El lobo

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Eran las 7 de la noche, estaba oscuro y lloviendo y Ochette estaba triste y sola en su casa pensando en la manera en que la mamá de Alia las había separado.
Se sentía tan triste que no quizo prepar la cena y mejor decidió quedarse en su habitación.

Cuando eran las 12:00 de la noche Ochette escuchó que algo golpeó su ventana, pero no hizo mucho caso. Un minuto después volvió a escuchar algo que golpeaba su ventana, pero tampoco hizo mucho caso. Un minuto después lo volvio a escuchar, pero estavez decidió mirar por su ventana para ver que o quien golpeaba su ventana y que bueno que lo hizo.

¡Era Alia! Tirando piedras por su ventana, Ochette bajó las escaleras y abrió la puerta de su casa y sin siquiera pensarlo abrazo a Alia diciendole que pensó que nunca la volvería a ver otravez.

Alia le dijo que iba a ir a su casa a partir de las 12 de la noche para que su madre no se diera cuenta. Le dijo que tenían que aprovechar para resolver el misterio antes de que su madre se enterara de que se estaba escapando en la noche.

Así que Ochette fue a buscar un abrigo de color rojo para protegerse de la lluvia y se fueron al bosque, fueron a donde estaba el zorrito, y buscaron pistas que las ayudaran a averiguar el misterio.

Pero lo único que encontraron era un rastro de sangre que estaba húmeda por lo que era reciente. Y aunque parecía ser una muy mala idea, decidieron seguir el rastro de sangre, lo que las llevó a un lobo negro que era tres veces más grande que ellas.

El lobo estaba sangrando en su pata delantera, y sus garras se veían del tamaño de la herida que tenía el zorro blanco en su pata, Alia le dijo a Ochette que se veía muy peligroso como para observarlo tan de cerca y que debían alejarse de ahí, pero lo dijo demaciado alto y el lobo sobrenatural las escuchó, y se abalanzó directamente hacia Ochette, como si quisiera comersela, y, dio un salto en el que ella pensó que sería su fin...

El lobo estaba sangrando en su pata delantera, y sus garras se veían del tamaño de la herida que tenía el zorro blanco en su pata, Alia le dijo a Ochette que se veía muy peligroso como para observarlo tan de cerca y que debían alejarse de ahí, per...

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...Cuando otra bestia enorme, mucho más grande que el lobo, lo empujó, evitando así que Ochette fuera devorada por el lobo.
Alia agarró a Ochette de la mano y se fueron corriendo lo más rápido que pudieron, y el zorro se fue corriendo con ellas.

Fueron al patio de la casa de Ochette, y se dieron cuenta de que el zorrito blanco las siguió, trataron de devolverlo pero el zorrito tenía demaciado miedo como para volver al bosque, así que Ochette se quedó con el zorro.

Alia le dijo que si no fuera por esa criatura misteriosa, no estaría hablando con ella ahora mismo. Ochette le dijo que el animal que le salvó la vida debia ser la figura imponente que habían estado buscando.

Y así era, ya estaban muy cerca de resolver el misterio.

Alia volvio a su casa puesto que eran las 3 de la mañana, y quedaron en volver a verse a la noche siguiente para resolver el misterio de una vez por todas.

El Caballo NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora