Parte 11

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Eliza POV

Aquí estoy sentada en un helicóptero Dios sabe dónde me lleva, fuera otra persona realmente iría aterrada. Me siento muy segura al lado de Ali a pesar de ser tan dura, reservada con los demás tenemos una conexión las veces que la he visto bromear ha sido conmigo, voy feliz a donde me quiera llevar, me preocupa que después de haber leído su celular hace un rato quedo ensimismada mirando por la ventana. No sé si preguntarle aún no se su forma de actuar esperare a que lleguemos destino.

No sé en qué momento me dormí, me desperté y ya habíamos aterrizados sentí un frio enorme me abrace y apreté mi cuerpo, alguien se colocó a mi lado y me extendió un café.

-despertó la bella durmiente de su sueño eterno- Ali me entrega el café y una galletas

-¿ya llegamos?- tiritaba y no podía evitarlo, pensaría que estamos en el Himalaya

-no aún falta mucho, estoy esperando a Taylor que me trae algunas cosas, y Eli trata de no contraer la musculatura sentirás más frio así- me frota lo hombros, y veo que se quita su chaqueta de cuero y me la coloca.

-gracias- ella me sonríe y sale caminando esperando a Taylor, el café era realmente reconfortante, veo esto como unas vacaciones extremas, siempre he querido tomarme unas vacaciones sola, o acompañada de alguien agradable y esta era la oportunidad claramente los motivos eran nefastos aun así aprovechare de descansar donde sea. Era increíble lo tranquila que se ve Ali me siento muy segura a su lado, ayer sentí algo extraño como una opresión en el pecho cuando me saco del restaurant el hecho de pensar en poder perderla me asusta, sé que es su trabajo protegerme aun a costa de su vida pero no quiero que le pase algo.

Espero que todas la extracciones como las llamo ayer Ali hayan resultado un éxito. Trato de pensar en quien podría quererme tanto como para llevarme a la fuerza, podría haber golpeado la puerta y haberme pedido una cita.

En fin lo bueno de todo esto es que estaré un tiempo lejos de mi madre, la cual insiste en que tengo que sentar cabeza "hija ya tienes veintiséis años, tienes que pensar en casarte, Bell podría ser un buen partido o búscate algún actor" joder como odio que quiera siempre controlar todo, soporte que eligiera al manager, que escogiera la casa, cada vacaciones.

-princesa toma colócate esta ropa- me entrega un buzo térmico completo más una parca enorme. Todo me quedo pasado de talla, dos por lo menos. Observo fuera y a ella la veo lista.

-Eliza, dame tu ropa para ponerla en mi mochila- se la entrego y veo que la coloca en una gran mochila que se colocó en su espalda realmente era una chica fuerte.

Taylor se acercó a mí, para despedirse y me pidió un autógrafo para su hija, se lo firme con gusto. Camine junto a Ali y Wanda y vimos cómo se fue el Helicóptero.

Todo el lugar quedo oscurísimo sentía la brisa gélida atravesarnos me daba la impresión que estábamos en algún muelle, hasta a mis narices llego el clásico olor al mar

-¿estamos cerca del mar?- pregunto

-adivinaste ¿espero te guste navegar?- comenzó a caminar yo la seguí con susto jamás e navegado le tengo mucho miedo al mar ni siquiera sé nadar

-¿tenemos que subirnos a un barco?- se detiene y me mira alegre

-debo imaginar que tu princesa Disney no es la sirenita- se acerca y me toma las manos

-Ali no sé nadar- me sonrojo y pensé por que no hice caso a ir a clases con mi hermana

-princesa, no te preocupes solo estaremos sobre el barco un par de horas, y yo puedo nadar por las dos en caso de que tuviéramos algún accidente- acaricia mi mejilla y se voltea para iniciar marcha nuevamente.

Caminamos más o menos unos treinta minutos hasta llegar a un gran galpón con muchas puertas, me acerque a mirar y supuse que tras la puerta de metal estaba el barco oculto y así fue un barco de color azul llamado The commander apareció, solo con una linterna alumbraba el camino al barco.

