Continuaron corriendo atemorizados por el lobo, el cual corría demasiado rápido a diferencia de ellos, Philip cedió al miedo y abandonó a sus amigos, trepó un árbol lo más rápido que pudo y se escondió allí. El lobo estaba a punto de atraparlos, cua...
Ya porfin habia amanecido, era una mañana muy nublada y fría, Ochette no había dormido pensando en lo que pudo haber asustado al zorrito blanco, estaba ansiosa por averiguarlo así que inmediatamente fue a prepararle el desayuno a sus padres para poder ir al bosque.
Cuando terminó fue corriendo al bosque a buscar al zorro; de camino al bosque se encontro con Alia, su mejor amiga, así que Ochette aprovecha para contarle todo lo que le habia ocurrido el día anterior, Alia queda intrigada igual que Ochette, por el miedo inexplicable que tuvo el zorro, así que accede ir a averiguarlo con Ochette.
Una vez en el bosque, ambas empiezan a buscar al zorrito blanco, cuando todos los pájaros del cielo empezaron a volar muy deprisa hacia una misma dirección, asustados y desorientados.
Cuando Alia y Ochette miran en direccion opuesta al vuelo de los pájaros, observan una figura, hay una figura imponente, un animal majestuoso pero no miraron lo suficiente como para ver de que animal se trataba.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Observaron que otro animal empezó a atacarlo de tal manera que esa figura imponente cayó al suelo, Alia le dijo Ochette que debían salir de ahí, por lo menos hasta que las cosas se calmen un poco y ambas salieron del bosque asustadas y con muchísimas preguntas.
De pronto empezó a llover con gran fuerza y estruendo; como la casa de Alia estaba más cerca en ese momento corrieron hacia ella. Al entrar a la casa la madre de Alia les preguntó porque estaban tan asustadas así que ellas les contaron todo lo que había pasado, pero lo que hicieron fue enredarla mucho más, demodo que la madre de Alia mejor calló la conversacion dandoles unas tostadas con queso derretido y un poco de chocolate caliente.
Alcabo de una hora y media la lluvia paró y Ochette fue a su casa antes de que volviera a llover, pero antes de irse a su casa, le dijo a Alia que al día siguiente se encontrarian en el bosque para poder resolver el misterio de una vez por todas.
Cuando Ochette entro a su casa empezó a llover nuevamente muchísimo peor que antes. Ochette se dio cuenta de que sus padres no estaban en casa, y esto le intrigo un poco pero también la alivió, así que subió a su habitación a descansar un poco y a meditar sobre su extraño y misterioso día.
Descansar fue la mejor opción, puesto que en el día de mañana le esperaba otro día increíble y lleno de preguntas.
