Karrie
Es como ver a Beth en una versión rubia y de ojos azules. De alguna forma, en el fondo, también se parece a Jules. Pero la mezcla completa de ambas actitudes logra crear a un tipo de chica que nunca había conocido antes. Una mezcla entre una apariencia dulce, una sonrisa sombría, una voz delicada y en el fondo pura maldad.
-¿Entonces me estás diciendo que Jules está en prisión y tengo que cuidar de esta chica, sin más razones?- pregunta algo incrédula, cambiando su posición en el sofá de cuero negro.
-Es una linda casa- la ignora Dallas. Desde que llegamos ha estado ignorando todas sus quejas y sus dudas, solo repitiendo cada par de minutos la misma frase sobre lo que estamos haciendo aquí.
Virginia se remueve en el asiento. Está incómoda y yo también lo estoy. No quiero quedarme a vivir aquí, aún cuando la seguridad está primero, necesito volver a Spring y ver a Jules.
-Son muebles costosos- dice Dallas a mi lado.
Virginia se incomoda aún más. La afirmación de Dallas le ha sentado mal de alguna forma. La veo mentalizándose para poder responder sin dejarse en evidencia. No es tan buena mentirosa como Beth o cualquiera de las personas con las que trabajo últimamente, pero es confiada y una persona que tiene suficiente confianza en si misma puede lograr cualquier cosa.
-¿Cómo pagas tus lujos?-
-Trabajo duro- responde muy rápido.
Dallas se sonríe -¿Por qué no me lo dijiste antes?-
-No necesitabas saberlo- otra vez responde muy rápido.
Dallas suelta una risita y luego ambos se vuelven a quedar en silencio por un largo par de minutos. Llegamos a Nevada hace dos horas, y lo único que hemos logrado de productivo es que no nos asesinaron los tres tipos armados que nos siguieron por ocho cuadras en su estúpido BMW. Estuve a punto de volver a desmayarme y vomité mi almuerzo, como si tuviese calorías para botar después de haber estado inconsciente y mal alimentada tanto tiempo.
-¿Cómo te llamas?- inquiere Virginia mirándome fijamente.
-Karrie- respondo, y muy rápido me arrepiento. No conozco a esta chica. Es prima de Jules, es familia, pero no me da confianza la mirada que me da. Debería haber inventado un nombre falso, algo que pudiera salvarme en caso de que no sea exactamente una aliada.
-Apenas lo recordaba- dice tras un suspiro -Nos conocimos una vez, hace tiempo. Dudo que me recuerdes, estabas de espaldas a mí, tirada en la cama de Jules, ¿fue así como conseguiste este trabajo?-
-Cierra la boca, Virginia- gruñe Dallas. Ella increíblemente obedece y se vuelve a remover por quinta o sexta vez en el asiento. -Lo que vamos a hacer es esto- comienza diciendo Dallas -Virginia va a decir que sí, volveré a Spring con la noticia, pero en dos horas te quiero fuera del país, lejos-
Ella se levanta y se aleja hacia el corredor, en ese momento puedo ver un tatuaje en su espalda, uno que he visto antes. Me quedo intentando recordar si es uno de los tatuajes de Jules, o si quizás lo vi en los brazos de Dallas pero en mi cabeza no puedo recordar donde vi algo similar. Es una mariposa negra, como una polilla, y en sus alas se dibujan rosas.
-¿Cómo quieres que me vaya del país? No puedo- dice, en sus ojos está esa expresión que terminaré sabiéndome de memoria. Todos en este negocio tienen esa mirada por lo menos una vez en la vida, y siempre es cuando han rozado un punto importante.
Beth enterándose de que Virginia va a entrar al juego
Jules pensando que voy a morir.
Jenna al verme golpeada.