QUAKE

𝟬𝟬𝟰 definition

• PRIMER ACTO •
CAPÍTULO CUATRO:
definición.

      Amber estaba mejorando increíblemente rápido. No obstante, habían días en que sufría recaídas que sólo lograban tirar abajo los ánimos de la chica. El resto del grupo intentaba animarla, aunque no tenían mucho éxito ya que reconocían que la situación por la que estaba pasando era una mala.

      Durante estos días, la morena se encerraba en su habitación. No salía en lo absoluto y, aunque Susan solía llevarle comida, ella sólo comía la mitad. El resto la pasaba durmiendo, y llorando un poco también. Normalmente, esto no solía durar más de un par de días pero, cuando se extendió a una semana, el equipo comenzó a preocuparse.

      Johnny se armó de valor y, con un golpe en la puerta, entró a la habitación de Amber. El rubio observó la habitación, la cual estaba desordenada e, inclusive, olía mal —. ¿Amber?—, llamó al no verla, pero entonces notó el bulto sobre la cama —. ¿Qué haces ahí dentro?—, preguntó y se acercó. Se sentó en la cama con cuidado y tocó suavemente el bulto.

      —Busco una razón para la cual levantarme y salir de aquí, pero no encuentro ninguna—, la voz de la morena salió ronca y seca debido al largo rato que había pasado sin emitir sonido.

      — ¿No quieres comer algo?—, sugirió con una mueca, sin saber qué decir —. Algo rico, no esa comida que te obligas a comer todos los días. Podríamos ir a un concierto de música, sé que te gustan.

      El silencio ponía nervioso a Johnny y, cuando estaba dispuesto a levantarse e irse, Amber se removió y su cabeza se elevó por entre las sábanas. Johnny la observó con atención, tenía unas grandes ojeras, su nariz roja e hinchada, al igual que sus ojos. El rubio sintió la necesidad de abrazar fuertemente a su amiga, pero no lo hizo, con temor a que ella rechazará la muestra de cariño.

      — ¿Qué cambio haría? Viviría ese lindo momento pero, ¿luego? Volvería a estar aquí, encerrada en estas cuatro paredes.

      —Por tu elección.

      —No tengo otra opción.

      —Siempre hay otra opción—, insistió Johnny, acercando un poco su mano inconscientemente.

      — ¿Cuál sugieres tú?

      —Vamos a cualquier concierto o festival en la ciudad, o veamos una película, o comamos. Probablemente no va a ejercer ningún cambio en tu vida diaria, pero así funciona. Tenemos momentos en los que sufrimos y momentos en los que disfrutaremos y, me gustaría decir, que el disfrute que puede ocurrir en unas horas, justifica todo el dolor anterior.

      — ¿Lo buscaste en internet, Johnny?—, preguntó Amber, después de un largo rato en silencio, con una pequeña sonrisa jugando en sus labios.

      —No, pero esto sí: ¿sabes cuál es la definición de terremoto?—, preguntó y la chica negó, sin entender a dónde quería llegar con todo eso —. Un terremoto es un movimiento brusco de la Tierra, causado por la brusca liberación de energía acumulada durante un largo tiempo.

      — ¿Es la definición de la R.A.E?—, inquirió Amber con burla —. Sigo sin ver tu punto.

      —El punto es que eso es lo que eres, Amber.

      — ¿Un movimiento brusco?

      —Una liberación de energía acumulada por mucho tiempo. Sé que suena raro, pero eso eres para mí. Estuviste sufriendo, toda tu vida y te hiciste la fuerte, aguantaste. Y ahora, estás liberando todo lo que sufriste en el pasado. Porque antes podías controlarte, y ahora no.

      —Gracias por recordármelo—, bufó.

      —Déjame terminar—, pidió Johnny, tomando la mano de la chica —. Liberas el dolor que sufriste, pero también liberas felicidad. Una felicidad que no entiendo de dónde o cómo conseguiste. Igualmente, esa alegría, esa risa y tus chistes me alegran a mí y al equipo. Y, si eres capaz de formar una sonrisa en los demás y cambiar sus vidas para mejor, creo que no deberías estar encerrada aquí dentro, sintiéndote miserable—, terminó, sin despegar la vista de los ojos de Amber. Ella tenía la boca levemente abierta y, cuando no emitió palabra alguna, el rubio se levantó. No obstante, el agarre que la chica mantuvo sobre su mano lo hizo retroceder.

      Johnny volvió a mirar a Amber, notando las lágrimas formarse dentro de sus ojos. Ella pestañeó, apartando las lágrimas, al mismo tiempo que se acercó al chico y lo abrazó.

      Al principio, Johnny no pudo creer que ella se haya levantado y lo haya abrazado, ella acostumbraba a rechazar cualquier contacto con cualquiera en esos momentos. Entonces, la envolvió con sus brazos, causando que a la chica se le escaparan todas las lágrimas que había estado guardando. Amber creyó que había un botón en su espalda que la hacía llorar, pero aún así no se alejó. En su lugar, apretó más fuerte sus brazos alrededor de su amigo.

      —Gracias—, murmuró después y Johnny la acercó aún más al escuchar su voz rota. Lo que la chica no sabía, era que él también había largado unas cuántas lágrimas a su par.