Broken Hope #1 (Saga Broken)

Capítulo 9

Iba de camino al baño cuando una amiga de Mandy me tomó por los hombros.

—Hola, Ale.

—Hola, ¿Qué quieres?

Ella me sonrió, a partir de ese momento supe que era malo.

—Me he topado a Riley me dijo que lo vieras en la biblioteca, ahora.

Ella me guiño el ojo y después se fue.

Caminé hasta la biblioteca, abrí la puerta y no podía creer lo que estaba viendo, Mandy estaba besándose con Riley.

— ¿Riley?

Él se separó y me vio asustado.

—Ale...

—No digas nada, ya vi suficiente.

Salí de ahí casi corriendo, entré al baño y me metí en uno que estaba desocupado, ahí comencé a llorar.

Había sido una tonta, era obvio que él se iba a enamorar de Mandy, ella es rubia, alta, guapa y perfecta, mientras que yo era un monstruo, alguien que estaba marcada por una horrible cicatriz, que gracias a esto me había convertido en lo que era ahora, alguien que no merecía amor, era una bestia.

Había cubierto mi corazón con espinas para que nadie se atreviera a lastimarme, pero él lo estaba haciendo, me estaba lastimando y mucho, lo peor es que él no se daba cuenta que me estaba lastimando.

Me limpié las lágrimas y corrí por los pasillos en busca de Jess, ella estaba sentada haciendo tarea.

—Alexandra, te estuve buscando, pero no te encontré.

—Necesito que busques a Riley, le des las llaves y dile que se vaya solo.

Le di las llaves, mientras ella me miraba confundida.

— ¿Ha pasado algo malo?

—Algo así, por favor haz eso... Me siento mal.

Ella solo asintió con la cabeza, mientras yo recorría los pasillos.

Cuando llegué afuera, respire el aire fresco, después corrí hasta donde pude ser capaz de correr, después de ahí, caminé.

Odio mi vida, ¿Por qué me tenía que pasar esto?, mi vida era perfecta antes de esto, tenía amigos, iba a fiestas, hasta tenía el novio más guapo de toda el instituto, al recordarlo sentía una opresión en mi pecho, él me recordaba a Riley, pero ellos dos eran muy diferentes, mi primer amor tenía un problema y ese problema era el alcohol, al recordar esa noche no pude evitar llorar.

Me puse los lentes del sol, algo que había aprendido es que no debía de llorar en público, para mí era sinónimo de debilidad, no quería ser débil, por ese motivo cuando comenzaron con las burlas, tuve que defenderme y de ahí me gané mi apodo de "Bestia".

Para mí fue muy difícil, un día tenía todo, amigos, novio, popularidad, pero después del accidente era como si hubiera explotado mi burbuja, después de ello me quedé sola, sin novio, sin amigos... Aunque creo que nunca los tuve, creo que en realidad ellos nunca me quisieron, ya que si me hubieran querido, nunca se hubieran burlado de mí, pero después de todo, al final descubrí a personas que me quieran por lo que soy, como Jessie o Riley... Hasta el estúpido de Dylan, pero no podía, tenía que dejar que Riley fuera feliz con Mandy y si eso significa tratarlo mal y mostrarle que soy una bestia, por mí está bien.

Caminé hasta llegar a la mansión, entré a mi cuarto y comencé a dibujar, era como si estuviera poseída comencé a dibujar puras líneas y círculos, no tenía ningún sentido pero me hacía sentir mucho mejor.

Riley llegó y tocó la puerta de mi cuarto.

—Hola, Alexandra te estuve buscando por todo el instituto, escucha necesito explicarte.

—Riley, no tienes que explicarme nada. —Dije muy seca. —No quiero ser tu amiga, no quiero ser nada tuyo, así que lárgate de mi cuarto y si me vuelves a hablar te juro que te ponga cinta en la boca.... Aléjate de mí.

No sabía cómo estaba haciendo esto, con cada palabra que salía de mi boca mi corazón se quebraba un poco más.

— ¿Qué estás diciendo?

—Lo que escuchas, te detesto, te odio y te quiero fuera de mi vida.

—No, tienes que estar bromeando.

—Largo. —Dije.

Lo levanté, con empujones y gritos los saqué de mi cuarto, me encerré en mi cuarto, me quedé recargada en la puerta.

Comencé a descender mientras lloraba.

Tenía que hacer lo correcto, él sería más feliz con Mandy, ella es perfecto para él.

Riley logró abrir la puerta, además de que caí al suelo.

— ¿Qué haces en el suelo?

—El piso es cómodo.

Me ayudó a pararme.

— ¿Qué haces aquí?, quiero que te largues.

—No, no quieres que haga eso.

—Claro que sí.

Él me sujetó de los hombros y quedamos a muy pocos centímetros.

—No sé cuál sea el motivo por el cual me quieres alejar, pero por favor no, yo te quiero mucho. Si quieres que me alejé de tu vida veme a los ojos y dímelo.

No podía hacer eso, simplemente no podía.

—De acuerdo, no quiero que te alejes de mí, pero hoy te vi besándote con Mandy, ella es perfecta para ti.

— ¿Es real?, ella no es perfecta para mí, yo prefiero a las pelirrojas.

Le di un golpe en el hombre mientras reíamos.

—Escucha, si quieres ser novio de ella, yo no te lo impediré.

—No quiero hacer eso, por ahora solo quiero hacer una cosa... Ven.

Bajamos las escaleras de dos en dos, hasta que llegamos al jardín, donde había muchas luces entre los árboles, además de velas.

—Es hermoso....

Él me tomo de la mano y nos pusimos en medio.

Me sujetó de la cintura, él con un control puso música en el estéreo que estaba afuera.

La canción comenzó a sonar era Kiss me de Ed Sheeran.

Aventó el control y puso las dos manos en mi cintura, mientras ponía mis manos en su cuello.

Nos dejamos llevar por la música, íbamos lentos, era como si ya hubiéramos bailado mil veces, mi corazón con cada paso que dábamos se aceleraba, puse mi cabeza en su pecho mientras seguíamos bailando, vi que Jessi jalaba una cuerda desde un arbusto y miles de pétalos comenzaban a caer sobre nosotros.

Él me dio una vuelta y era como si estuviera en el paraíso.

—Escucha, sé que piensas que eres una bestia, pero para mí eres una princesa, eres la chica más hermosa de todo el mundo, no te debes sentir mal por tu físico, porque con el paso del tiempo se irá, mientras que lo de adentro se quedará hasta el día en el que mueras, yo no quiero a Mandy, yo te quiero a ti.

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