Extendio su mano para intentar tocarlo, pero el caballo se lo impidió alejándose unos pocos pasos de ellas y por último alejándose completamente.

En cambio Alia no estaba tan encantada e impresionada como Ochette, de hecho, hasta le preguntó a Ochette "¿como podía ser un simple caballo la figura que tanto habíamos estado buscando, la figura por la cual tuve que mentirle a mi madre, la figura por la cual casi terminanamos con nuestra amistad?"

Ochette le dijo "talvez solamente es un simple caballo pero ese caballo nos salvó la vida en bastantes ocasiones, sea un simple caballo o no, le debemos la vida".

Ambas dejaron su conversación y fueron a buscar a Philip, sin embargo cuando fueron a donde habían dejado al zorrito vieron que esa parte del bosque fue afectada por la explosión ya que esta estaba muy cerca de lo más profundo del bosque.

Cuando Ochette vio esto, se sintió terrible al ver que Philip no estaba, y todo por ir a buscar una figura misteriosa.

Sin embargo, Alia le toco el hombro y señalo hacia la derecha en donde se encontraba el zorrito blanco. Ochette se secó las lágrimas y fue directamente a abrasar a Philip.

Por otro lado, los padres de Ochette estaban entrando en el bosque gritando el nombre de su hija, con la esperanza de que ella estuviese bien y respondiera.

Dentro de un rato los padres de Ochette se adentraron en lo más profundo del bosque, al ver que todo el centro del bosque estaba destruido creyeron que no volverían a ver a Ochette nunca jamás, pero para su suerte visualizaron a lo lejos una larga cabellera negra y se alegraron bastante al ver que esta cabellera pertenecía a Ochette.

Inmediatamente fueron corriendo, abrazaron a Ochette y le dijeron que lamentaban de corazón todo lo que ellos les habían hecho durante tanto tiempo y que apartir de ese momento la tratarían con verdadero amor.

Al ver la sincera disculpa de sus padres,Ochette los perdonó y se disculpó por haberse escapado de casa y prometió que nunca se escaparía otra vez.

Gabriela le dijo que si ella no hubiera escapado ellos nunca la hubieran salido a buscar y jamás llegarían a esa disculpa. Luego de esto se abrazaron por última vez y regresaron a la casa, pero esta vez llevaron a Philip con ellos.

Gracias a que El Caballo Negro apareció, pudo ser posible este perdón, ya que sin él ni Ochette ni Alia hubiesen vívido para esa reconciliación.