Otra oportunidad

Parte 26

Entre a la habitación y Alicia estaba con su pijama leyendo.

-ha sido un día intenso- me coloco el pijama, Alicia deja su libro en el velador

-demasiado, apúrate no puedo dormir si no te abrazo- me mira haciendo pucheros

-atrápeme- nos abrazamos y reímos y tuvimos guerra de cosquillas un golpe en la muralla hizo que nos detuviéramos

-hermanita, te dije tienen visitas-

-que te den hermanita- Alicia suelta una carcajada al oírme pelear con mi hermana

-Eliza ¿puedo dormir con ustedes esta noche?- me quede mirando con la morena extrañadas de la petición de mi hermana, Alicia me autoriza –ven bebita- a los segundo llego y se lanzó a la cama en medio.

-lo siento, esta casa es muy grande y tengo miedo- nos acostamos a su lado y conversamos un rato.

-Liz ¿Cómo puedes dormir sabiendo que vienen a por ti?- noto como tiemblan sus piernas

-bueno, cuesta pero con Alicia me siento segura, sé que ella me cuidara siempre- Alicia miro a mi hermana con ternura.

-cuñadita apuesto que te sacaron de clases sin preguntarte ni decir nada, y lo único que te dijeron fue quieren matarte- mi hermana dijo que si en un susurro

-disculpa la falta de tacto de mis compañeros, los militares solemos no ser muy suaves- veo que se gira y me mira con atención

-¿Por qué eres militar?-

-la verdad, fue una opción de vida para poder sobrevivir, desde los diez años que estuve en un regimiento- sé que ese tema a la morena le apesta recordar

-joder eres una cría militar, ¿y tus papas?- noto a ali quebrada –pues no lo sé, ni siquiera los recuerdo- suelta un suspiro. –Maldición Lex debo imaginar que has tenido una vida de mierda- mi hermana sin lugar a duda es una idiota.

-si es verdad, pero rescato lo positivo de todo, más ahora que tengo una motivación extra, tu hermana- veo que el rostro de mi hermana y el de la morena se ilumina

-ya te quiero cuñadita- le da un abrazo a la morena y se mueve a mi lado quedándose dormida al segundo, sin lugar a duda estaba agotada

-buenas noches Lex-

-buenas noches Clark-

Me desperté en la mañana por el sonido de unas risas desde el pateo, miro a mi cama y solo estaba Danielle, echa un ovillo abrazando la almohada de Ali, ¿Dónde estará Ali?. Vuelvo a oír las risas y me asome por la ventana, mi padre estaba sentado en la orilla del puente que atraviesa el rio, con una caña de pescar junto a Abby, al parecer a mi mama no le va bien con la caña no le resulta una voz me saca de esa escena

-son tiernos nuestros padres- mi hermana me abraza –gracias por permitirme dormir con ustedes- le acaricio la espalda –hermanita, no des las gracias- las dos seguimos observando cómo se divertían nuestros papas.

-yo quiero aprender a pescar- mi hermanita sale saltando y gritando como loca, siempre tan infantil.

Me duche y me apresure a salir, sin rastro de Lex me acerco a mis papas -¿han visto a Lex?-

-hija, está arreglando la calefacción, el motor central fallo, así que está en el sótano- veo como mi papa saca un gran pez, mi hermana trata de recibirlo pero el pez le pega y ella cae al piso, mi mama con la red lo apreso antes.

Pov Alicia

Maldición se supone que todos estos aparatos están casi nuevos, enciende quizás se tapó.

-amor ¿necesitas ayuda?- siento las manos de Eliza meterse bajo mi abdomen –amo tu abdomen marcado- me sonrojo y me estremezco por lo cerca de su voz puedo sentir su respiración en mi cuello. La tomo de las manos y la coloco en frente de mi -¿estas tratando de seducirme?- alzo una ceja, ella suelta una risita acercándose a mi rostro, rosamos nuestras narices siento su aliento –para Eli o no respondo- la amenazo pero ella continua pegándose a mí, ya no soporte más y me lance a sus labios, nos fundimos en un beso lleno de deseo ninguna aflojaba era una lucha interna entre nuestras lenguas, paramos unos segundos para poder respirar.

