Otra oportunidad

Parte 23

Quedamos en un silencio incomodo ninguna decía nada. Danielle fue la primera en soltar palabras

-¿cariño? A si te tratan tus guardaespaldas hermanita- la pequeña se acerca a Eliza desordenándole el cabello la rubia no era capaz de soltar palabras

-es una broma, ya que me da tantas ordenes- digo tratando de arreglar la situación, ahora la mini molestia se acerca a mí -¿las hijas?- cuando quiero que mi cerebro formule respuestas rápidas, el idiota se pierde, le doy una mirada rápida a Eliza que levantaba sus hombros, Abby nos mira divertida desde el sillón Eliza se torna roja como tomate.

-¿Qué está ocurriendo aquí?- pregunta esta vez la mujer mayor

-nada- contesta Eliza

-¿Por qué no cenamos?- digo caminando a la mesa y ayudando a Eliza a colocar todo estuvimos en silencio haciéndolo, sentíamos las miradas de las dos mujeres que susurraban cosas

-lo siento amor- le susurro

-creo que tendré que contarles- me acaricia la mano calmándome, estaba realmente nerviosa, nunca me he enfrentado a la familia de mis novias y ahora tenía a la hermana pequeña y a la mama buena de mi rubia.

-antes iré a escoger mi habitación- la mini molestia corrió por las escaleras, por debajo Eliza me da unas patadas la veo venir con los platos, los voy a sujetar y me hace un gesto apuntando las escaleras su rostro era de terror, y lo entendí, ya cuando corrí hacia la escalera, venia Danielle bajando con una polera mía y otra de Eliza y un zapato de cada cual.

Se paró en frente de todas, -seguirán diciendo que acá no pasa nada- suelta una carcajada, si estuviéramos en una competencia de quien está más roja sin duda sería un empate Eliza estaba muda.

-mira mama en una habitación, tenía ropa tirada por todos lados, la cama estaba desecha, pensé que desordenada mi hermana, pero mi hermana no calza 41 y no usa poleras sin manga, entonces dije Lex es un desorden andante, pero para mi sorpresa había un calzado 39 y una blusa de las favoritas de mi hermana y habían otras cosas más personales en el suelo juntitas -

Estaba en shock en mi vida había pasado por una situación así, Eliza estaba en las mismas que yo.

Abby sonreí y camino en frente mío, me abrazo –querida bienvenida a la familia-

-mama yo puedo explicarlo- escucho un hilo de voz proveniente de Eli

-hija no hay nada que explicar, el espíritu de Sherlock que posee tu hermana lo dejo claro- Abby me lleva hasta la mesa y me sienta al lado de Eli que me sonreía débilmente.

-¿pensaban mantener esto en secreto? Par de tortolitas- dice la gran molestia de hermana

-sí, pensé que no entenderían que me había enamorado de mi guardaespaldas-

-somos tu familia y si eres feliz te apoyaremos y tengan claro que tu papa piensa igual que nosotras- joder la mama de Eli es muy comprensiva quizás la mama mala me estaría matando en estos momentos, mi incomodidad continuaba.

-quiero pedir disculpa por mi falta de ética y enamorarme de mi jefa- bajo la mirada Eli me aprieta la mano

-cuando uno se enamora la ética no existe cariño- Abby era realmente comprensiva.