-¿Por qué no enciendes las luces?- teniendo tantos focos encima por que arriesgarnos a sufrir un accidente por la poca visibilidad bueno esa era mi lógica.

-no quiero que nos vean salir, así que saldremos oscuras- baja una tabla ancha y me sujeta de la mano para que suba, lo hago y al instante siento en vaivén del agua, Wanda se veía bastante cómoda sobre el barco corría reconociendo cada lugar, movía su cola estaba demasiado feliz.

-chica ¿reconociste el barco?, y estoy igual de contenta- veo el rostro de Ali una sonrisa aparecía sus ojos verdes brillaban por la emoción.

-Eli te recomiendo entrar y tomar un camarote, no quiero que te asustes de caer, yo estaré poniendo en marcha el barco para acercarnos a donde vamos- iba a subir unas escaleras pero yo la detengo antes

-quiero ir contigo- le susurro, ella me toma de la mano y me ayuda a subir, me siento a su lado mientras echa andar todo y salimos al océano, realmente no se veía nada pero Ali seguía segura de lo que hacia

-¿Cómo logras saber por dónde vas?

-esto es como conducir un auto, también hay rutas marcadas como calles imaginarias, ese radar me indica si tengo en el camino algo y esa pantalla de acá me indica el lugar correcto donde vamos es imposible perderse-

Estábamos ya lejos de la costa lo veía en el radar y veo soltar los mandos a Ali por primera vez presiona un botón y me mira.

-cenemos algo, muero de hambre- había olvidado que solamente tenía en el estómago el café y la galleta la seguí.

-¿te gusta el pollo con arroz?- veo que saca unas bolsas tenía dos fuentes con pollo preparado hace poco.

-claro ¿Cómo conseguiste la comida?-

-es parte de la maniobra, cuando doy el avisó de silencio de radio se activa todo, mientras avise a mud ella lo acciono, inmediatamente gente llego al barco y lo preparo, obviamente nadie sabe dónde llegare es parte del juego – nos sentamos en la mesa a comer, realmente estaba delicioso

-¿A dónde vamos?- trato de que suelte algo de donde terminaremos

-no puedo decirlo aun- me sonríe maliciosamente

-déjame adivinar ¿base militar?-

-frio-

-¿algún recinto del gobierno?-

-frio, eres mala adivinando- se burla de mí, le lanzo una alverja del pollo –tranquila asesinada con alverjas-

-pensare que este es un secuestro- cruzo mis brazos molesta

-es un lugar seguro, nadie lo conoce más que yo, no es militar, ni del gobierno- levanta su plato y alcanza unos trozos de pastel de chocolate

-esperare no me queda más remedio- terminamos de cenar. Y me dirigí a un camarote me asombraba lo lindo que era todo, parecía un barco antiguo restaurado la murallas tenían un papel tapiz con rallas doradas y a la mitad madera caoba. La luz en la habitación que entre era muy tenue elegí ese lugar porque en la puerta había un cartel pegado que decía princesa.

Tenía una cama de dos plazas, un baño propio, un closet enorme y un tocador. Dentro del baño todo los implementos de útiles de aseo personales estaban nuevos, aproveche de darme una ducha el agua salía muy caliente. Me coloque ropa limpia del closet que seguía quedándome dos números más, no me quejaría ya que el frio que hacia fuera del barco era enorme.

Subo buscando a Ali y la veo en la proa sentada en una silla para tomar el sol contemplando el cielo, llego en silencio y le tapo la visión.

-ooo soltaron a los aliens- dice riendo y sentándose, le doy un puñetazo en el brazo

-simpática, te gusta mirar el cielo al parecer- me siento a su lado

-estar acá me releja, y ver las estrellas me da la sensación de que ellas me regalaron algo importante para mi vida, siento que algo cayó del cielo- sonrió -¿suena tonto?-

La miro se veía tan tierna arrugando la nariz –no suena tonto, me parece lindo que piense así- puedo ver que se sonroja y desvía la mirada de mi rostro, no se la razón pero mi corazón no dejaba de Zapatear en mi pecho jamás había tenido esta reacción por alguien.

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Otra oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora