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• TERCER ACTO •CAPÍTULO DIECINUEVE:PÉRDIDA

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• TERCER ACTO •
CAPÍTULO DIECINUEVE:
PÉRDIDA.

                    Amber despertó ante el sonido del celular que no paraba de sonar

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                    Amber despertó ante el sonido del celular que no paraba de sonar. Ella guió sus ojos hasta donde Peter se encontraba buscando el celular y sonrió cuando notó que el aparato estaba sobre su falda.

      —Oye, arañita—, alzó la voz antes de tirar el aparato que no dejaba de sonar y Peter lo haya atrapado en el aire. Peter habló por unos minutos mientras Amber miraba su celular, quien tenía un mensaje de parte de Johnny.

JOHNNY | 12:40am
Dime y te paso a buscar

      Aunque a Amber le pareció extraño, prefirió no hacer preguntas. Y, cuando Peter anunció que tenía que ir a visitar a un amigo, ella le avisó a Johnny que necesitaba que la vaya a buscar. El cual no tardo en venir.

      — ¿Acaso atropellaste a alguien en el camino?—, preguntó Amber al subirse al vehículo —. Viniste muy rápido.

      —No iba a dejar que estés aquí sola—, se limitó a decir Johnny mientras manejaba y Amber lo miró.

      —Por favor, no me digas que ahora actuaras así—, rogó Amber ante la actitud protectora de Johnny. Bueno, debería decir sobre-protectora.

      —Si yo no hubiera ido, podrías estar muerta ahora.

      —La única razón por la que ustedes dos salieron ilesos fue porque llevaban sus trajes bajo su ropa. En cambio, yo no soy una loca que lleva todo el tiempo el traje encima—, reclamó Amber.

      —Ayer en la noche me dijiste que ser un héroe era parte de ti, entonces, ¿por qué no llevas tu traje contigo?—, inquirió Johnny y Amber bufó.

      —Johnny, no puedes andar siempre conmigo. Cada uno tiene su propia vida.

      —Sí; pero si tu vida está en peligro, entonces yo estaré aquí.

      — ¡Mi vida no esta en peligro porque puedo defenderme por mi misma!—, alzó la voz la castaña.

      —Eso lo sé—, Johnny mantenía la voz calma —. Pero si te perdiera, no me lo perdonaría—, dijo sincero el rubio y la castaña suspiro.

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