La tomo de la cintura pegándola a mí, nuestros ojos se conectan y puedo notar que me pierdo en el azul de sus ojos –¿se te perdió algo en mis ojos?- la rubia me pregunta mientras acaricia mis brazos que tenía descubiertos.

-acabo de perder todo ante ellos- le respondo, ella me mira de una manera cariñosa junta nuestras frentes y me acaricia la espalda mientras cruza sus piernas por mi cintura la apoye suavemente en mi mesa de trabajo –me quedaría toda la vida así Lex- me sonríe mientras me da un tierno besito –pues quedémonos así princesa-...

El motor de pronto comienza a funcionar haciendo saltar a la rubia –tranquila amor- ella se ruboriza me di vuelta para mirar el panel y verificando que estuviera correcto, me estremecí al sentir dos manos acariciándome los pechos, solté un gemido cuando me pellizcó un pezón –te gusta comandante- me excite con su voz ronca, me pego en la muralla y me mordisqueo el cuello y sus manos recorrían cada rincón de mi cuerpo, la temperatura me había aumentado considerablemente, siento el roce de su lengua devorarme un pecho jadee contra la muralla soltando un gemido alto, ella sonrió –shhhh caya nadie tiene por que enterarse que estoy abusando de ti- y eso fue gasolina en mis oídos, sentía la humedad en mi entrepierna moría por sentir a Eliza en mí, desde el día que estuvimos juntas que la deseo dentro de mí –Eli por favor- le ruego ella se separa ligeramente de mi -¿Qué quieres?- muerde mi lóbulo de la oreja

-necesito que me toques- susurre entre gemidos ya que esta rubia tenia fascinación con mis pechos- desabrocho mi pantalón y los bajo junto a mi ropa interior lentamente dejando besos en su camino comenzó a subir mirando cada parte de mi cuerpo y se detuvo en mi entre pierna, beso la parte interna de mis muslos y me sorprendió cuando se lanzó a mi parte íntima y me dio un mordisco fue doloroso pero a la vez excitante –oo eli – mi cadera se entregó a los movimientos de la rubia se notaba su inexperiencia pero poco a poco fue mejorando, me subía al cielo con cada movimiento, se separó un poco de mi mirándome a los ojos -eres jodidamente exquisita Lex- volvió a devorarme pero esta vez mis jadeos aumentaba y mis gemidos aumentaron considerablemente –Eli me corro- gemí. Ella sujeto mis caderas pegándome más a ella. Siento mi cuerpo tensarse, mis piernas temblar y la corriente eléctrica por todo mi cuerpo, los espasmos me mataban sentí un orgasmo increíble no podía sostenerme, perdí la coordinación del cuerpo, Eli lo noto y se abrazó y así quedamos varios minutos hasta que me recuperara.

-¿te sientes bien?- la rubia me llena de besitos por mi rostro sudado

-ha sido increíble- logro soltar aun tratando de regular la respiración

-te amo tanto Lex- beso sus hombros y entrelazo mis manos en las de ellas.

-cariño cuando termine esto, tienes que casarte conmigo- veo el rostro de Eli alegrarse y unas lágrimas corrían por sus mejillas, se las limpio y pego mi frente a la de ella

-eres lo más importante que tengo rubita, no imagino un futuro sin ti, amo tu risa, tu voz toda tú Desde el día que te vi me hechizaste. Mi corazón es totalmente tuyo, te lo entrego- me rodea con sus brazos sin dejar de llorar

-no llores amor, me gusta verte feliz- le digo suavemente –estoy feliz por tenerte- me beso y nos quedamos mirando por un buen rato.