"Que todo fluya sin que nada influya"

3 0 0
                                    

Yo la dibujé en una libreta al despertar. Se veía hermosa, pero inexistía. Aún faltaba por existir. Yo la hice existir, porque ya sabía que existía desde antes. Los dibujos eran mi forma de hacer existir ls cosas. Por eso eran hermosos, porque existían. Por eso ella era hermosa porque existía. 

Inexistente. Seguía despierta (creo) cuando ella paró en esa página, (¿Y si me quedé atrapada en mi sueño?) y me dijo con la mirada que se parecía a ella. Lo preguntó. Yo guardé silencio, para dejarle la duda. Sabía que volvería, y volvió. Ponía citas para todos, cuando eran para mi. ellos no lo sabían, porque pensaban que era para ellos. Siempre piensan que es para ellos cuando es para mi. La vida es para mi porque es mía. Y de ellos es ellos, porque son ellos. Pero ella era para mi. Y para todos, cada ella de ellos. 

Entiende la diferencia y acéptala. Puedes hacerlo. 

Ella se coloreó los labios con naranja. Porque el naranja es un color bonito. Y teníamos historia con el narajana. 

Los números estaban en nuestro contar. ¿Pero qué importa? Nosotros estábamos en contra de ellos. 

-¿Dónde estoy?

+"En el lugar donde llamo al único numero que me sé y me contestas tú"

Cada vez que cuentes esa historia, ellos van a pensar que la inventaste toda. Cuéntala en el orden incorrecto, para que se confundan. Cuéntales que ella era ella, cuando en realidad era otra. Cuéntales que a todos les decías lo mismo, que eran únicas. Porque todas eran ella, y ella eran todas. Cuentas bien revueltas bien revueltas que existen veces que desentiendes pero aún así explicas. Explicarles que existen veces que entiendes pero aún así descuentas. Descuentos. 

Lo contrario a la mitadWhere stories live. Discover now